Volverte a ver • Sebastián Driussi •

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-No seas tan pajera -rió Driussi- Aparte algunas cosas no me quedaron claras -hizo una pausa- ¿Dónde estás? Estoy en el faena

El corazón de la modelo se aceleró de un segundo a otro, de golpe se alejó de su amiga, haciendo que Mariah golpeara su frente con el hombro de Candelaria.

-Mierda -susurró Mariah-

-Yo... -hizo una pausa- estoy yendo Sebas, pero estoy cansada -mintió-

-¿Me estás jodiendo? -preguntó- Igual te voy a esperar

-Bueno

Dijo y cortó la llamada.

-Estoy en el horno -dijo Candelaria-

-¿Qué pasó? -preguntó Simeone mientras buscaba un pañuelo-

-Manu va a estar en el hotel y Sebastián ya está ahí, esperándome

-Carajo, se te junta el ganado -rió- Igual dijiste que te va a estar esperando en el estacionamiento

-Y espero que no salga de ahí

Bufó Candelaria, pero ya era tarde. Manuel Lanzini estaba subiendo al lobby del hotel, donde se encontraba el delantero de River.

-¿Que haces acá Manu? -preguntó Sebas al ver que Lanzini "se hacía el boludo"-

-rió- No, es que vine a buscar ropa para Mer

-¿Cande te dijo que vengas? -cuestionó Driussi-

-Ajá -respondió Lanzini mientras se sentaba al lado de Sebas-

Esto todavía aumentaba más las sospechas de Sebastián, pero no quería decir ni cuestionarle nada a Manu. Personas seguían llegando al hotel y ya eran al rededor de las tres de la mañana.

El delantero del West Ham United había recibido un mensaje de la modelo Argentina, consultándole si estaba en el lobby o si la esperaba en el estacionamiento como habían acordado. Pero Lanzini le comentó en donde estaba y también que Driussi estaba en el mismo lugar y que le cuestionó qué hacía él ahí. Candelaria le dijo a Manuel que se retire del lugar y que la espere donde habían acordado mientras ella se deshacía de Sebastián.

-Tarda un montón -se "quejó" Manu- Mejor vengo mañana

El jugador Coyi se puso de pie y estrechó su mano con la de Driussi.

-Nos vemos -saludó Sebas-

-Nos vemos Seba

Lanzini se retiró por donde había llegado y se quedó esperando en el auto. Mientras Sebastián veía los numerosos mensajes de Ana, Candelaria estaba entrando al largo pasillo el cuál es el lobby del Faena. Vio a Sebastián sentado y rápidamente se acercó.

-Buenas -rió-

Driussi se puso de pie rápidamente al escucharla, sonrió y le dio una vista rápida de abajo hacia arriba, aunque ya la había visto toda la noche prácticamente.

-¿Enserio estás cansada?

-suspiró- Sebaaaas... -alargó- Me vas a tener todo un año acá nenito -rió y acarició su mejilla-

-Ufaaaaa -se quejó- Bueno, está bien... Pero mañana quiero que nos juntemos

-Está bien, vamos a cenar ¿Te parece? -propuso ella-

-Me parece -sonrió- ¿Y Mariah?

-Ya subió a la habitación, está hecha bolsa.. Pavón la dejó re tirada por una... -hizo una pausa- puta

-Uh, la que le espera al pibe -rió- Eso le pasa por meterse con un pecho frío

-Cosas que pasan -sonrió-

-Bueno... entonces nos vemos mañana

Candelaria asintió y Sebas se acercó a ella, tomándola por la cintura, acercó su cuerpo al de ella. La modelo sonrío y se acercó lentamente al rostro de Driussi, automáticamente Él acercó sus labios a los de ella. Lo que no sabían era que algunos empleados del hotel los estaban observado y uno que otro tomó una foto.

Se separaron lentamente y se sonrieron el uno al otro. Sebastián depositó un corto beso en la frente de Candelaria y alejó su cuerpo del de ella, tomó su mano y ambos caminaron hasta el ascensor, Candelaria presionó el botón para que éste llegue al piso y seguido miró a Sebastián.

-Entonces nos vemos mañana -sonrió ella-

-Si

-¿Algún lugar que recomiendes? -preguntó ella-

-Mmm varios -rió- Pero mañana lo vemos bien -dijo al ver que las puertas se abrían- Que descanses linda

La modelo sonrió y se acercó al delantero dejando un corto beso en su mejilla.

-Buenas noches Seba

Candelaria entró al ascensor y presionó el botón del piso en el que Mariah se encontraba. Mientras las puertas se cerraban, Driussi le guiñó el ojo derecho, provocando una nueva sonrisa en Cande.

Una vez ya subiendo, largó todo el aire acumulado.

-La Puta madre

Abajo, en el estacionamiento Manu estaba al tanto de su celular para saber en qué momento Candelaria bajaría. Ella había subido una foto a su cuenta de Instagram para poder disimular que su noche había terminado.

En cuestión de segundos se fue llenando de likes, pero mientras eso pasaba en la red social y Manuel lo veía. Ella se terminaba de sacar la ropa que había usado toda la noche y se cambiaba, reemplazando toda esa vestimenta negra por otra casi igual, vestido igual de corto que el anterior, reemplazando las botas cortas por unas al estilo bucaneras y para "safar" de la fresca noche de Buenos Aires un saco acuadrillé, blanco y negro.

Se despidió de Mariah diciéndole que la vería más tarde y salió por la puerta. Apuró su paso volviendo al ascensor. En cuestión de tres minutos ya se encontraba subiendo al auto del delantero del West Ham United.

-Te tardaste un poco -dijo él mientras ponía una de sus manos en la pierna izquierda de Candelaria-

-suspiró- Sebastián me va a volver loca

-rió- Ahora no importa Driussi... ahora estamos vos y yo, como hace un tiempo