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Hoy es el cumpleaños de mi bebé, so aquí tienen nuevo cap. 😭❤
¿Pueden darle rt a mi tweet fijado? Quiero que Nate lo vea, please. 👉👈
@skathangxrl
Gracias.
***

La noche caía sobre la ciudad, entonces encendí las luces de mi habitación. Pasar la primera noche ahí, me aterraba más que estar cerca de Nathan. Sentía que mi mundo se derrumbaba con tan solo pensar que viviré aquí hasta que tenga edad suficiente para irme y para eso faltan dos años.

- ¿Cenarás? - preguntó una fría voz tras la puerta.

- No gracias, no tengo hambre. - respondí yendo hacia la puerta con la esperanza de que pasara y así hablar un poco.

Pero eso no ocurrió, él solo se retiró al escuchar mis palabras.

[...]

Me retiré de la puerta de su habitación, ya que yo si quería cenar.

- ¿Y la pequeña? - preguntó Rosalie sirviendo mi plato.

- No quiere cenar. - comencé con mi comida. - Pero si después baja y pide algo de comer no le des.

- ¡Nathan! - reprochó - Es sólo una adolescente.

- Pero puede ser una adolescente y no ser malcriada. Si se acostumbra a que en mi casa puede hacer lo que quiera, después tendré que soportar las consecuencias. Ya justo hoy, me hizo un berrinche porque quería una computadora. - ella sólo rió divertida.

- Bueno, buen provecho. Tengo que ordenar la cocina.

Cené solitariamente como siempre lo hacía. Es que no me gusta mucho tener gente a mí alrededor estoy bien estando solo.

Cuando acabe con la cena subí a mi habitación y me saqué la playera junto con el pantalón para dormir en boxers. Me recosté y prendí el televisor, aun no tenía mucho sueño. Estos programas que dan en la noche son aún más malos que los que dan en el día, así que decidí bajar por un vaso de agua ya que tenía la boca seca.

[...]

Luego de haberle dicho que no iba a cenar mi estómago me reclamaba algo de comida, así que decidí abrir la puerta para asegurarme de que no hubiera nadie. Estaba todo oscuro a excepción de unas pequeñas luces que alumbraban escasamente el pasillo.

Bajé las escaleras en silencio y entré a la cocina para encontrarme con Rosalie, quien secaba el último vaso.

- Hola, mi vida. - me sonrió tiernamente - ¿tienes hambre?

- Si. - toqué mi estómago que rugía con fuerzas.

- Ah, ya veo. - rió despacito - ¿Quieres una leche con chocolate y galletas? - me sonrió.

- Bueno. - le devolví la sonrisa.

- Bien. - sacó una tasa en donde vertió leche y luego le agregó chocolate en polvo para así darle sabor, camino hacía la alacena y sacó galletas con chispas de chocolate, las puso en un platito y luego las puso sobre la barra, me senté para tomar una. - Toma. - dijo dándome la tasa.

- ¿Ros estas aquí? - entró Nathan y volteé a verlo.- ¿No era que no tenías hambre? - me dijo pasando por al lado indiferentemente.

- Compórtate. - se refería a Nathan, quien venía ¡En boxers!

- Cúbrete con algo. - le reproché mirando para otro lado.

-  Pues no me mires, esta es mi casa. - me habló duramente.

- Bueno, ya te calmas chico. - le advertí regresando mi mirada a él. - en serio, respeta un poco a la gente.

- Ya, si como digas. - tomó un vaso de agua y se retiró. - Y luego quiero hablar contigo, Rosalie.

- ¿Siempre es así? - pregunté agarrando una galleta.

- Desde que tuvo una pelea con sus padres y ellos lo obligaron a irse de la casa trayéndolo para acá.

- Woow, yo no sabía eso.

- Pero no le gusta hablar del tema, lo pone de mas mal humor. - se sentó junto a mi.

- Pobre. - bajé la cabeza - Debe de ser muy duro.

- Si, y mas cuando ve que su padre se ha quedado con su hermana mas chica y no lo deja verla.

- Pobre - mi mirada se torno triste- no me gustaría estar en esa situación, aun que la mía no es muy diferente.

- ¿Por qué? - preguntó sentándose a mi lado.

- Perdí a mi madre cuando era apenas una niña y mi padre falleció el otro día, fue cuando me trajeron aquí.

-  Ohh, lo siento mucho.-hizo una mueca de tristeza.

- Espero que algún día Nathan y yo podamos ser por lo menos amigos, me gustaría entablar una relación amistosa con él. Se ve buena persona. - quise cambiar el tema.

- Yo creo que si, es más ya pasara, tú sólo sé paciente, chiquita. Él esta muy dolido.

- Pero...no entiendo ¿Qué fue lo que pasó con sus padres?

- Mira... su padre estaba siempre trabajando, es un hombre de mucho dinero y mantenía a su familia muy bien. Nathan tenía unos 18 años cuando sus padres decidieron divorciarse, pero su madre no trabajaba porque no lo necesitaban. La pequeña Kaylan tenía 6 y cuando veía que sus padres se trataban tan mal se ponía muy mal y su único consuelo era Nate. Lo que pasó fue que su padre intentó dejar a la madre de Nathan en la calle y sin un centavo y ahí fue cuando Nate no soportó la situación y comenzó a defender a su madre para hundir a su padre y que ella no quedara devastada. Entonces su padre se enfureció tanto porque peleaban todos los días y él ya no soportó mas y amenazó con irse de la casa y ahí fue cuando su padre lo echó. Y se vino a vivir aquí, luego se enteró que sus padres siguen juntos. Su padre siempre viene y hablan, ya no se llevan tan mal. pero Nate le guarda rencor, su madre también viene pero de vez en cuando y respecto a su hermana menor que ahora tiene 8 y no la dejan ver a su hermano, es como un castigo para Nathan por haberse comportado de esa manera con su padre.

- Wooow, pobre, en serio eso debe ser feo. - tomé la última galleta - Ahora entiendo su falta de afecto.

- Bueno ahora ya sabes para cuando no te demuestre que tiene sentimientos. - me sonrió y se levantó de la silla - Ya ve a descansar porque es tarde. - besó mi mejilla.

Llegué a la habitación y me puse el pijama para dormir. Abrí la ventana ya que el calor era insoportable y no tengo un ventilador ni un aire acondicionado. Me senté en la cama y tomé mi celular, eran las 2:30 de la mañana y tenía sueño pero no podía pegar los ojos.


❝LA BELLA Y LA BESTIA❞ |Nate Maloley|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora