Día uno ; El sujeto muestra conducta inapropiada, delirios de grandeza. ataques de nervios muy seguidos.
Desconozco su nombre, es llamado por todo Gótica como el Joker. Fue asignado a Arkham y no a la prisión por decisión del murciélago.
⚜ No todo...
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Día 1
La mirada de la rubia era totalmente llena de nervios, tomó la pequeña grabadora caminando rumbo a la habitación donde le daría terapia al Joker: está era su oportunidad. Acomodó sus anteojos y entró después de que le quitaran la seguridad a la puerta de metal. Un vez más observó al Joker acostado en la cama de metal con la mirada puesta en el techo lleno de humedad. Se sentó en la silla de a lado cruzando su pierna y acomodando su libreta y grabadora. Tenía que estudiar al sujeto.
— Día uno, el sujeto será denominado al paciente 4459 su número de celda...
— ¿Que haces, lindura? — Exclamó enojado. Ella le dio una mirada y sonrisa.
— Quiero escribir un libro de tí. Necesito grabaciones, apuntes mucho para poder hacerlo — Explico.
El Joker también le dió una sonrisa socarrona.
— Hacerte famosa por medio de mí ¿No? Que lista eres.
— Gracias pero ahora hablemos de un tema en específico — Guardo la grabadora al ver como el Joker se sentía incomodo. Dio una calada de aire — Bárbara Gordón — Soltó. Sacó de su bolso un expediente. Harleen se levantó alzando una llave para desatar al Joker de la cama. El la miro sorprendido
El Joker tomó el expediente mirando las fotos de Bárbara, totalmente desnuda y con sangre. Comenzó a reír recordando.
— Había demasiada sangre y los gritos de jim “ NO, BÁRBARA” — Imitó la voz.
A Harleen no le causó gracia, se quedó sería ante semejante declaración tan jodidamente Retorcida, asquerosa e inhumana.
— ¿No tiene remordimiento? Es algo difícil de asimilar, Bárbara era una joven hermosa y con un futuro, tú se lo has arruinado de la peor forma, ¿Por qué lo hizo?
El Joker miro burlón a Harleen.
— No lo tengo, ¿Por que debía tenerlo? Bueno no es difícil de decir: Sólo quería que Batman viera que tan sólo un mal dia podrías perder toda la puta cordura — Gritó totalmente agresivo. Harleen retrocedió asustada y el Joker lo supo. Llevo su mano a su cabello verde peinandolo hacia atrás.
— Tranquila amorcito, no te haré daño por ahora — Confesó.
Harleen tranquilizó su respiración.
« No tienes que demostrar miedo » Pensó con mucha seguridad.
Así que fruncio el ceño acercándose a él hasta quedar a un centímetro de espacio entre ellos, el Joker le sonrió.
— Una conducta más así y te juro que te haré unos malditos electroshock — Amenazó Harleen. El Joker se puso serio.
¿Lo había amenazado? ¿Esa pequeña niña?
— Me gustas — Confesó El Joker riendo
— Que tenga una buena tarde — Declaro Harleen — Se acabó la sesión — Grito para que los guardias entrarán.
La rubia se estacionó frente al edificio dónde vivía. Al caminar por los pasillos para llegar a su departamento pudo escuchar como una pareja estaba discutiendo. Puso los ojos en blanco.
¿Por que se dejaba de un hombre?
Odiaba el machismo.
El Joker se sentó al borde de su cama. Los enfermeros ya le habían puesto la camisa de fuerza. Todo era silencio.
Cerró los ojos recordando su pasado.
Se puso ver a él justo el día que discutió con su esposa de su sueño de ser comediante.
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Era una persona tan normal como todos. Con una salud mental fuerte y sana.
Hasta el día en que murieron sus sueños.
¿Como había llegado a este punto? Al punto de matar a gente a sangre fría. Al punto de matar a niños inocentes.
Las voces volvieron y todas hablaban al mismo tiempo, no lo dejaban pensar.
Vamos ya no hay nada que hacer. Tu esposa ha muerto con tu hijo, eres un maldito asesino. No necesitas de nadie para eso estamos nosotros para aconsejarte. Mata a esa psiquiatra mal nacida y escapa.
El Joker fruncio el ceño golpeándose contra la pared.
— ¡SHHH! Cállate — Grito y después de caer al suelo cansado, comenzó a reír a dar risas llenas de desesperación. — Vale sí la vamos a matar pero primero hay que ganarnos la confianza — Habló solo. O más bien el pensaba que habían más personas a su alrededor riendo junto con él.
Harleen se acostó en su cama observando las fotos del Joker. Vaya era tan extraño.
Muy extraño, su físico y todo de él.
¿Como habrá sido antes?
Esos pensamientos desaparecieron cuando los gritos de la pareja del departamento de a lado gritaron aún más fuerte.
Pobre mujer.
¿Por qué simplemente no lo dejaba? ¿No era más fácil hacer eso?
