cap. 9

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Y ahí estaba Ashton, junto a una mesa con dos velas en el centro y dos platos con cubiertos.

Ashton: Toma asiento.

Fuiste a la mesa, Ashton te colocó en la silla, como un caballero.

Calum: Nosotros seremos vuestros camareros.

Eva: Sí. Pero solo por esta noche, eh. -reisteis.

Sirvieron el primer plato: Espagueti a la boloñesa.

-¿Espagueti a la boloñesa por la noche?

Ashton: No comas si no quieres...

-¿Estás de broma? ¡Adoro los espagueti!

Ashton: Menos mal, es de lo poco que sé cocinar. -soltaste una carcajada. -¡Es verdad! -se rió. -¿Te gustan?

-¡Están riquísimos! Ya sé quien me va a cocinar a partir de ahora.

Ashton: Sería un placer, señorita. -sonreiste.

Acabasteis el primer plato, y Eva os sirvió el segundo: Tortilla de patatas, y de guarnición un poco de ensalada. Una vez terminasteis, llegó el postre: Fresas con nata y chocolate.

-¡Fresas con nata y chocolate!

Ashton: Sí.

-Dios mío, ¡son mis favoritas!

Ashton: Lo sé. -le miraste sorprendida.

-¿Cómo lo sabes?

Ashton: El nombre de la culpable empieza por A.

-¿A? ¿Mamá?

Ashton: Mamá no empieza por A.

-Callate, idiota. -rió.

Ashton: Vale, vale. Broma tonta. Sí, ha sido tu madre.

-¿Cuando has hablado con ella?

Ashton: Hablamos casi cada día.

-¿En serio? ¿Y de qué habláis?

Ashton: Eso es información confidencial.

-Vamos, dímelo.

Ashton: No.

-Sí.

Ashton: No.

-Venga.

Ashton: No.

Eva interrumpió el momento.

Eva: Parejita, nosotros nos vamos.

Ashton: Vale, chicos. Muchas gracias.

-Sí, gracias.

Calum: No hay de qué. Lo que sea por los amigos. -sonrió.

Se despidieron y se fueron.

-Me tienes que decir de que habláis mi madre y tú.

Ashton: Te he dicho que no.

-Venga, Ashton.

Ashton: Con una condición.

-¿Cuál?

Ashton: Quedate conmigo esta noche.

-Tengo que pedir permiso.

Ashton: Ya lo tienes.

-No lo tengo.

Ashton: He hablado con tu madre, y puedes quedarte.

-Mentiroso.

Ashton: Preguntaselo si quieres.

-Lo haré.

Ashton: ¿No te fías?

-Para nada.

Llamaste a tu madre, y comprovaste que Ashton llevaba razón. Tu madre ya te dejaba quedarte.

Ashton: Ahora no tienes más remedio que quedarte.

-Me quedo si quiero.

Ashton: ¿Te pones chula? -Ashton te cogió en brazos por las piernas, tu cabeza quedó mirando hacia atrás, y tus pies hacia delante.

-Déjame, Ashton.

Ashton: No. -empezó a subir las escaleras.

-¡Qué me dejes! -empezaste a patalear y casi os caeis. Te bajó.

Ashton: Casi me haces caer. ¿Tú lo ves bonito?

-Cállate.

Corriste escaleras abajo y Ashton corrió detrás de ti. Chocaste con el sofá y caíste al suelo.

-¡Au! -Ashton se rió. -No te rías y ayudame, ¿no?

Ashton: Eso te pasa por hacer tonterías.

-Me voy a casa.

Ashton: No te voy a dejar irte en tu estado.

-¿Mi estado? Sólo me he caído.

Ashton: Cualquier excusa es buena para que te quedes. -te cogió otra vez como antes y subió las escaleras.

-¿Qué parte de "que me dejes" no entiendes?

Ashton: Cállate.

Te llevo a una habitación. De golpe gritaste, Ashton se asustó y caísteis los dos encima de la cama.

Ashton: ¿Qué haces? ¿Por qué gritas?

-Quería ver si alguien me escuchaba, se pensaba que me estaban violando y me sacaban de aquí.

Ashton: Que peliculera eres.

Ashton había quedado tumbado encima de ti. Os mirasteis a los ojos y se apartó. Se tumbó al lado, boca arriba, mirando al techo. Tú giraste la cabeza y le miraste; él hizo lo mismo.

-¿Qué miras?

Ashton: Me gusta ver como me miras.

-A mí me gusta mirarte.

Ashton: A mí... A mí me gustas tú.

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Este capitulo es amor puro, espero que os guste mucho mucho :3

Heartbreaker {Ashton Irwin y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora