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"Las gotas que caen del cielo abstracto, son como cada pensamiento inconsciente de ti."


Chanyeol rodó los ojos al escuchar la letra de la canción que sonaba por los altos parlantes, sobre el techo junto a las luces led que iluminaban todo la tienda de conveniencia en un blanco pegante. Lo brillante de ellas haciéndole el trabajo un poco menos difícil para ver los nombres de las etiquetas más pequeñas de algunos de los productos en los estantes.

Aunque, vino a él el pensamiento de que era en esos momentos precisos que necesitaba sus lentes, solo que cuando salía fuera de casa nunca los llevaba, no le gustaba como lucían en él. Y tal vez, ahora no veía bien por ello, quizás su vista estaba en descenso nuevamente por la falta de continuidad de llevarlos puestos.

Suspiró al pensarlo y frunció un poco las cejas al no poder leer bien los nombres de algunos productos, dio un chasquido entre sus dientes rindiéndose al no distinguir las letras pequeñas, estaba empezando a frustrarse y por lo tanto, a molestarse porque la semana anterior no había tenido ese problema.

Soltó un largo suspiro en derrota mientras elevaba la mirada al techado del lugar, deteniéndose en las luces blancas que luego de dos segundos empezaban a irritar sus ojos, si, en definitiva no podría hacer más que solo llevarse a casa lo que tenía en su cesta, luego iría en automóvil al supermercado que estaba a diez minutos y terminaría de realizar sus compras del mes con productos de verdad y a elegir.

Un trueno demasiado fuerte resonó en el cielo oscuro, recordándole que afuera, sobre el oscuro cielo de la noche, azotaba una incesante lluvia propia de principios de otoño. Giró a las puertas de vidrio para ver como las grandes gotas chocaban contra el asfalto y la fuerza de su mano en la agarradera de la canasta de goma se intensifico recordando algo.

Chanyeol dejo salir aire frio y pesado de su nariz recordando que no había llevado un paraguas con él. Cuando salió de casa supuso que no tardaría mucho en realizar sus compras improvisadas para la semana, al igual que todavía no llovía cuando ingreso al pequeño lugar, y no contaba que se tardaría demasiado porque sus ojos no cooperaban de alguna manera, haciendo que gastara demasiado tiempo en cualquier producto que tomaba a mano y que el cielo estaría caprichoso dejando caer sus frías gotas de agua a mitad de su compras y a tan solo las ocho treinta de la noche.

Perfecto, estaría jodido por los siguientes minutos cuando saliera del lugar.

Llegando a la fila de caja saco su billetera del bolsillo trasero del pantalón junto a su celular del interior de su cazadora que había estaba vibrando desde hacía un tiempo atrás.

- ¿No llevará algo más?, - la chica encargada de cobrar preguntó llamando su atención luego de unos minutos de hacer esa pequeña fila de dos personas.

Chanyeol dejo de ver la pantalla de su teléfono para mirar a la joven quien tenía una sonrisa demasiado entusiasta para su gusto, dándose cuenta que era su turno ya que el rostro de la joven cajera estaba frente a él. Levantó su canastilla hasta el mesón con solo dos cartones de leche deslactosada por su intolerancia, dos cuartos de filetes de carne de res y tocino, una cubeta de huevos y tres piezas de guisantes. Fue lo único que pudo rescatar de todos esos estantes.

-No. - Su voz sonó seca, más rasposa y sin humor, volviendo su mirada a la pantalla de su celular ignorando a la chica que hizo una mueca por su cortante respuesta.

Chanyeol frunció con más intensidad sus cejas al no creer el contenido de un chat improvisado y rezagado donde estaba agregado junto a sus tres amigos. Había un mensaje en especial de antes de mitad del día que fue el comienzo del bombardeo de burbujas a explotar de letras en el interior por parte de los demás integrantes del grupo.

Blue Sky | Chankai Donde viven las historias. Descúbrelo ahora