Mi chico es un hombre lobo?

5.-La cita

Cuando eran las cinco en punto, vi a alguien a lo lejos. Era Leo. Venía con unos vaqueros azules oscuros y una camiseta verde. Cuando me vio me saludó y vino corriendo.

-Hey- dijo Leo
-Hola- Respondí
-Te he traído algo- Y sacó de su bolsillo trasero un pequeño ramo de flores.
-¡Oh! ¡Que bonitas!
Las cogí y acerqué la nariz. Olían genial.
-Ven quiero enseñarte algo.-

Me cogió de la mano y me adentró entre los arboles del parque. Cuando estábamos apunto de llegar me dijo:

-Cierra los ojos, quiero que sea una sorpresa.-

Me tapé los ojos y me llevó un poco mas alante.

-Ya puedes destaparte los ojos. Me dijo.

Me los destape y vi un precioso sitio. Era un pequeño y hermoso claro. Había un mantel rojo y blanco y una cesta de picnic. Entraban chorros de luz entre las ramas de los árboles y había un montón de ardillas.

--Wow. Que preciosidad. ¿Como encontraste este sitio Leo?-
--Pues... Suelo adentrarme mucho entre los árboles y un día me encontré con esto. Bueno he traído sándwiches. ¿Quieres uno?-
--Sí, gracias.-

Sacó de la cesta un sándwich de queso y paté, y me lo dio. El se cogió uno de carne y queso. Le di un mordisco y estaba riquísimo.

--Umm... Esta super bueno, ¿como lo has hecho?- Dije
--Pues no sé, los hago así.

Después de comernos los sadwiches, nos pusimos a hablar sobre el instituto, los profesores y sobre las tonpop. Después le pedí que me hecháse unas fotos, porque ese lugar no era como ningún otro y quería recordarlo. Cuando ya iba a apagar el móvil me dijo:

--Espera, quiero echar una ultima foto.-
--Vale...- Dije un poco extrañada.

Cogió el móvil y se puso la cámara interior, como si quisiera hecharse una selfie.

--Ven, tienes que acercarte para que la foto salga bien.- dijo él

Me acerqué y me besó. Entonces echó la foto.

--Guarda bien la foto.- Me dijo.
--Lo haré.

Al siguiente día de clase, hablé con Elisabeth y le dije que estaba saliendo con Leo.

--¡¿ENSERIO?! MADRE MIAAAA. ¡QUE SUERTEEEE!-
--Ehh,bueno.... sí..., pero no grites tanto.-

El miércoles, quedamos Leo y yo otra vez. Esta vez para dar un paseo. Cuando andábamos yo noté que nos observaban, pero no hice nada. Cuando estábamos en una calle por la que no pasaba mucha gente y estaba a oscuras, de repente escuchamos una voz.