"Mi mejor amigo." Novela de James Maslow & Tú.

Capítulo 9: "La fiesta de disfraces (Parte 2)"

*Narras Tú*

Ver a Carlos dirigirme una rápida mirada y luego girarse cuando Hailey enrolló sus brazos alrededor de su cuello y sonreír me hizo sentir terrible. Mal. Pésimo. Es como si vieras a través de una ventana como se llevan tu final feliz.

Adiós. Adiós a todo lo que pase haciendo por él. Todos mis intentos. Simplemente fueron arrebatados un día. El día en que Hailey volvió a entrar a su vida.

Y me hundí en el pecho de James, soltando lágrimas poco a poco. Él me apretó con fuerza mientras yo escuchaba los latidos de su corazón.

-"Él es tan afortunado." murmuró.

Yo levanté la cabeza.-"¿Por qué? ¿Por qué tiene a Hailey?" murmuré molesta en su oído.

Él sacudió la cabeza.-"Porque la chica más hermosa está enamorada de él, y él ni siquiera se da cuenta."

Levanté las cejas.-"¿Crees que soy hermosa?"

Él asintió.-"Bellisíma."

Sonreí y limpié mis lágrimas.-"Yo también creo que eres hermoso James."

Él sonrió.-"Me alegra oír eso."

Mordí mi labio ligeramente y me paré de puntillas para besarlo. Lo besé. El calor ardió recorriendo cada parte de mi cuerpo. Él me atrajo más a él -como si se pudiera- y yo seguí besándolo. Me encantaba lo que sentía cada vez que nuestros labios se movían juntos.

Jamás. Jamás pensé que besar a James se volvería así de perfecto. Y luego la realidad me volvió a golpear. Él esta aquí esta noche conmigo para ayudarme a conseguir que Carlos se fije en mí. Y él, está actuando. Todo lo que dijo, es actuado. Me aparté de nuevo y me recargué en su hombro otra vez llorando en silencio. Cuando la canción terminó, lo jalé para salir de la pista, dejando a Carlos y a Hailey sonriéndose y bailando.

-"Ya no quiero hacer esto." le aclaré.

Él levantó una ceja.-"¿Qué?"

Sentí las lágrimas volver a arder en mis ojos. Apuesto a que el rimel se me está corriendo pero no podría importarme menos. Además, todo el mundo creerá que soy la versión gótica de Alicia así que no hay problema.

-"Me rindo."

Él se cruzó de brazos.-"¿Te rindes? ¡¿Justo ahora?!"

-"Llévame devuelta a casa."

-"Pero TN...."

-"Ahora."

Salimos sin despedirnos de Carlos y Hailey. James lucía confundido y triste pero yo traté de mantenerme firme en mi decisión.

Por desgracia, la dura verdad me martillaba la cabeza una y otra vez mientras James conducía devuelta a mi casa.

-"¿Por qué te estás rindiendo?" él preguntó frustrado.

Honestamente? Porque creo que me estoy enamorando de ti, pero la cruda realidad es que tú estás fingiendo todo el tiempo. En realidad no sientes nada hacia mí. Y si continúo con esto, saldré peor de lastimada a como empecé.

-"Carlos jamás se fijará en mí." Mentí.

Mentí porque no quería hacerle saber que la mayor parte de esta noche y del día de ayer no estaba actuando. Mentí porque no quería que él supiera que cada vez que mis labios chocan con los suyos mi corazón se acelera y me hace desear seguir haciéndolo de por vida.

Demonios. Enamorarme de James no estaba en mis planes.

-"Lo hará, dale tiem-"

-"No." dije.-"No quiero darle tiempo. Quiero olvidarlo con el tiempo."

Olvidarme de cómo tus labios se sentían contra los míos. Olvidarme de cómo tu sonrisa lucía tan perfecta estos últimos días. Olvidarme de cómo nos divertimos escribiendo el final de la historia.

Pintaré mi línea. Levantaré un escudo. Protegeré a mi corazón que ya está demasiado herido.

Él suspiró.

Se estacionó delante de mi casa y nos bajamos del auto.

-"¿Te veré mañana?" me pregunto.

Lo miré de arriba abajo. Lucía tan hermoso vestido de esa forma. Dolía tanto que sólo estuviera fingiendo.


Oh Dios, por qué no me fijé en ti antes que Carlos. A lo mejor las cosas hubieran sido diferentes.

Sacudí mi cabeza.-"Te veo en la escuela. Llevaré el dinero."

-"Diablos TN no quiero nada de dinero." dijo frustrado.

Se acercó a mí. Yo me hice hacia atrás y abrí la puerta.

-"Pues que lástima, porque en eso acordamos. Te veré el lunes." dije y cerré su puerta en la cara.

Subí las escaleras llorando e ignoré a mis padres que me llamaban preocupados.

Abrí la puerta de mi habitación y la cerré con seguro detrás de mí. Me dejé tirar en la cama y saqué mi diario de debajo de mi almohada.

Lloré mientras escribía.

'Querido Diario:

Estoy tan confundida. Creí, en verdad creí que amaba a Carlos. Ahora no sé nada. Lo vi con Hailey hoy y supe, de alguna forma siempre lo supe, él no es para mí. 

No puedo forzarlo a estar conmigo cuando él no lo desea. Y luego miré a James. Pero no de la misma forma en la que lo veía hace una semana, ni hace un mes o un año atrás. Lo vi como él único que estaba ahí para mí cuando yo más lo necesitaba. 

Él único que me tranquilizaba cuando estaba deprimida o frustrada. Me dijo que me amaba, que era hermosa. Y mi corazón pareció encontrar la forma de volver a latir. Y me temo que cometí un gran error en aceptar que él fingiera ser mi novio.


Porque la cruda verdad es que me enamoré perdidamente de sus hermosos ojos verdes. De su cálida sonrisa. De sus tiernos abrazos. De sus suaves labios. 

Y lo que más duele. 

Él está actuando. Todo lo finge. No soy más que una amiga que trata de ayudar para él. 

Dios.... ¿cómo pude hacerme esto a mí misma? 

Debo fingir que lo que pasó estos últimos días nunca pasó. Lle diré a Carlos la verdad el lunes. TODA la verdad. De todas formas no me importa ahora lo que él piense.

Irónicamente ya no me importa lo que él opine sobre esto.

Porque creo que descubrí la verdad. 

Nunca estuve enamorada de Carlos.'


Cerré mi diario y lo volví a meter bajo mi almohada. Y lloré. Lloré hasta que me quedé dormida.

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