Cap. 9

67 5 0
                                    

Narra Brooke

—¡Feliz cumpleaños querida Brooke!—Cantaron todos los invitados y yo no podía de sonreír. Sobre todo porque habían miles de teléfonos grabando en este momento; momento que lo más probable es que terminará en alguna red social.

Terminaron de cantar y escuche muchos aplausos y silbidos.

—¡Pide un deseo!—Escuché la voz de mi hermana y asentí cerrando mis ojos.

"Quiero que todos los que estén aquí conmigo sean felices para toda la vida"

No necesito un tonto deseo de cumpleaños, tengo todo lo que siempre quise y más.

Sople las veinte velas en la torta y aplaudí con todos los demás.

—¡Que le de un mordisco!—Busque de dónde provino esa voz y al hacerlo me encontré con Harry sonriéndome. Estaba con una camisa negra, pantalones del mismo color y obvio, esmoquin del mismo color.

Todos gritaron a modo de aprobación y negué varias veces con mi cabeza.

—Pase mucho tiempo arreglándome, no arruinare mi maquillaje.

Luego de unos minutos la multitud se rindió y suspire aliviada, estuve bailando, saltando y sonriendo a cámaras por más de media hora y cuando ya estaba cansada decidí ir por un vaso de agua a la cocina la cual se encontraba vacía, no estaba permitido entrar aquí, órdenes de mi madre.

Cuando vi a Harry cruzar la puerta fruncí el ceño y me apoye en el mesón.

—Mi mamá te matará si te ve aquí.

—No lo creo...—Metió sus manos a los bolsillos de su pantalón.—Solo quiero hablar.

—¿De qué? ¿De que no era necesario que vinieras vestido así? Podías solo usar una polera y jeans.—Me encogí de hombros.

—Puedes quitarme la ropa si no te gusta..—Sonrió pícaro.

—Ni en tus grandes sueños.

Harry se acercó aún más a mi, quedando a un metro de distancia. Podía sentir perfectamente su perfume.

—Vine así porque sabía que tú estarías muy bonita, no podía lucir como un vago a tu lado.—Pasó su mirada por todo mi cuerpo. Mis mejillas se sonrojaron y sonreí tímida.—Te ves hermosa.

—No me gusta este vestido, he hablado con más de diez personas en el transcurso de esta fiesta y lo único que hacen es mirar mi escote.—Bufé.

—Excepto yo.—Guiño un ojo.—Aunque muero de ganas.

—¿Nunca dejas de hacerlo?—Ladee mi cabeza.

—¿Qué cosa?

—Coquetear, siempre lo estás haciendo. Con todas.

—¿Escucho celos?—Enarcó una ceja.

—Lo hiciste otra vez.—Rodé mis ojos.—Somos conocidos Harry, no sabes nada de mí y yo no sé nada de ti. No sé qué pretendes conmigo.

—No pretendo nada, Brooke.—Llevo un mechón detrás de mi oreja.—Lo siento si te incomode.

Asentí y el se alejó para tomar una botella de vodka y luego servirlo en dos vasos rojos plásticos.

—Ten.—Extendió el vaso hacia mí y negué.—¿Por que no?

—No bebo.

—¿No?—Sonó sorprendido.—Supongo que será tu primera vez.

Dude unos segundos pero al final accedí a tomar un pequeño sorbo.

El líquido quemo mi garganta y estoy segura que mi cara se desfiguro totalmente.

Doble caraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora