Capítulo 10

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Este capítulo estará enfocado en Deidara, seguramente haré más así, perdón por hacerlas esperar, trataré de subir el próximo dentro de dos o tres días... ahora si, las dejo tranquilas ;)

Pov Deidara

Ella no sabía nada de relaciones humanas, no sabía nada de amor, amistad, no conocía el mundo, no era como nadie, era única, diferente, era exótica, era arte... los pensamientos del rubio volaban mientras caminaba bajo la luna.

-Eres como una bomba a punto de explotar, sé que vas a destrozarme, pero no importa, porque eso es lo que eres, tu eres arte, eres frío y dolor, ¿por qué no puedo alejarme de ti? Hum- Deidara dejó de caminar y esbozó una sonrisa- Jamás pensé hablar solo como un tonto enamorado, hum.

Es que esa chica de verdad lo hacía sentir revuelto, ambos seguían senderos paralelos y eso le dolía, sabía que lo suyo era imposible, además podía ver con claridad que Oyuki estaba confundida, tal vez solo quería sentirse querida, quizá hubiese amado a cualquiera que se presentara en su descenso... cuando la conoció parecía aborrecerse a sí misma, si él no la hubiese conocido ella habría conocido a otro tal vez, pero no era así para él, él sabía lo que hacía y lo que quería, había conocido muchas chicas antes, pero ninguna era así, todas lo aburrían porque eran fáciles de predecir, todas tenían las mismas aspiraciones y eso no era del todo malo, pero no era arte.

Deidara llegó a la guarida, nadie deambulaba por los pasillos tampoco había mucho ruido, esto significaba que estaban en una reunión, todos se habían sorprendido al verlo regresar de la batalla con Sasuke, era una suerte que el idiota de Tobi no se hubiera dado cuenta de Oyuki, no quería meterla en esos asuntos. Al llegar al salón principal todos estaban sentados.

-Llegas tarde- lo molestó Kisame, y el Uchiha le dirigió una mirada de desdén o eso le pareció a Deidara.

-Llego a la hora que se me da la gana, hum- Deidara se sentó en una silla libre y se limitó a escuchar.

-Atacaré la hoja y tomaré al jinchuriki del kyubi, los demás se dividirán en grupos para capturar a los demás jinchuriki, Konan y Deidara vendrán conmigo, lo haremos en tres días.

-En tres días no puedo, hum- mintió Deidara

-Deidara no puedes negarte, eso significaría traicionarnos- Respondió Konan en un tono insípido, sabía que no cederían todos apoyarían a Pain y especialmente ella, ¿Y ahora qué haría?

La reunión se dio por terminado con su silencio, Deidara no quería que atacaran la hoja, lo único que podía hacer era sacar a Oyuki de ahí cuando eso sucediera. L e costaba admitirlo pero tenía sentimientos por esa chica.

Deidara salió de la guarida, aún era de noche, hace apenas unos pocos días Oyuki lo había salvado de su propia inmolación, él la había seguido sin que ella lo notara, una vez que entró a su casa el rubio había regresado a la guarida, por lo que sabía dónde vivía y se dirigía a sacarla de la aldea.

Unas cuadras antes de llegar Deidara la vio sentada en el porche de su casa, mirando el cielo.

-Es peligroso para las niñitas estar solas a estas horas de la noche, hum.

-¿Y por qué estás sola rubia?- dijo en tono de burla la muchacha

-Eso no fue para nada divertido, las chicas enamoradas no le dicen niñita al chico que les gusta, hum.

-Deidara tus chistes van de mal en peor ¿A qué has venido?

-¿Que harás dentro de tres días, hum?

-¿Lo que responda no se prestará para malos entendidos?

-Por favor ¿Por quién me tomas, hum?

-Haré de cuenta que eres una buena persona... como mis padres estarán en una misión fuera de aquí probablemente me quede en casa, a menos de que Tsunade me dé una misión, aunque todo ha estado tranquilo últimamente...

