Bésame Despacio que No Tengo Prisa

Capitulo 24.

•Dedicado a: HWFamily

Me despierto a causa de un pitido... me levanto y veo que es Skype. Mi celular tiene cinco video llamadas perdidas de Skype. Veo el reloj, son las 23:10. Decido llamar al responsable de las llamadas, me peino un poco y me contesta. Al otro lado está él con un pijama de donuts. Me dice:

- Por qué no me contestabas las llamadas?

- Estaba durmiendo...

- Otra vez, Sam... Pareces un perezoso.

- Es que tenía mucho sueño.

- Cómo estás?

- Bien... ya se ha ido la regla y pues no tengo sueño. Y tú?

- Vale. Me recupero de una diarrea. Las Oreo me sentaron mal.

- No me extrañaría... comer pasta de dientes...

- Lo sé, pero estoy pensando en hacerle una broma mejor.

- Qué has pensado?

- No sé... las bromas más buenas ya se las ha gastado él... pero hay una que no...

- David... no vayas a pasarte.

- Nope. Tendrá un mal sabor de boca y quizá diarrea pero nada más.

- Bueno. Y qué haces?

- Nada. Me llamó mi Nonna y me ha dicho que mi hermano Alex vendrá a la ciudad porque su rendimiento académico ha bajado considerablemente. Entrará al instituto el otro año y hablando de eso... Dominique hará su trabajo social en la biblioteca del instituto.

- Vaya, los González se adueñan del instituto y del mundo.

- Sam, es enserio cuando te digo que no te quiero cerca de Dominique.

- Vale. Y de Alex?

- Él no me preocupa. Es sangre de mi sangre. Sólo no dejes que se tome muchas confianzas contigo ¿Estamos?

- Sí... tienes sueño?

- Sí... tú no?

- No. Ahora te quedarás aquí conmigo hasta que me dé sueño otra vez.

- Vale. Qué hacemos?

- No sé... deberías estar aquí.

- Quisiera pero no puedo... Dominique y sus bromas no cesan aún.

- Vale.

- Mañana es domingo. Vas a salir?

- Sí...

- Ah...- dice desanimado

- Es broma.

- Vamos a algún lado?

- Dale. Pero que sea después de las dos de la tarde porque pienso dormir hasta mediodía.

- Como quieras, babe.

- Sabes?... Que te parece si después de mañana cuando salgamos... Como te lo digo sin que suene feo? Ósea es que parecemos melcocha... digo...