Papá [NARRY, AU]

Capítulo 37

(La narración, de aquí hacia adelante ((a menos que lo avise)) sigue con Harry. También quiero recalcar que cuando comencé a narrar con niall pensé que narraría hasta al final con él porque odio cambiar de narrador, por lo que ahora me estoy arrepintiendo de mi yo con trece años PORQUE NARRADOR OMNISCIENTE ES LO MEJOR Y OJALA PUEDA EDITAR LA HISTORIA PERO LA PAJA ES GRANDE Y MEJOR LES DEJO LEER)

"Lo llamamos para informarle que nuestro lugar de encuentro se ha cambiado por razones personales del dueño del edificio"

Hice una mueca de desagrado mientras colocaba un accesorio en el pelo de Colleen, el cual ella me había pasado sin antes decirme que combinaba con su vestido azul. Le sonreí al mismo tiempo que ella bajaba de su pequeña silla y corría hacia su habitación, seguramente buscando su mochila para ir a su segundo día de escuela.

"¿Sí? Y supongo que no cancelarán las clases, ¿cierto?" Le respondí al teléfono, en un claro tono de indignación.

"Por supuesto que no. Encontramos un lugar mejor que el anterior, por lo que las clases seguirán"

"¿Queda muy lejos?"

"Dos manzanas del otro sitio"

"Vale"

Hablé un poco más con la mujer a través del teléfono, antes de colgar y ponerme un abrigo encima de mi ropa, por si me daba frío en el trabajo. Colleen llegó poco después, dando un salto para que la tomara, sonriendo en el proceso.

"Estás un poco pesadita para que siga haciendo esto, ¿no crees?" Le pregunté, cerrando la puerta del departamento detrás de mí.

"No, no es cierto" Replicó, sin borrar su sonrisa "Eres fuerte y me podrás llevar en tus brazos hasta que cumpla los treinta"

Solté una risa, despidiéndome del guardia de la puerta.

"No lo sé, Colleen, hace bastante que no voy al gimnasio. No estoy muy fuerte"

Hablamos un poco más en el camino a su escuela, y cuando se tuvo que bajar, dejó un beso en mi mejilla y se despidió agitando la mano, no sin antes prometerme que se portaría bien y no haría maldades. La dejé, sintiendo por segunda vez en esa semana pena de verla ir, pero esa pena pasó de largo al poner un pie en la oficina, ver a Claire con esa típica mueca de que quería asesinar a alguien, y a su jefe persiguiéndola por detrás, pidiéndole algo desconocido para mí.

"Supongo que no quieres hablar de eso" Murmuré, cuando ya había terminado de realizar pedidos y se encontraba sentada al frente mío, casi quedándose dormida en su puesto.

"¿De qué? ¿Del idiota de mi jefe?" Cuestionó "Por supuesto que no. Prefiero hablar de mi novio"

"¿Qué ha pasado con él?"

De repente, se levantó de su silla, como si todo el cansancio se esfumara de su cuerpo y se animara con el simple hecho de mencionar a Liam.

"Me dijo que iríamos a cenar para nuestro aniversario" Suspiró, cual enamorada.

Rodé los ojos por su exagerada emoción. Teclee algo en el ordenador antes de volver a fijar mis ojos en ella.

"¿Te dijo dónde era?" Pregunté. Su emoción se esfumó, dejándose caer nuevamente en la silla.

"No" Sonó decepcionada "Pero no importa. Si me pide casarme con él, no importa mucho, ya estaré feliz con ello. Sin embargo, si no lo hace, yo misma iré a comprar los anillos al día siguiente y se lo pediré en el centro comercial"

"Claire..." La regañé, más ella no me hizo caso.

"Síp, eso haré" Susurró para ella. Segundos después, pasó una de sus piernas por encima de la otra y me miró con una ceja levantada "Oh, me acabo de acordar de unas preguntitas que quería hacerte ayer sobre tu chico"