CAPITULO 4

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(NARRADO POR KEVIN)

-Doctor Romero ¿Cómo se encuentra?- No tengo ningún tipo de sentimiento por ella, pero tampoco es que me guste verla mal, si no es por mi culpa, aunque inconscientemente si lo es porque yo le di la cachetada.

-Va a estar bien Sr. Marcks, nada más tiene que ponerse hielo en la zona afectada y cambiarse las vendas 2 veces al día, la herida no es muy profunda para necesitar puntadas pero necesita reposo por la gran pérdida de sangre, está fuera de peligro. Pero eso si nada de emociones fuertes.-

-Okey, no le prometo nada, pero una pregunta, es que ella es mi novia y somos muy apasionados- Nada de esto es verdad, pero es que me muero por estar dentro de ella.- Quería saber ¿Cuándo vamos a poder tener relaciones?-

-Emmm... ella necesita hacer reposo más o menos por 2 o 3 días, después de eso, cuando quieran- Dijo avergonzado.

-Gracias Dr. Romero ella va a estar estupendamente- Nada más voy a tener que esperar 3 días, espero que esta niña se comporte, aunque me encantaría castigarla en mi cama. "basta Kevin control" dice mi subconsciente voy a tener que hacerle caso por ahora.

Después de 30 minutos, el medico ya se había ido hacen más o menos 20 minutos, ya que me dio recetas para Olivia, y las indicaciones de como tomarlas, ella todavía está dormida, ya no está inconsciente pero no se ha despertado.

Ahora me encuentro en mi despacho viendo la nueva mercancía. La trata de blancas y el narcotráfico son cosas estresantes.

Mientras tomo mi Wiski a las rocas y miro las fotografías de las nuevas chicas, escucho que alguien anda por el pasillo y decidí salir, encontrándome con Olivia mirando la manera de salir por la ventanas, pero lo que no sabe es que afuera de esas, no hay nada más que un bosque del lado izquierdo o la playa del lado derecho. La encontraría en donde sea. Me acerco sin hacer el menor ruido y le digo.

-Si intentas escapar te encontrare y te arrepentirás, no creas que olvide tu castigo niña.-Me miro con terror en los ojos, que me encanto. Todo en ella me encanta y sé que no va a ser una diversión corta, eso está por seguro.

-Si piensas que voy a ser tu perro faldero estas perdido- dijo con asco en su voz, bien como a mí me gustan así de ariscas, esta niña sí que me va a dar trabajo,- Y deja de llamarme niña, no lo soy, voy a cumplir 18 años y cuando los cumpla me iré de aquí, lo antes posible.-

-Para tu información, tengo un poder sobre ti, aparte en donde piensas que a ir, tu propia familia te vendió, a quien pedirle ayuda ¿amigas? Tienes una sola y no la veo buscándote o preocupada por ti. Niña no tienes donde ir.- Con eso le rompí el corazón justo lo que quería. A ver si así se da cuenta quien manda aquí. Me miro con tristeza y se fue corriendo, no iba a ir tras ella. Vi cómo se alejó por el pasillo y me metí en mi despacho para terminar con unos negocios.

Vendida a mi peor pesadillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora