Una Alma Necesitada

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Un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y adinerado, procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era de baja estatura, entonces, subió a un árbol sicómoro para verle; ya que sabia que por ahi debia pasar, Cuando Jesús llegó a aquel lugar, miro hacia arriba, le vio, y
le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en
tu casa, entonces descendió aprisa, y le recibió gozoso,
Al saber esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador, Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo a Jesús: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy para los pobres; y si en algo he defraudado a alguien, se lo devuelvo cuadruplicado, Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto éres también es hijo de Abraham, Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. Lucas 19:2-10

Muestra tu cambio a través de los frutos dignos de arrepentimiento, ya no hables tan solo deja que tus obras hablen por ti

Robin Alexander.

El Gran Alfarero.03Donde viven las historias. Descúbrelo ahora