El cielo empieza a despejarse. Estrellado. Sopla una tímida brisa fría y ambos jóvenes se sienten a gusto afuera.
Hace unos momentos que decidieron salir de la fiesta, el ambiente adentro de la escuela aún era bastante cómodo y agradable, sin embargo Golden y Mai decidieron salir a tomar aire.
Sentados en uno de los muros de la escuela observan como lentamente las estrellas se hacen visibles
—¿Cómo se te ocurrió mandarme notas? — preguntó la albina con mucha curiosidad.
—¿Porqué acaso no te gustaban?—bromeó el rubio.
—No es eso.— respondió Mai con diversión— Es solo que nunca había conocido a alguien que haga este tipo de cosas, ¡Es que es una idea bastante alocada! Ni a mi se me hubiera ocurrido.
Golden asintió y por un momento se quedó pensativo, debía escoger bien su respuesta.
—Desde que te conocí llamaste de alguna manera mi atención, eras tan alegre y positiva en cualquier situación, parecía que podías mejorarlo todo con una sonrisa. Yo realmente admiraba eso, hasta ahora lo hago, sin darte cuenta me mostraste que si te mantienes positivo todo saldrá bien...eras rara pero era una rareza muy tierna y special, es por eso que el día que te vi triste sentí la necesidad de ayudarte, quería volver a ver la sonrisa de la hermosa chica rara.
Mai se quedó perpleja, no sabía que decir ni hacer en ese momento, lo que Golden acababa de decir eran probablemente las palabras más bonitas que le hubieran dicho .
En su estómago se había formado una sensación extraña, mientras en su rostro se mostraba un adorable sonrojo.
Golden la ve y le desordena un poco el cabello.
—Gracias.— susurra Mai con una sonrisa en el rostro — Gracias...por todo.
—No tienes porque...
—¡Sí!— exclamó — Tengo que agradecerte, En mi vida...hubo momentos en los que pensé que ya no tenía salida, que nada mejoraría...quería alejarme de todo y de todos, huir y no volver nunca, perdí mi sonrisa, mis amigos estaban preocupados y mi familia mucho más.
La albina hizo una pequeña pausa pero luego continúo.
—Entonces fue cuando encontré una nota, al principio pensé que era la broma de alguien...pero luego empezaron a llegar más y mis días desde entonces empezaron a mejorar. Esas notas hicieron que me diera cuenta que ponerse triste no era la solución... Las cosas en mi vida cambiaron gracias a ti lámparita.
Sin darse cuenta los ojos amatista se cristalizaron, Golden se dio cuenta de esto y la abrazó. Nunca le había gustado verla llorar, ella era una chica realmente fuerte y valiente, pero las personas valientes y fuertes también se ponen tristes.
Los latidos se multiplican por mil en el pecho de Mai cuando Golden se aproxima más a ella. No puede ser. Aquello que está imaginando debe ser producto de su imaginación.
Golden, en cambio, sonríe. De una forma divertida. Persigue su mirada esquiva, atrapándola en la suya.
— Yo te quiero.— confiesa Golden con una dulce sonrisa.— Por ello...me gustaría saber si al menos con esas simples notas, llegaste a quererme...aunque sea un poco.
Le tiemblan los labios al hablar. Empieza a ponerse nervioso, tal vez no fue buena idea confesarle sus sentimientos, tal vez fue demasiado pronto.
— ¿Lo dices enserio? ¿No es una broma?
—¿Cómo va a ser una broma?
— Perdón, es que no sería la primera que me gastan hoy— respondió avergonzada. — Yo también te quiero y no soportaría que luego te retractaras...
— No...lo mío no es ninguna broma.
Los dos se miran, Mai sonríe. Golden la sujeta con una mano por la cintura y con la otra aparta el pelo de la cara hasta recogérselo detrás de una oreja. Sus labios, como dos imanes, se atraen provocando un beso. Aquel beso que ambos estaban esperando en la noche más triste y feliz de sus vidas.
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Hello, no tengo mucho que decir solo agradecer por leer (a pesar de lo corto del capítulo). Trataré de terminar pronto esta historia para luego concluir la historia Springle :T y iniciar con otros proyectos que tengo pensados. En fin nuevamente les voy a gradecer y hacerles saber que los quiero. <3
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Hey, Chica Rara♡ [MariGold]♡ TERMINADA
FanfictionÉl siempre le envía notas. Ella siempre las lee. Él trata de ayudarla. Ella lo permite. Él solo quiere ver su sonrisa. Ella oculta un secreto "A veces las cosas no son como parecen...." Te quiere, una Lámpara. . . . Creadora de...