Desastre (Adagio)

Capítulo 7

Capítulo 7

Despierto en el cuarto de Urs, él aún duerme, me pregunto cuántas veces me encontré contemplando esa mirada, imperceptible a nada, excepto mis besos. Comienzo a llorar, mis lágrimas lo han despertado.

- ¿Por qué lloras? – me dice sonriendo, mierda me hace llorar más, no contesto, se para de la cama con dificultad, se me acerca y me abraza, lloro más al no poder controlar recuerdos y sentimientos. – anda no llores – continua y acto seguido me besa en la cabeza – ya, por favor no llores – me calmo con trabajos, tomo mi libro y comienzo a leer para disimular, para olvidar mi realidad... él desayuna. - ¿puedo hacerte algunas preguntas?

- Claro – respondo, el continúa hablando - ¿cómo nos conocimos?

- Eres socio de Isabel Miller, yo trabajo con ella, es mí... mí, una buena persona. Un día llegaste, me miraste y te enamoraste de mí. Me invitaste a salir.

- Bien, ¿podrías decirme si esto era para ti? – dice mientras saca del bolsillo una caja que me parece conocida, me extiende la mano.

- Un anillo de compromiso, pero claro, tu y yo no íbamos a casar- miro melancólica el anillo, él me mira triste y me quita el anillo, lo guarda.

Ha pasado una semana desde mi estadía en Argentina, al parecer Urs saldrá mañana, he aprendido a vivir con el dolor, pero tengo que aceptar las cosas, etapas de la vida, que tenemos que dejar ir.

- Buen día dormilón – le digo entrando a la habitación del hotel donde se hospedaba - ¿listo para irnos a México? –

- Albania. Yo, yo me quedare más tiempo verás conocí a alguien ..

- Yo tengo que volver.

- Albania quédate, -

- No Urs, alguien puede cuidarte mejor que yo

- Lo siento

- No pidas perdón

- Si tu decisión está tomada llévate esto, es tuyo. – me da la caja que contiene el anillo – finalmente lo compre para ti – me desea buen viaje, se despide y yo coloco ese anillo en mi dedo anular.

Llego el viernes a las doce de la noche. Isabel ha regresado, platicamos un momento sobre la situación que acontecía, David había abogado por mí y habían decidido que me fuera a casa, a descansar. Me quede dormida, me levante a las 12 por un vaso con agua, llame a Nina y no obtuve respuesta, me volví a acostar con la música a todo volumen.