EL ÁNGEL Y LA MUERTE

¿¡AMIGOS O ENEMIGOS!?

Death y Shura se encontraban en rumbo al lugar donde se les habían asignado su misión, Shura manejaba mientras Death miraba por la ventana, no se habían dirigido palabra alguna desde que se presentaron en la oficina de saga.

- lamento que perdieras a tu padres, yo también perdí a los míos en manos de saga.

Pronuncio Shura rompiendo el silencio, mantenía su vista en el camino mas se podía notar nostalgia en su mirada, los ojos de Death se abrieron por la sorpresa de aquellas palabras volteo lentamente a ver a Shura.

- co... como sabes que yo...

Intentaba pronunciar Death pero le costaba articular palabras.

- tranquilo, se muy poco sobre ti pero quiero que sepas que yo también fui engañado por el.

Nuevamente el silencio se hiso presente entre ellos,  Death no podía dejar de ver a Shura, intentaba analizar profundamente las palabras de este, no sabía si aquello era verdad o alguna especie de treta formulada por saga sin embargo los ojos de Shura no parecían mentirle en ese momento.

- como fue que tu los perdiste- pronuncio Death con dificultad

- uno de sus sicarios los mato.

- ¿Por qué sigues aquí? ¿Por qué trabajas para él?.

Decía con un poco de nerviosismo Death manteniendo la mirada baja.

- el ha encontrado algo con que atarme, como me imagino que también a ti, aun que eso no importa mucho porque igual no tengo ningún lugar para ir ya, no pertenezco a ningún lado, estoy totalmente solo. Aun que no te mentiré cuando me entere de ti, le roge para que me pusiera a tu lado como compañero, he estado tan solo estos años, se me dificulta  poder convivir con alguien, he intentado encajar en muchos lugares, entre muchas personas pero no lo he logrado, no me siento ha gusto entre personas que ni siquiera podrían imaginar lo que es arde en el infierno en el que tu y yo vivimos.. esa gente que no sabe lo que es el verdadero sufrimiento, personas que siempre relucen con una sonrisa.... Cada vez que estoy cerca de gente así, me siento tan mal al saber que nunca podre ser feliz como ellos.... así que pensé que tal vez tu podrías entenderme ..   ya que hemos vivido cosas similares... e incluso podríamos llegar a ser amigo... pero claro eso depende de ti.

Death escuchaba cada palabra que Shura le decía queriendo desconfiar en cada una de ellas, sin embargo una parte de el quería confiar en ese hombre que recién conocía.por que el también se sentía así, mas no podía dejar de pensar ¿Quién era ese tal Shura? Y ¿Cómo es que supuesta mente se había enterado de su pasado? ¿acaso saga le había hecho lo mismo que a él en todo sentido? ¿ O todo esto era alguna prueba que saga le estaba poniendo? Esas y muchas preguntas más comenzaba a formularse Death y sin darse cuenta habían llegado al lugar donde  su misión se llevaría acabo, ambos bajaron del carro y comenzaron su trabajo, prepararon todo para ser lo más discretos en su misión, para evitar cualquier percance.

- las ordenes son llevar vivo al objetivo y de lo demás saga se encargara.

Le Dijo Shura a Death intentando sonar amigable.

- que molesto, es la primera vez que me hace secuestrar a alguien, por lo que general solo lo tengo que matar y ya, sin complicación... pero ya que.

Sentencio Death antes de iniciar la misión, misma que estaba siendo llevada a cado a la perfección, hasta que saliendo de la nada uno de los guardaespaldas del objetivo apareció tomando un arma del piso  apuntándola contra Death, el cual no lo noto por estar encargándose del objetivo, aquel hombre tiro del gatillo, con toda la intención de matarlo, mas Shura con agilidad empujo a este al suelo para evitar que fuera herido, llevándose como consecuencia que su brazo fuera lastimado al rosar contra la bala,   shura se levanto furioso del piso,  apuntando su arma contra aquel hombre quien parecía había desperdiciado su ultima bala, le miro con profundo odio cuando sin compacidad, comenzó  a vaciar su cartucho, escuchando los gritos de dolor del hombre,  manchando de sangre aquel lugar, el silencio invadió aquella habitación por instante, Death no creía que en verdad aquello pasaba, nunca vio a aquel guarda espaldas, ni siquiera cuando peino la zona para contar los posibles obstáculos o más importante nunca se había descuidado tanto, en ninguna misión.