4장 ¿Una nueva vida?

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El viento soplaba fuertemente, la lluvia seguía cayendo sin tener la intención de detenerse. Sus ojos carmesí no dejaban de mirar al hombre que tenía a poca distancia de su cuerpo, sus emociones comenzaron a despertar, al igual que sus sentimientos; su duro corazón comenzó a latir desesperadamente en su pecho.

Sus manos querían tocar el rostro ajeno y así poder aceptar que lo tenía al frente suyo, a solo unos pasos, que podía abrazarlo y por fin reclamarlo como suyo, porque JongWoon había acudido a él sin necesidad de ser llamado.

La felicidad en el cuerpo del mayor, era infinita; por fin, sus sueños, aquellas conexiones que tenían, se podrían hacer realidad... más de lo que ya eran. Había llegado el momento de que estuviera al lado de su compañero, para siempre.

El joven de ojos negros no despegaba la mirada del hombre que tenía al frente, ahí estaba Cho Kyuhyun, la persona que se había apoderado de sus sueños, de su cuerpo y de su tranquilidad. Su pueblo había sido víctima de su rechazo y, no solo ellos, también la persona más importante para él: Minha.

Tenía tantas preguntas que hacer, no entendía por qué lo buscaba, por qué decía esas palabras de posesión cuando él siempre le decía que no era suyo, que no lo sería. La culpabilidad lo tenía envuelto de pies a cabeza, cayó todo lo que estaba sintiendo; no le dijo a nadie sobre sus sueños y, sobre todo, nunca le dijo a nadie que conocía a la persona que estaba siendo el causante de todas las muertes de sus compañeros y amigos.

Se sentía extraño y confuso. Siempre había sido una persona resistente, de cabeza fría, mas, en esa situación, la confusión y el odio, eran tan grandes, que no tenía la intención de dejar las cosas sin arreglo. Estaba ahí, sí, pero solo para dejar en claro que nunca estaría a su lado, que solo quería estar tranquilo y que su pueblo debía de volver a ser el mismo de antes.

-JongWoon.

Escuchó su nombre, sus ojos azabaches lo seguían mirando fijamente.

-Cho Kyuhyun... -susurró, observando cómo el vampiro se acercaba a él.

Los nervios aumentaban considerablemente, cada paso que daba el más alto, era un latido más a su corazón, sentía miedo, temor por todo lo que estaba sintiendo, sus fuerzas se estaban desvaneciendo como el soplido del viento.

Kyuhyun no podría describir cómo su cuerpo reaccionaba, no tenía un nombre en específico en la cabeza. Al estar, por fin, cerca de su pareja, de JongWoon, una de sus manos comenzó acercarse al rostro moreno que sus ojos veían con amor.

El cuerpo del más bajo no podía reaccionar, se encontraba igual que en sus sueños: poseído por esos ojos carmesí que lo dejaban completamente desnudo. Desvió la mirada, no quería caer, no debía hacerlo en un momento como ese.

-Mírame -pidió Kyuhyun, cogiéndole con suavidad la barbilla.

JongWoon obedeció nuevamente y sus ojos se posaron en los del otro. Kyuhyun sonrió y se acercó más, pudo sentir la respiración del moreno, tan cerca, tan dulce, tan embriagante como lo conocía.

-Tan perfecto -dijo el joven Conde, para besarlo con lentitud.

Los labios de ambos, se tocaron con suavidad, con dulzura, como si se conocieran, bailaban al mismo compas, disfrutando de la sensación tan delicada, sublime y llena de misterio.

JongWoon estaba a punto de perder el control, mas, al recordar todo, y la manera en cómo era dominado, abrió los ojos y mordió los labios ajenos, para después empujar el cuerpo que tenía al frente, haciendo caer en el pasto húmedo a Kyuhyun.

El joven Conde sonrió de lado el sentir tal impacto, era la primera vez que alguien se atrevía a morderlo y a empujarlo a la misma vez; se acomodó mejor en el suelo y vio, con alegría, a JongWoon mostrando indiferencia ante su acto. Le divertía conocer el verdadero carácter de su pareja.

{KyuSung} Dulce Tentación. ( Terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora