La llegada de Jose a la capital

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Capítulo 2: La llegada de José a la capital

El clima estaba oscuro y nublado, la lluvia caía con una gran intensidad, toda su vestimenta estaba muy mojada, el caballo no paraba de galopar.
A la distancia se apreciaban las luces de la ciudad, al fin estaba llegando a la capital, tanto tiempo se había tardado pero al fin había logrado su objetivo.

Después de un rato llego a la capital, estaba desolada, la neblina empezó a llenar la calles.
José estaba cansado y agotado por el viaje, se acercó a la taberna, la cual estaba llena de gente y con vida, no se comparaba con la desolada calle, dejó su caballo en el establo y entro a la taberna y vio lo que esperaba.

Violencia, alcohol, cortesanas y soldados.

-Esto es para mi-pensó mientras veía a la gente de la taberna.

Agarro sus cosas y se sentó en una mesa aislado de las personas de la taberna, mientras el veia a todos una de las meseras se le acercó, y le pregunto.

-Quieres algo de beber cariño?

El chico la miro y la miro con atracción, la miro con mucho interés, después de mirar por un tiempo, y le respondió.

-Claro tienen cerveza de Raíz?

La chica asintió y se fue a buscar la bebida para el joven.
El chico se quedó esperando por su bebida, mientras el esperaba noto como un grupo de 5 hombres manoseaban a una de las meseras.
Uno era extremadamente bajito, era un enano evidentemente, el otro era alto y de pelo largo, sus orejas puntiagudas era un elfo de los Pecunia al ver los ojos de este, otro de ellos le faltaba una mano y tenía un garfio en donde ya debía estar su otra mano, los otros dos no tenían mucha importancia para el, después de ver al grupo ya había adivinado lo que eran, un grupo de mercenarios.

El chico no le presto mucha atención al grupo, pero una de las personas del grupo no paraba de mirarle.

-Aquí tienes-dijo la mesera la cual le sirvió la bebida al joven con delicadeza, el joven le agradeció y tomo un largo sorbo de la Cerveza.

Mientras bebía, el hombre del otro grupo no paraba de verle, este se levanto de la mesa del otro grupo dejando a su grupo con la mesera y se acercó al muchacho.

-Se quien eres chico,tu eres José no es así?-el chico se quedo callado ante la pregunta, sin responder nada ni hacer nada.

-Es verdad no?, vaya, vaya a donde terminarías a parar, donde esta tu tripulación?, donde están tus amigos, te veo muy solo Oscurito.

-Deja de llamarme así mi nombre es Jose, y ya no pertenezco a esa familia de traidores e hipócritas,son unos farsantes.

El hombre se burlo del joven y señaló una marca en su mano mientras se burlaba - Entonces tu también eres uno de ellos no?- dijo este

El chico no aguanto mas su ira y agarro al hombre de su camisa y le dijo - No me compares ante esos Asesinos- después de decirle esto, agarro y tumbo al hombre contra el suelo.
El grupo del hombre no se quedo sin hacer nada cuando vieron esto , sacaron sus armas y atacaron al joven.
El joven al ver la amenaza saco su espada y bloqueo a uno de los sujetos con su espada y se lo arrojó al enano del grupo, el cual quedó en el suelo junto con el otro sujeto, el elfo intento cortarle con su daga a lo que el joven le paro el brazo y bloqueo al hombre del garfio.
José pateo al elfo y desarmo al hombre del garfio, viendo al sujeto que había tirado intentando pararse, José tomo su tarro de cerveza y se lo pego en la cara.
Mientras el sujeto se revolcaba del dolor el enano se había parado y le ataco con su hacha, José bloqueo al Enano y empezó a atacarle con ferocidad, mientras ambos peleaban, José vio la daga del elfo en el suelo a lo cual desvío el hacha de el enano a un lado, José rodo en el suelo a la dirección donde estaba la daga y la tomo, sin dudar se la tiro al Enano el cual estaba a punto de cortarle en dos cuando la daga le pego justo en el pecho.
José sonrío al ver que el enano ya no le daría más problemas, pero no noto al elfo y al del garfio detrás de el, que al ver esto le atacaron con fuerza, José apenas logró bloquear al manco pero no pudo parar al elfo que le arrojo un puñal.
El joven sintió un dolor en su brazo, pero con ese dolor se determinó a pelear con mas fuerza y ganas, era la primera vez desde hace mucho tiempo que sentía dolor, logró desarmar rápidamente al manco y le atravesó con su espada, el elfo al ver esto preparo un hechizo con sus manos y se lo arrojó al joven que había matado a sus compañeros.

-Joder!-dijo José mientras veía el proyectil mágico en camino, dando una pirueta a su lado derecho logrando evitar la bola de fuego que este le había lanzado, sin pensarlo dos veces, levantó su espada y se la arrojó al elfo.
La sangre salió de la boca del elfo mientras veía como la espada quedaba clavada en su estómago y cayendo al suelo, El joven se incorporó y vio al otro sujeto petrificado del miedo y le pregunto.

-Quieres mas?-le señaló con su espada a lo que este salió corriendo de la taberna.
El sujeto que José había tirado en el suelo se quedo en el suelo viendo al chico con una gran ira en sus ojos - Te dije que no soy como ellos, mira lo que me hiciste hacer- Apuntándole con la punta de su espada al hombre, este empezó a implorar por su vida - Piedad te lo ruego chico, piedad, no tenía intenciones de ofenderte en serio, lo juro piedad!

El chico levantó su espada y la guardo - Vete de aquí y no regreses, no te quiero volver a ver y si le dices a los Cascos Dorados o a los Ruiseñores que estoy en Meers me aseguraré de acabarte.
El hombre se fue corriendo despavorido junto con sus compañeros sobrevivientes, el chico no dijo nada y se acercó al dueño de la taberna, el cual estaba en una mesa viendo el conflicto y vio a José acercarse a él.
El dueño no dijo nada, ya estaba acostumbrado a ver gente morir en su taberna, era algo muy común de ver por mercenarios y guerreros, vio al joven y le preguntó.
Que quieres?- le dijo este sin prestarle mucha atención - una habitación para pasar la noche aquí cuánto será? - dijo el joven mientras se limpiaba la sangre de su cara con su túnica.
-15 Esmeraldillas la noche entera, si quieres una semana son 105- el chico saco una bolsa pequeña y se la dejo en la mesa del dueño-cuanto por esto?- el dueño agarro la bolsa y saco las Esmeraldillas que había en la bolsa y las contó-esto te sirve para 5 noches- dijo el dueño mientras sacaba de su bolsillo una pipa.
Eso es suficiente, en qué habitación me quedo?- preguntó el joven mientras agarraba sus cosas y mientras aún se limpiaba- la del piso de arriba la segunda puerta a la izquierda- dijo el dueño mientras sacaba un fuego de su mano, acercó el fuego a su pipa y la encendió, era obvio que era un ser de arcana o un mago -disculpe por las molestias- dijo José mientras se dirigía al piso de arriba, el dueño no le presto mucha atención y siguió fumando su pipa.

José entro a la habitación, y vio una mujer limpiando la habitación.
Apenas la mujer vio al Joven salió corriendo como si hubiera visto un fantasma, José no la detuvo ni lo intento, era inútil intentar de pararla y preguntarle el porque de su miedo además de que su cansancio era más pesado que su curiosidad, José cerro la puerta y dejó sus cosas a un lado de la habitación, sin pensarlo dos veces se tiró encima de la cama y se quedó profundamente dormido con el sonido de la lluvia que no paraba de caer.

La Orden de la Hermandad: El AlzamientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora