Las abuelas solían tener muchos refranes, sus consejos mostraban la sabiduría que en los años habían adquirido, ellas buscaban en su mayoría de ocasiones ayudar a sus hijos y nietos a encaminarse en un sendero diferente al suyo por que ya sabían de ante mano a donde llevaría. Sin embargo la obstinación termina ganando la batalla, y muy pocas veces hacemos caso de sus advertencias que en nuestras cabezas se convierten en ofensas.
"Nunca digas nunca" decían, y vaya razón que tienen. No puedes asegurar con toda confianza aquello que ciertamente desconoces. Continuamente pensamos: "Yo nunca haré eso" "A mí no me pasará lo mismo" y es bastante cómico que esa misma cosa a la que te negaste rotundamente termine sucediendo, y que aquello que pensaste poder evadir te alcance.
¿Pero qué tiene que ver esto con la situación actual? Bueno, HyukJae cavilaba sobre ello mientras estaba sentado en una mesa para dos, en el segundo piso de un restaurante tranquilo y cómodo perfecto para relajarse mientras esperaba a su cita.
Cuando era un niño, igual que muchos otros niños, escuchaba las historias de sus abuelos y se entretenía tratando de entender los proverbios de los ancianos. En aquel entonces consideraba a los adultos como filósofos, personas superiores en más de una palabra que lo sabían todo de todo, y tal vez también de todos.
Recordaba una vez que su abuelo en medio de una charla sobre su juventud y sus relaciones antes de llegar a conocer a su abuela, le dijo con voz firme:
"-Con los años conocerás a muchas niñas, te enamorarás muchas veces, y te romperán el corazón por igual. Pero recuerda que son solo amores pasajeros, Hyuk, el definitivo no será tan fácil como los demás. Cuando el amor de verdad llegue las mariposas revolotearan tan rápido que dejara de ser placentero, a veces querrás correr lejos del causante pero apenas te alejes querrás volver."
A su corta edad le pareció una experiencia horrible el amor a como lo describía el anciano, luego dejo de tomarle importancia al crecer. No creía que fuera tan malo, quizás su abuelo solo quería asustarlo.
Pero estaba ahí, siendo un hombre que iba a la mitad de su vida, asimilo que realmente era asi como se sentía: su corazón daba vuelcos violentos al verlo; su estómago tenía la sensación de elefantes bailando dentro; el escaso vello de sus brazos se erizaba; y en muchas ocasiones todo aquello le despertaba el deseo de huir, y en cambio cuando estaba lejos solo podía pensar en buscarlo.
<<Que ironía>> pensó con una sonrisa a la nada.
Su abuelo fue un casanova como muchos otros en su época, quizás no el más apuesto, pero él solía decirle que ni la belleza ni la fuerza le gana a la inteligencia. Salió con muchas damas hermosas, conoció a una que le traía loco y por mucho que llego a sorprenderlo esa mujer no era su abuela.
"-Tu abuela fue la segunda en mi corazón. Cuando nos conocimos yo creía amar a otra, pero al verla fue como despertar de un sueño profundo y ante mí un jardín de tulipanes rosas. Pensé que estaba demente, amaba a dos hermosas mujeres. "
Bajo la mirada y vio su copa llena del líquido burbujeante. Él amaba a una sola persona, ya no cabía duda. Era verdad que su corazón llego a partirse en dos partes al conocer a una excelente chica en un aeropuerto, tan perfecta que no congeniaba con él. Durante una época imagino que su amor por Sook Yon crecería con la resignación a no volver a ver a Donghae, pero el mundo giro sobre ellos y sus destinos se acomodaron.
Escucho los pasos de tacones acercándose, anunciando que había llegado la hora de ser honestos.
Usaba un largo y ajustado vestido de noche de un color rosa pastel, su cabello recogido en un sencillo moño, y su rostro acicalado haciéndola ver más hermosa que de costumbre. HyukJae se levantó y acerco la silla a ella, volvió a su lugar más nervioso que antes buscando las palabras adecuadas para empezar.
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Te conocí a través de ella
Fiksi PenggemarEunhyuk vive enamorado de una figura pública, un cantante de su misma empresa que solo ha podido cruzarse en el pasillo por cortos segundos y después de largos años; verlo en las revistas y la televisión; escucharlo en la radio y hablarle solo en su...