Volverte a ver • Sebastián Driussi •

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Sebas POV:

-Vos y el tío sebas jugaban? -le preguntó Uma-

-Si -respondió ella- Jugábamos mucho a la cocinita, íbamos a andar en bici, también jugábamos a la pelota

-¿Y vos qué haces ahora? -preguntó mi sobrina- Porque el tío sebas sigue jugando a la pelota

-Yo soy modelo -respondió-

-¿Y qué haces?

-Mi papá hace ropa y yo la uso para que me saquen fotos -rió-

-Ahhhhh como a veces hace la tía Ana

Solo escuche por parte de Cande un "ajá", así que entré a la pieza de mi mamá y las dos estaban sentadas en la cama con las numerosas muñecas de Uma. Cande estaba concentrada cepillándole el pelo a una de ellas, mi sobrina la miraba atentamente. Aclaré mi garganta logrando captar la atención de ambas.

-¡Tío Sebas! -exclamó Uma y sonrió-

-Ya está la comida -sonreí- Así que anda a lavarte las manos...

Ella asintió y bajó de la cama, pasó al lado mío, pero retrocedió y miró a Candelaria.

-Cande... después seguimos jugando

-Cuando vos quieras linda -sonrió-

Mi sobrina se retiró, dejándome solo con Cande. Ella me dedicó una corta sonrisa y empezó a guardar las muñecas de Uma en la caja.

-Le caíste bien -reí apenas-

-Nunca fui de llevarme bien con los nenes -rió- Pero tu sobrina... es distinta -sonrió-

-Nunca -recalqué-

-Está para buscar bicis y andar por el barrio -rió-

-Si... pero si salimos a andar por el barrio, lo más probable es que nos quedemos sin bicis -reí-

-¿Tan así? -abrió sus ojos sorprendida-

-Los tiempos son otros... Pero si queres arreglamos para ir a Palermo a andar en bici -propuse-

-Dale -sonrió-

La seguí mirando mientras guardaba los juguetes que quedaban... nada de ayudarla igual jajaja. Me apoye en el cuadro de la puerta, cruzando los brazos... ella es tan..

-¡SEBAS! -escuché la voz de Ana- ¿DÓNDE ESTÁS?

-rió- Te tienen bien vigilado -habló Cande-

Lo único que hice fue reírme, entrar a la pieza de mis viejos y cerrar la puerta rápidamente. Corrí y abrí las puertas del ropero, rodeé a Cande con un brazo y con la mano del otro brazo le tape la boca, la lleve hasta el ropero y nos metí ahí dentro a ambos.

-¿Que haces? -rió- Nos va a matar bolud..

Le tape la boca y cerré el ropero, puse mi dedo índice sobre mis labios, indicándole silencio. Aunque estaba algo oscuro, todavía podía verle la cara, en especial sus ojos.

Escuchamos la puerta de la pieza abrirse, Cande cerró los ojos, intentando no reírse. La pelotuda cuando está nerviosa o se toca el pelo o se ríe, en este caso cuando podría estar callada arrancándose el pelo... se quiere reír.

-RAMIRO, NO ESTÁN -gritó mi novia desde la misma pieza-

Ya me la imagino preguntándole a mi amigo dónde estoy...

-Pero si... -dijo Ramiro entrando- Uma dijo que estaban acá

-Pero vez que no están, capaz tu amiguis se lo llevó aprovechando que yo no estaba -habló Ana-