Sueños de espera

Capítulo 2 " distracción y tiempo de olvidar"

Dejar claro que este capítulo hablará del periodo de trabajar y en el reencontrarse con uno mismo, eso al principio es preocupante, ya que somos seres adaptables a nuestras situaciones de vida y con respecto a mi,  llevaba varios años en este modo de vida en el que yo y mi pareja eramos uno y al  ver mi nido vacío, era muy difícil sobrellevar esta situación.

Al volver del viaje a Antofagasta, Loly mi amiga hermana, me tenia un trabajo esperando, en el cual me aventure en  tomar, ya que necesitaba distracción y consideraba que era uno de muchos que vendrían,  al principio me costaba levantarme temprano ya que entrabamos a las 06:30 de la mañana y bueno no era muy fácil hacerlo, siempre le preguntaba a Ana si esto era un sueño o  realidad, ella respondía que estaba pasando, me alistaba y salia a trabajar,  pero sentía que debía hacer esto, porque seria una distracción de este asqueroso proceso en el que no entendía porque sucedía, moñis se lo trago la tierra y no he sabido nada, bueno así son los tiempos, pero se lo tomo demasiado enserio, yo creo que esta relación se fue, yo en mi caso trato de pensar en mi trabajo. Entre a trabajar a una empresa de distribución de frutas, no era muy grande el lugar, tenía dos cámaras, una que se guardaban las frutas y la otra donde se distribuían, el trabajo era pesado  y tendía hacer muy rudo, cargar cajas con verduras, frutas y recuerdos de que esto no era un sueño, era real. Pensaba que había caído bajo y que todo lo que había cuidado se había esfumado de la realidad, los pensamientos venían y venían como si no hubiese más vida, en el trabajo trataba de que no conocieran mi realidad, ya que no me gusta que me vieran mal.

En este trabajo hay cinco compañeros, de los cuales uno de ellos es mi amiga hermana loly, trabajaba como  tecnóloga de alimentos, y me enseño gran parte del trabajo ya que hay que seleccionar las frutas una por una, pesar, contar y muchas veces hay que embolsar. La verdad de las cosas se hacía bastante difícil sobrellevar este trabajo y los recuerdos de moñis, que me atacaban todo el día, cuando entraba a la cámara de frió gritaba y una vez me desquite pegándole un combo a una tabla. Seguía sin entender lo que sucedía, mi moñis ya no está y su ausencia me traspasaba al día con pena y dolor, lo llevaba interno como si el corazón estuviera dividido, una parte con moñis y otra parte con el odio de porque hizo esto. Empezó a llegar a mí, el odio donde invadía mi ser, Ese odio mezclado con amor, ese que es tan difícil de odiar.

Con mis compañeros trataba de llevar el día a día más placentero, reía harto y lograba distraerme, pero no todo el día. En este trabajo conocí realidades distintas donde muchos trabajan para mantener familias, otros para sobrevivir y otros para disfrutar, ahí me di cuenta de lo importante que eran para mí, mis estudios y debía sacarlos como diera lugar.

Mis compañeros de trabajo son extranjeros, dos son bolivianos y los otros peruanos, me llevo bien con todos y somos muy unidos para trabajar, molestamos harto, aunque ellos no saben de mis problemas, cuento poco, siempre he sido reservado.

Nuestro jefe era un pastor de la iglesia evangélica, me cae bien, aunque a veces se le pasa la mano con la pega, mis manos fueron las más perjudicadas, ya que me dolían de tanto cargar cajas de frutas, pero había veces que acompañaba a mis compañeros a reparto de frutas a empresas, en esos momentos era genial, porque salíamos a pasear por la ciudad y sin preocupaciones.

A pesar de mi dolor, trabaje para no caer en depresión, estaba aun paso de caer, extrañaba mucho y bueno trataba de no pasar tiempo solo, porque eso me provocaba pensar en moñis, salía mucho, compartía con amigos y conocidos, pero no era suficiente, la pena era más grande.

De mis compañeros de trabajo hay dos con los que compartía mucho, sus nombres eran Michael y Wilfredo, pero todos le decíamos willy, con ellos nos reímos harto y hacíamos más entretenido el trabajo, con Michael teníamos situaciones parecidas, su pareja lo había dejado hace un mes, ya que ella había encontrado a otro hombre, bueno el decía que el trabajo lo ayudaba a sobrellevar esa pena durante el día, porque de noche lo visitaban los recuerdos y las vivencias, teníamos un club de conversación de separados, yo en mi caso era el mismo proceso en el día lo sobrellevaba con el trabajo y la noche explotaban mis sentimientos, es extraño porque nunca he sido muy sentimental, más bien siempre he sido de mente fría y retorcida , pero esta separación me hizo cambiar, borro mi rencor y exploto los sentimientos que tenía.

A veces pensaba en mis momentos de colación que mi vida se había transformado en un infierno, porque de haber sido tan ordenado con mi relación, correcto y entregado, me habían castigado por haber sido así, la verdad yo decía que debí haber sido, ¿una mala pareja? ¿Haber engañado? ¿Haber traicionado? Pero no lo hice porque amaba, creía en lo que tenía, confiaba.

Cuando seleccionaba una manzana se me ocurrió que nuestra vida es como una de ella, crece en un árbol que las cobija hasta cuando están listas, aquí en este proceso se ve que es lo que seguirán, serán rojas amarillas o verdes, luego caen y son recolectadas, separadas, y su destino cambia porque algunas se pudren en el camino de llegar hacer comidas y otras llegan a ser vendidas.

Con respecto a mí, estaba pasando un periodo en el que no me daba hambre, podía llevar cuatro días sin comer almuerzo y solo desayunaba, aparte en la primera semana de separación bajé cuatro kilos fue fuerte, porque las semanas siguientes seguí bajando de peso, salía a correr después del trabajo, no quería llegar a la casa a llorar, sí que busqué ese espacio en mí, en cual me di cuenta del estado en el que estaba, y decidí darme esa oportunidad otra vez de cambiar, dejar de ser el hombre gordo, sin actividades, con pocos amigos y que no se saca partido.( esta decisión fue como de supervivencia ya que, la reinvención debía venir, porque  me había dejado de lado por mi pareja, esta pareja ocupaba todo mi corazón, mi tiempo, mi amor y eso tuvo sus repercusiones, ya que había perdido mi identidad, un día me di cuenta hasta reía igual, eso no podía seguir, tenía que volver a ser yo otra vez, ese día me di cuenta de la magnitud de destrucción que había provocado en mi, tenía que repararme.

Tome acción en mi vida otra vez, y comencé a salir del estado nebuloso en el que me encontraba, tenía que empezar por algo, empecé por mi... invertí en mi.

Desde aquí comienza el viaje inesperado, hacia una vida distinta, en la cual el ser amado que me acompañó por tanto tiempo, tenía que quedarse en el pasado mientras yo, tenia que viajar entre los recovecos de mi pasado para encontrar mi presente, tenia que encontrar mis piezas del rompecabezas.

Necesitaba respuestas...la incógnita sigue...