Capítulo 23

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N/A: No, no tengo nada que decir sobre esta historia porque es evidente que dejarla a un lado es quedarse corto, soy muy consciente de ello y os pido perdón de corazón. Más me fastidia a mí no tener tiempo siquiera para adelantar con las historias inacabadas.

Días más tarde...

Era evidente que los problemas aparecerían tarde o temprano, sobre todo si tienes a dos niños recién nacidos llorando durante casi todo el día.

Kate y Rick están exhaustos pero ambos conocían muy bien estas situaciones, la vivieron con Benny, con su hija Lily y ahora es el turno de los gemelos que parecen no conformarse con nada.

Castle lleva a Jake en brazos y poco a poco el pequeño se va tranquilizando hasta cerrar los ojos completamente; el escritor se lo lleva para evitar que se despierte a causa de los llantos de su hermano Reece que no tiene intención todavía de dormir.

Beckett se sienta en el sofá y mira el rostro de su hijo, si no fuese porque ya ha tiene una princesa esperándola, pensaría que no está hecha para este tipo de cosas; la maternidad nunca fue lo suyo. Su mente viaja al pasado...

 Su mente viaja al pasado

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Hace unos años...

Beckett intenta disimular su barriga de cuatro meses con camisas anchas, suficiente para evitar ser noticia, al menos durante el tiempo que sea necesario. La Capitana ya no sale de la comisaría a menos que sea para asistir a alguna reunión u otro tema urgente pero nada de perseguir a los criminales, órdenes del médico y su marido que no le quita ojo.

- Ay Señor, ¿en qué lío me he metido? Claro que me va el riesgo pero esto ya es demasiado.- ella está acostumbrada a charla consigo misma, a veces le viene bien.

Sus manos acarician el vientre por encima de la camisa, es un ritual diario, puede resultar extraño pero ese simplemente gesto le ayuda a relajarse. Kate opta por echar un vistazo a su vida tumbada en el sofá. Ella ha cambiado, no es la misma chica de hace veinte años, sus ganas de vivir aventuras quedaron aparcadas al saber que una criatura crecía en su vientre. Todavía no ha ido a hablar con su madre, se hubiese sentido muy orgullosa.

- Algún día te hablaré de tu abuela Johanna, fue una mujer extraordinaria, todavía intento ser como ella; serás una niña muy feliz, haré lo que sea necesario para que así sea

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- Algún día te hablaré de tu abuela Johanna, fue una mujer extraordinaria, todavía intento ser como ella; serás una niña muy feliz, haré lo que sea necesario para que así sea. Te lo prometo.

Su paz se ve interrumpida por Espo.- Siento interrumpir tu momento de relajación jefa pero vamos a interrogar al sospechoso, ¿quieres verlo?

- Será un placer, espero que no se os escape, estoy del fiscal y sus llamadas...¿es que no tienen otra cosa mejor que hacer?

Javier encoge los hombros, tampoco quiere alargar mucho la conversación con su jefa inestable (cambios de humor debido a las hormonas).

Espo y Ryan comienzan a hablar con ese tipo tan ¿peculiar? Su apariencia es bastante desastrosa, ropa holgada y con manchas, pelo cubierto de grasa y desprende una olor bastante difícil de ignorar.

Beckett escucha atentamente, no interrumpe a no ser que sea realmente necesario, de momento sus chicos van bien; tomaron notas para intentar pillar alguna técnica de su compañera, amiga y Capitana.

Y ahora...

Los gemelos se han calmado, por fin duermen y regalan un poco de paz al hogar de los "Castles". Kate piensa que es un buen momento para descansar, Lily está en el colegio por lo que tienen un par de horas antes de que todo vuelva a ser una "fiesta".

- ¿Quieres que te prepare algo? No has desayunado mucho esta mañana.- Rick se sienta a su lado, sabe cuándo puede interrumpir el descanso y cuándo no.

- Pues sí que debería de comer algo pero no te molestes demasiado, con un sándwich me conformo, pronto volverán a pedir pecho y no quiero que me pillen a medio comer.

El escritor besa la mejilla de su mujer antes de irse a la cocina para preparar lo que Kate le ha pedido. Nadie sabe lo que de verdad puede hacer esa mujer, la Senadora es excepcional, pero es que en su casa también cuida y protege a los suyos; apenas tiene tiempo para ella y Rick quiere que eso cambie.

- Oye cielo.- Castle le da el plato con el sándwich.- he pensado que, cuando estos dos sean más, tú y yo podríamos tomarnos unas mini vacaciones, ¿qué me dices?

Beckett le mira con ternura.- me encantaría cariño pero sabes qué pasará cuando crezcan, no puedo dejar mi puesto, tendría que tomarme esas mini vacaciones ahora que sigo de baja por maternidad.

- Vale, pues deja que me organice, creo que si nos vamos a los Hamptons servirá. Lily quería ir de todas formas este fin de semana.- Rick observa la expresión de su mujer.- no acepto un no por respuesta, tú más que nadie se merece eso, puedo hablar con mi madre o Alexis para que nos echen una mano. Así no tendrás que preocuparte de los pequeños.

- No lo sé Rick, creo que sigue siendo un poco precipitado, no tienen ni un mes de vida, me siento más segura aquí.

Rick tiene la batalla perdida, es imposible convencer a Kate de que necesita urgentemente unas vacaciones, desconectar de todo antes de que vuelva a su vida repleta de trabajo tanto dentro como fuera de casa.

A la mañana siguiente...

Martha y Alexis visitan a la familia, Lily se emociona mucho porque se va al cine con su tata y Luke que siempre le compra palomitas. Martha coge a Reece y Kate se encarga de Jake que acaba de ensuciar su pañal.

- Oye querida, ¿dónde está Richard?

- Me dijo que tenía una reunión por su última novela.- pero es una mentira que Castle inventó, en realidad el taxi le llevó al cementerio. El escritor cambia las flores de la tumba y se arrodilla en la lápida.

- Hola Johanna, sé que no soy yo quién debería hablar contigo pero creo que tu hija no está por la labor de separarse de los gemelos. Entiendo su comportamiento, ella jamás pensó que su vida terminaría siendo así y ahora daría su vida por nuestros hijos, al igual que yo.

Nadie le presta atención al hombre que habla solo, es algo completamente normal en personas que han perdido a un ser querido. Bien es cierto que Castle nunca conoció a Johanna en persona pero no le hace falta, ella sigue con su hija.

- ¿Qué puedo hacer Johanna? Kate nunca deja de pensar en el trabajo, simplemente quiero que descanse en los Hamptons, nuestros hijos estarán bien; les sentará bien el aire fresco y puro que allí se respira. Necesito una señal, algo que me ayude a convencerla.

If Love Was A CrimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora