Capítulo 26.

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Veo que David se concentra mucho en el libro que está leyendo. Lo saco de sus pensamientos preguntándole:

- ¿Qué lees?

- Medicina del siglo XIX...- dice mientras se traga el bocado de sándwich.

- ¿Y eso?- pregunto asombrada al escuchar a mi chico.

- Sam... ya he decidido que voy a estudiar después del instituto.

- Vale. ¿Qué es?

- Medicina, especializada en cardiología...

- Vaya... Me alegra mucho. Sea lo que quieras estudiar, te va a ir muy bien.

- Gracias, Sam. ¿Ya sabes tú que estudiarás?

- Pues... creo que lo mío es la aviación... voy a estudiar para ser auxiliar de servicio abordo.

- Vaya. Una novia azafata, me gusta. Serás la azafata más linda del mundo.

- Ajá... oye, ¿cuándo viene tu hermano?

- Mañana a las 17. ¿Me acompañas al aeropuerto?

- Vale. Sólo que no nos podemos demorar.

- ¿Por qué?

- Porque ayudaré a Santiago a reconquistar a Alejandra y creo que nos va a tomar demasiado tiempo pensar como reconquistar a alguien como ella. Pero puedes acompañarnos si quieres.

- Bueno... mientras puedo planear la broma para Dominique.

- Vale. Vamos a clases.

- Vamos

Nos dirigimos hacia el salón nuevamente para terminar de responder los parciales. Tan sólo me queda por resolver Historia, Lenguaje y Ética. El maestro me pasa la hoja nuevamente y comienzo a resolver los parciales. Me tomo media hora en responder así que le devuelvo la hoja al maestro y me siento en mi puesto. Guardo mis cosas y le digo al maestro que me deje salir. El maestro me dice que no me vaya a ir todavía porque aún faltan quince minutos para que termine la clase. Salgo y me siento en una de las sillas qué hay, saco mi celular del bolsillo y no se me ocurre nada más que jugar a Crossy Road. Me distraigo un rato hasta que llega David y se sienta a mi lado, guardo mi celular y lo observo, me dice:

- Ya te dije que te quiero...

- No. Pero ya lo sé. ¿Cómo te fue?

- Bien, estaba difícil pero por suerte estudié en la mañana.

- Me alegra mucho.- Digo mientras me recuesto en su hombro.

Nos quedamos callados hasta que suena el timbre que anuncia la salida. Me levanto de la silla, agarro a David de la mano y salimos juntos del instituto. Llegamos a su casa y me invita a entrar, acepto y entramos a su living. Dominique está sentado en el sofá hablando en francés por celular con alguien, ambos lo ignoramos y subimos a su habitación. Me quito la mochila para dejarla en la silla de su escritorio. Enciende la tele y se acuesta en su cama, palmotea la cama para insinuar que me acueste con él, me acuesto y vemos un rato la tele, siento los ojos pesados y...

Rato después:

Me despierto, asimilo donde estoy, el cuarto de David, veo el reloj digital que tiene en la pared y son las 20:34. Volteo a ver y David está durmiendo aún, me levanto de la cama y salgo de su habitación. Camino por el pasillo y me encuentro a Dominique en tremenda facha: Bóxers Calvin Klein, una camisa que pone "Je t'aime France" y su cabello demasiado desordenado. Me ve y dice:

Bésame Despacio que No Tengo PrisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora