Grabaciones del Alma (JICHEOL)

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El día en el hospital se me hizo corto, demasiado diminuto a  mi parecer, ya se hace de noche y aun no termino de hablar con el chico de la camilla al lado mío.

Nuestra ultima conversación a solas antes de que llegarán mis padres fue de cual era mejor; si woody o buzz Lightyear, por supuesto ninguno de los dos quedamos de acuerdo, y terminamos en el diciéndonos que cada uno tenía razón por distintas razones, pero obviamente woody era mejor, seamos sinceros, ese gorro de vaquero hace que le luzca genial a pesar de ser cabezón, y eso queridos amigos no lo puede hacer cualquiera.

Mi madre aun no dejaba de gimotear cada que me hablaba o  me acariciaba el cabello, mi padre duro como el puede ser, me daba aliento diciendo:"Al menos en Hallowen no veras esos feos disfraces"... Gracias papá.

Aunque aun tenia la leve esperanza que solo fuera un pequeño susto no dejaba de lamentarme cada vez que mi habitación quedaba en silencio. Así que me apresuraba en hablarle al chico de al lado, por que el silencio comía a mi alma, que era demasiado frágil para resistirse al llanto.

(📟)  

-A ver SeungCheol, puedes ver algo de aquí-El doctor llegó a primera hora para ver como había ido todo, me despertó y como si nunca hubiese sucedido... Volví a ver , no tan claro como antes, pero veía la luz, los colores eran manchas, pero era brillantes manchas, ya había más luz.

-Si-Suspiré de alivio.

-Lo sabia eso es bueno, bien entonces tendrás que usar una graduación más en tus anteojos, al parecer se ha distorsionado más tu visión, puede ser temporal como no, pero es mejor tomar precauciones-dejo su luz guardada en su bolsillo izquierdo de la bata, mientras escribía una receta nueva para mi.

-Hay no, doctor no tiene uno menos gruesos-Bromé como hace tiempo lo hacia y el sonríe.

-SeungCheol...-Dijo en tono divertido.

-Esta bien, esta bien seré un topo-Me encojo de hombro mientras hago una pose de ancianito con mis gafas.

-Bueno en tres días mas serás un topo-Dice pasándome la receta para comprar unos lentes nuevos.

-Gracias doctor, por recordármelo-Mamá sonríe mientras aprieta mis hombros en forma reconfortarte, tomo su mano y salimos del box. 

-Bien, nos vemos en cuatros días más- Se despide mi madre mientras me lleva a mi cuarto y me pongo mis lentes de siempre veo mucho más que sin ellos, por supuesto. 

(📟)  

Entro a mi cuarto y lo veo, esta jugando con su celular es hermoso como me lo imagina e incluso más, su pelo se agita con el viento que entra por las ventanas, parece trigo con la luz del sol y parece liviano moviéndose con aquel frío viento, su piel blanca se ve suave y esponjosa, sus mejillas abultadas bajo sus ojos lo hacen ver adorable y sus pequeños ojos que de repente me miran... Me hipnotizan. Y más aun cuando desde sus labios salen palabras dirigidas a mi.

-¿Ya te vas? Tan rápido...-Intenta sentarse en su cama.

-Si, pero tu también te vas-Me dirijo hacia él mientras acomodo su cama para que pueda sentarse mejor.

-Si, pero más tarde-Hace un puchero adorable, sus labios rosas como fresas me dan ganas de besarlos, lo cual no debería pensar, pero lo estoy haciendo.

-Bueno, fue un placer hablar contigo-Sonrío intentando controlar mi impulso de tomar sus mejillas entre mis manos y dejando su camilla levemente levantada.

-Lo mismo digo-Sonríe mostrando sus perfectos dientes blancos y unos hoyuelos que parecen pequeños hoyitos de queso en ambas mejillas.

-¡AY Dios!, pero que cara tan deforme-Dramatizo poniendo cara de horror.

-HEY, HEY!, ¿Por qué dices eso?-

-Mira esa deformación en tu mejillas, nada bonito, nada bonito-Niego con la cabeza divertido.

-Mira quien lo dice con esas gruesas gafas y ojos pequeños-Hace unas gafas con sus delicadas manos.

-Primero primor, mis ojos son grandes solo estas gafas ocultan mi belleza, segundo por estas gafas veo todo perfectamente, por eso puedo decir ahora que te puedo ver, puedo decir que tu cara es deforme-puntualizo la ultima palabra haciéndolo reír.

-Ya no me caes bien-Se cruza de brazos como modo de protesta.

-Tu tampoco me caes bien-Lo imito de forma divertida.

- Me caes tan mal, que tendrás que darme tu número de teléfono, para amenazarte en las noches-Estira su mano para que le de mi celular.

-Con gusto, y Yo necesitare el tuyo para burlarme de tus deformidades y tu torpeza-

-Gracias- Dice mientras intercambiamos nuestros teléfonos.

-De nada- Sonreimos.

-¿Estas listo SeungCheol?-Grita mi mama desde la puerta, con el apresuro de volver a su trabajo.

-Casi-Regresó su celular dejando mi numero registrado como "El rey Cheol"-Ahora si mamá-tomo mi mochila.

-Nos vemos Seuncheol-Jihoon agita su mano en modo de adiós.

-Nos vemos Jihoonie-

-Carajo, no me digas así-Me tira un papel.

-Con esa boquita comes pan-Digo ya en la puerta.

-No solo pan, querido amigo-Me guiña un ojo.

-Adiós...-Digo ya del otro lado.

-Adiós cuatro ojos-Lo escucho murmurar y reir.

  📟Clic📟  

Las luces han vuelto y la calma también.

Mamá esta feliz, su rostro reluce como rosas y también huele a rosas.

Papá llego con una torta, para celebrar mi salida.

Jihoonie llamo una vez para verificar que no le haya mentido con el número y para molestarme por la manera de que me registre en su celular.

"No eres un Rey, yo soy el rey" Dijo antes de cortarme.

Hoy fue un día soleado como las naranjas, tibio como mis frazadas.

Mechitas sigue juguetón, y mi corazón ya esta mejor, no duele tanto y las lagrimas no pican del todo en mis ojos.

Estoy mejor después de ver y escuchar al tal Jihoonie, por alguna razón desconocida.

Adiós, a quien me escuche...