(Parte 1)
-Vamonos Olivia, tu y yo tenemos que hablar- A todo esto me estaba arrastrando por la galería de entrada.
-Haremos lo siguiente, saludaremos a nuestros invitados y nos iremos a la mansión, yo mismo te enseñaré modales mocosa insolente- Se veía demasiado furioso.
Mientras íbamos saludando a los invitados lo único que podía pensar era en como iba a castigarme está vez, seguramente sea lo mismo de siempre, atarme a la cama sin comida ni agua.
Sin darme cuenta ya estábamos volviendo, la única persona que pregunto el porque nos íbamos fue la madre de Kevin. A lo que el solamente se limito a decir que era porque yo estaba cansada.
En el auto de vuelta íbamos en completo silencio, primero porque él estaba enojado y no quería pasarlo peor de lo que ya pase, y segundo, porque no sé que tema podríamos hablar nosotros, si ni nos conocemos lo único que de es su nombre y los negocios que tiene.
Sinceramente, si lo viera por la calle me quedaría con la boca abierta de verlo, es que está tan bueno la verdad, lastima que no fue así nuestra forma de conocernos y convengamos que tiene un temperamento muy jodido.
Llegué a la conclusión que tengo que resignarme a hacer todo lo que esté Adonis diga ya que soy suya.
Sigo divagando en mis pensamientos y ya llegamos a la mansión del sufrimiento, la que será mi casa desde ahora. Cuando llegamos, bajo del auto sin siquiera esperar por él.
-¿A dónde crees que vas mocosa? - realmente está muy enfadado.
- A ningún lado solamente me baje del auto Kevin- me miró con cara de pocos amigos, realmente da miedo, a lo que inconscientemente me encogí en mi lugar.
- Anda entra de una vez- dijo empujándome a lo que rápidamente entre sin hacer un solo sonido e iba directamente a mi habitación la cual me atan cada vez que estoy ahí.
-Hoy no dormirás preciosa- dijo muy pegado a mi por la espalda.
- ¿Que?- mi respiración estaba entrecortada y mi pecho subía y bajaba frenéticamente.
- Ven conmigo Olivia- me tomo del brazo derecho y me llevo para el sitio de las escaleras y empezó a subir.
Creo que esté hombre es bipolar o algo en un momento me habla y trata como si me odisea y al minuto me trata con una amabilidad que nadie entiende.
Lo sigo escaleras arriba y pasa puertas hasta que llegamos a la última del pasillo, que es de un color diferente hasta ahora todas las puertas eran marrones o blancas, pero esta es de color negro, lo que me llama mucho la atención.
Me abre la puerta y entro sin pensar en lo que me iba a encontrar. Está es su habitación, que como lose, todo dentro es blanco y negro, todo está pulcramente limpio y ordenado. En el centro de la habitación hay una cama gigante con un acolchado negro liso y una mesa de luz a cada lado de esta de color blanco, un balcón que da a la playa, lo que me llama la atención de todo es un sillón negro lo cual viene el recuerdo de cuando vino el doctor a verme. Los recuerdos de ese día parecían flashback en mi mente mientras quedó mirando a la nada e inconscientemente tocó la herida ocasionada ese día.FLASHBACK
-Yo... yo qui... quiero volver a mi casa por favor- le dije con la lagrimas corriendo por mis mejillas.-¡¡¡ NO VOLVERAS A ESA CASA NUNCA ¿ME ESCUCHASTE?!!!-Me grito en la cara, por lo que me hice para atrás en la cama en la que estoy encadenada de mi tobillo derecho.
-Por favor- Nunca pensé en rogar para ir a mi casa y ahora lo estoy haciendo, que patético es esto.
-¡¿QUE PARTE DE NO, NO ENTENDISTE?!- Me dio una cachetada que me hizo caer de la cama haciendo que me golpee la cabeza con el piso- No te das cuenta que en tu casa no te quieren, eres patética- Se dio la vuelta para irse, pero me dijo de espalda- Nadie te va a querer, jamás.- Y se fue.
FIN DEL FLASHBACK
Kevin se me quedó mirando todas mis acciones a lo que no dijo nada, solamente me observaba a cada movimiento que hacía.
-Tu y yo tenemos cosas pendientes- me sobresalté cuando lo escuché, este hombre tiene la manía de hablarme tan cerca que me asusta.
- ¿Que... Que co... Cosas... Te... Tenemos pendientes?- espero que no sea lo que estoy pensando porque no quiero hacerlo con él. Definitivamente no.
-Sabes de que hablo, mira te mereces que te haga sufrir, pero solamente por esta vez, nada más, seré lo más piadoso y bueno que pueda llegar a ser- dijo muy cerca de mi cuello haciendo que se me pongan los pelos de punta.
- Pero, no puedo, soy virgen todavía- dije muy avergonzada.
- No me hagas cabrear más de lo que ya estoy Olivia- dijo tirando de su pelo - A parte ti tienes que hacer lo que yo diga sin resongar o rechistar, así que eso no importa, pero por ser tu primera vez te prometo que no te lastimaré- dudo de sus palabras, pero tiene razón.
Él se aparte de mi y se saca el saco y los zapatos con los calcetines y los deja en una silla que hay cerca de la cama, la cual se sienta en la punta de esta y se me queda viendo mientras yo nose que hacer.
-Ven aquí Olivia - me estiró la mano y no saco la vista de mi a lo que yo me acerqué algo duditativa y tome su mano, cuando la tomé me tiró de esta y me dejó sentada en su regazo, y empezó a acariciar mi espalda.
-Sabes algo, tengo ganas de arrancarte este vestido desde que te lo ví puesto en la habitación- dijo mientras con un dedo llegaba hasta mi espalda baja.
No dije nada solamente me deje llevar por las sensaciones de sus caricias, las cuales por algún motivo me gustaba y mucho.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Lose lose, van a decir que porque lo deje hasta aquí bueno es que hay una sorpresa🙈🙈
ESTÁS LEYENDO
Vendida a mi peor pesadilla
RastgeleMe llamo Olivia Brocks, tengo 17 años y mi vida gracias a mis padres y el jefe de ellos se volvió un infierno. ¿Que es lo que tú sentirías si tus padres no son los que aparentan? ¿Que tus propios padres te vendan al mejor postor? Es horrible. Esta h...