"LLUVIA DE LAGRIMAS" -ciel y tu-

I

   -1895-

    Así pasaron los años para bien o para mal aquella joven tubo todo lo que aquellas monjas le pudieron brindar en esos 18 años. Siendo la más joven y casi la hija de la madre superior.
     Como todos días en el convento todo estaba tranquilo y como de costumbre no se veían nada fuera de lo común, las monjas hacían sus oraciones, cada una de ellas se encargaba de sus tareas, yo ayudaba en lo que fuera necesario, pero mi labor era una pequeña biblioteca en donde se impartían pláticas a niños de un orfanato cercano. Organizaba unos libros de literatura cuando por la entrada llega una de las hermanas diciendo que "mamá" mandaba a llamarme, me llegue alarmar ante su llamado tan repentino....al momento en que llegue a la oficina toque delicadamente la puerta, al escuchar un sutil pasé, entre sin perder tiempos...Mamá está sentada justo enfrente de la gran ventana que da al patio central, mirándome sutilmente de dijo que tomara asiento.

—Mamá supe que me llamabas—fueron las primeras palabras en salir de mi boca, con algo de nervios—

—Hay una cosa muy importante que quiero que hagas—menciona de manera lenta—Necesito que te prepares, mañana a primera hora saldremos rumbo a palacio...—menciona mientras veo que toma asiento frente a mi—

—Rumbo a palacio, habla de que tengo que salir de estas paredes...—me atreví a preguntar algo temerosa, pero con algo de alegría en mi voz—

—Efectivamente mi niña, la reina necesita nuestra presencia de manera inmediata—vi como recalcó la palabra reina mientras hacía un ademán con las manos—...así que alista tus cosas salimos en la mañana—

—Como diga, con su permiso me remito—al momento de salir no sabía que era lo que sentía realmente, una mezcla de emociones fluían a través de mi—

    Después de salir el resto de la tarde me la pase pensando en como seria la reina y recordando todo lo que los pequeños niños decían de las hermosas calles de Londres, sus tiendas de dulces, por otra parte mi mente divagaba en la pregunta ¿para que nos necesita?........

    A la mañana siguiente no podía contener mi emoción, fui la primera en estar despierta, juraría que no dormí en toda la noche por esperar esto. Algunas de las hermanas estaban en la entrada principal, donde esperaba un gran carruaje con el emblema del palacio, estaba despidiéndome de ellas y de los pequeños, a los cuales les dije que vendría más tarde para jugar con ellos, hasta que mamá hablo desde el interior del carruaje.

—Mi niña date prisa, que se nos hace tarde ...—

—En un momento voy—mencionó con una enorme sonrisa mientras subo al carruaje—

    Al momento que se abrieron las puertas del recinto pude ver que todo estaba lleno de hermosos paisajes, a lo lejos comencé a ver algunos edificios cuando llegamos a la ciudad pude observar que todo estaba lleno de tiendas, tal como decían los pequeños a los que cuidaban en el recinto, conforme avanzaba el carruaje logré divisar a mucha gente y como toda curiosa decidí mirar por la ventana del carruaje. Cuando miraba una tienda pude sentir una extraña sensación, sentía una mirada postrada en mi, comencé a mirar discretamente hacia los lados hasta que note que era un chico con una mirada curiosa que poseía unos ojos azul intenso del otro lado de la calle, no se cuanto tiempo me perdí mirando, a lo cual solo me acerté a darle una pequeña sonrisa, lo que hizo que mamá me llamará la atención.

—Mi querida niña recuerda que tienes modales, no se distraiga con las cosas comunes de la ciudad....—me mencionó mientras retiraba su mirada de unos papeles—

—Como tú digas mamá...—le mencionó cundo tomo asiento frente a ella correctamente—la ciudad es muy hermosa y digan de apreciar, perdón—

Pasado el tiempo llegamos al palacio eso lo deduje ya que era un lugar enorme a mi parecer, yo solo miraba por la ventana del carruaje hasta que mamá me saca de mis pensamientos.

—Hemos llegado a palacio mi querida niña—menciona mientras baja del carruaje y me ayudan a bajar a mi también—

—Es simplemente hermoso—

—Vamos mi niña no te distraigas que la reina nos espera—

"Mientras tanto en otra parte"

    Paseando por las calles de Londres cuando de repente veo un carruaje era del convento, por el emblema que llevaba de un costado de eso estaba seguro , pero lo extraño era que en ella viajaba una joven algo muy poco común en lugares de ese tipo, pero no deje de observarla con curiosidad hasta que ella enfocó su mirada en mi.

—joven amo se encuentra bien— escuché a Sebastián justo a mi costado llamándome—

—estoy perfectamente bien—

—joven amo se podría saber que es lo que tanto observa o lo tiene cautivado—

    En eso desvío por un instante la mirada para encarar el comportamiento de Sebastián, pero cundo volví la mirada hacia la joven, el carruaje ya no se encontraba.

—joven amo— volvió a llamar Sebastián nuevamente cuando comencé a avanzar por las calles del centro de londres—

—sebastian a que hora tenemos que estar en la reunión con la reina— prefiero mantenerme ocupado con otras cosas más importantes que el paradero de aquella joven—

—para el te de medio día—

—trae el carruaje iremos directo con la reina lo más pronto posible—

—yes my lord—