-¿Por qué no te tomas una vacaciones, hum?

-No me hagas reír, que considerado de tu parte... no pongas esa sonrisa falsa, dime la verdad.

-Bueno, esto va a ser complicado y seguramente me odies y trates de escupirme o algo así pero debes escucharme hasta el final, hum.

-Adelante.

-En tres días Pain atacará la aldea, hum- Deidara se detuvo como merituando que decir a continuación- debes marcharte, tu vida está en peligro y no quiero perderte, hum- Oyuki solo lo observaba, se mantenía silenciosa, parecía estar analizando cada palabra, ninguna expresión cruzaba por la cara de la muchacha y esto empezaba a incomodar a Deidara- Dime que vendrás, podemos tratar de huir, me aseguraré de que no nos encuentren...- La voz de Oyuki interrumpió sus veloces balbuceos.

-¿Huir? No soy una cobarde y no necesito tu protección, voy a enfrentar a tu estúpida organización, si quieres huir solo hazlo- Oyuki ya no lo miraba a los ojos, su rostro no había cambiado y su voz permanecía baja y calma.

-Sabía que reaccionarías así, estoy dispuesto a arriesgarme por ti, pero tú no, hum.

-Abandonar la aldea no me supone un riesgo, pero no puedo permitir que la aldea sea destruida, esto no gira en torno a ti.

-Seguramente crees que esto es mi culpa, hum.

-Ya te dije que no gira en torno a ti, tal vez solo es que al mundo le gusta desordenar las cosas de vez en cuando, esto me hace pensar en lo diferentes que somos, no es tu culpa ni la mía, pero supongo que esto es una despedida.

-¿Así que eso es todo lo que vas a decir? ¿Solo vas a rendirte? Hum

-¿Qué más podría hacer?

-Sabía que no me había equivocado, estás destrozándome y ni siquiera son tus intenciones, tal vez solo seas destructiva por naturaleza ¡Al menos di algo, hum!

-¡Me equivoqué! ¿De verdad crees que no me duele? Solo trato de mantenerme fuerte porque nos sentimos de la misma forma y no sería justo que me consueles- algunas lágrimas escaparon pero Oyuki las limpió rápidamente y permaneció un rato en silencio para estabilizar su voz- Te hubiera seguido a cualquier parte si la situación hubiese sido otra... vete, abandona la organización, trata de rehacer tu vida... jamás voy a olvidarte y cuando todo esto termine voy a seguir aquí esperándote.

-Si te quedas morirás, hum

-Te prometo que no lo haré, soy más fuerte de lo que crees

-Deja de prometer cosas que no puedes cumplir, además ¡¿desde cuándo quieres proteger esta mugrosa aldea?! Hum

-Por varios años estuve confundida, pero al conocerte todo cambió, empecé a sentirme como una chica normal, sé que no lo soy, pero... finalmente todos me aceptaron con mis errores yo también hice lo mismo, y unida a los demás pude pulirlos y quererme más a mí misma yo... es un poco pronto e inoportuno... no confundas mi inexpresividad, no sabes lo que realmente pasa por mi cabeza, te quiero, me levantaste cuando estaba hundida... te estoy mostrando lo que soy, puede parecerte una estupidez cursi, no puedo desprenderte de mí ser, por todo esto te aseguro que no moriré, no hasta haber conocido todas tus facetas además te prometo que cuando volvamos a vernos voy contarte el porqué de mis inseguridades, espero escuchar un poco de tu pasado también... sé que me comporte de forma infantil si no me quieres de la misma forma hagamos de cuenta que nunca dije esto, aceptaré ser solo tu amiga si eso prefieres...

-No olvidaré nada, hum- dijo mientras la abrazaba, ¿ese sería su último abrazo? A Deidara todo esto le había dejado un sabor amargo, eso parecía una despedida ¿Debería rendirse a perderla? Sabía que Oyuki no era rival para Pain, era el fin ¿Cómo sería el mundo sin ella?

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