Cuando Caspar y yo entramos en el despacho cierro la puerta y me siento en uno de los sillones, Caspar me imita y se sienta enfrente de mi.
-A ver, creo que ya sabes que lo que más me preocupa es lo del chico.
-Sí, lo suponía. -Ríe él.
-Mira ahora no tengo tiempo para ponerme a hablar con todos y elegir a quien pongo. Así que he pensado que los gemelos Torson son los mejores, ya he trabajado con ellos y sé de lo que son capaces, pero al ser unos de los tuyos creo que tu los conoces más, ¿qué opinas?
-Sí hermano ningún problema, llevo trabajando con ellos un par de años y son jodidamente buenos, discretos y silenciosos. Son buenos Louis, no te arrepentirás.
-Espero que no. Bueno eso era todo.
Le sonrío y me levanto, él me imita y salimos del despacho.
Cuando salimos Harry sigue hablando con los chicos, se le ve cómodo y eso me hace sonreír. Cuando salgo del pequeño trance, el cual ha durado menos de un segundo, llamo a los gemelos Tornos y les hago pasar a mi despacho.
-Voy a ser rápido. Seréis los vigilantes del chico. Quiero que le sigáis a todas partes y no os separéis de él en ningún momento, excepto cuando este conmigo o cuando este en la casa, ¡aunque!, si yo no estoy en la casa vosotros tendréis que estar aquí, no exactamente encima de él, pero vigilando.
¿queda entendido?
-Sí, señor. -Dicen los dos al unisono.
-Bien. Y, por favor chicos llamarme Louis.
Louis sale apenas dos segundos del despacho cuando vuelve a entrar con los dos gemelos que estaban antes en la sala. Yo sigo con los chicos aunque se me hace imposible mirar a Zayn, y creo que él estaba igual, o incluso peor, no habla con nadie solo con Liam y ni siquiera habla en voz alta, me siento fatal por ser el culpable de que este así, pero bueno realmente tampoco he sido yo quien ha entrado en un baño sin llamar...
-¿Y como es eso de ser famoso? -Niall me habla y yo salgo del trance en el que estaba mientras pensaba en lo de Zayn.
-¿Eh? Ah, sí, ser famoso... Es divertido.
-Yo siempre he querido ser cantante, e incluso pensé en presentarme a un concurso, pero man las cosas se complican de un día para la el otro y sin darte cuenta un día estas dentro de la mafia... Es jodido.
-Vaya... Lo siento.
-Nah, esto también tiene su diversión y su gracia. -Niall ríe y su risa es tan contagiosa que me hace reír a mi también.
Justo cuando Niall y yo dejamos de reír la puerta del despacho de Louis se abre, y de ella salen los dos gemelos seguidos de Lou, él no me mira simplemente se limita a dirigirse hasta el sillón donde estaba sentado al principio y sentarse. Cuando la gente nota su presencia se nota la tensión y todo el mundo se calla.
-Bien, voy a ser rápido porque ya me estoy cansando de vosotros. -ríe y la gente le ríe la gracia no muy seguros-A ver, vosotros cuatro -señala a cuatro chicos que hay sentados en un mismo sofá- empezaréis ahora mismo y vosotros cuatro -dice a los cuatro chicos que hay de píe- iréis con mis chicos a donde ellos vayan, ¿entendido?
-Sí. -Murmuran todos al unisono.
-Pues ahora largo.
La gente se mueve de un lado para el otro y después de dos segundos la sala esta completamente vacía, tan solo quedamos Louis y yo.
-Hola, bebé. -Susurra él, aun sentado en el sillón.
-Hola. -Sonrío.
-Siento no haberte dicho lo de la vigilancia
-No pasa nada, Lou. La verdad, me siento muchísimo más a gusto y seguro llevando dos gorilas a mis espaldas.
-Eres genial, ¿lo sabías?
-Tu eres muy sexy cuando te pones en plan mafioso, ¿lo sabías?
-¿Así?¿Muy sexy? -Se levanta y camina despacio hasta ami. Se siente encima de mi con una pierna a cada lado.
-Muy, muy sexy.
-¿Y si hago esto? -Se muerde el labio inferior y de golpe como si hubiera apretado un botón comienza a crecer mi erección en mis pantalones. Louis lo nota y sonríe. -Ya veo...- Gimo y él ríe, sin pensarlo dos veces le cojo bruscamente del cuello y junto mis labios con los suyos, mientras nos devoramos el uno al otro él comienza a mover la cadera frotando su erección contra la mía por encima de los pantalones provocando que se me escapen pequeños jadeos. No tardo en quitarle la camiseta a Louis y tirarla a sabe Dios donde, le acaricio el pecho y bajo las manos lentamente hasta su cadera, le aprieto más contra mi entrepierna y me muerde el labio inferior, bajo un poca más las manos y le cojo del culo, el gime y mueve la cadera más rápido y apretando más.
-¡Oh no, vamos! -Una voz chillona nos sobresalta y nos separamos de golpe dirigiendo nuestras miradas hacia la puerta donde esta Niall con las manos en la cara. -¡Ah, joder. Yo solo venia a por mi móvil, no a por porno gay!
-¡Que te jodan, Horan! -Dice Lou con la respiración aun agitada.
Niall ríe y comienza a caminar con una mano tapándose los ojos y con la otra estirada para poder tantear el terreno. Mientras Niall hace el tonto Louis se levanta, busca su camiseta y una vez que la encuentra se la pone, cuando ya la tiene puesta me mira y su mirada viaja directamente hasta mi entrepierna, él se muerde el labio y yo junto las piernas para calmar el dolor que me esta dando la erección que tengo.
-Deja de hacer el gilipollas, Niall. Ya puedes mirar.
El rubio abre los dedos de la mano sobre la cara y mira solo con un ojo, cuando se asegura de que no hay nada raro se quita la mano y busca su móvil. Lo encuentro y justo antes nos mira a Louis y a mi de arriba abajo, notando nuestras erecciones y ríe.
-Deberíais de daros una ducha, ¡separados! -Dice, y grita la última parte antes de salir de la sala y cerrar la puerta tras de él.
-Ogh. Son especialistas en aparecer en los mejores momentos. -Louis ríe.
-Tranquilo ya me encargare de que esta noche nadie nos moleste...
