Capítulo 41

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Lamento decirles... Penúltimo capítulo D:

(LLOREN POR EL GIF)


Ignoré el hecho de que me había saludado con un beso en la mejilla e intenté no mirar más abajo de lo correspondido cuando pasó por delante mío, luciendo esos maravillosos jeans apegados a sus piernas. Solo recibí su chaqueta y le sonreí, pasando rápidamente por su lado.

"Es bonita" Le escuché murmurar refiriéndose a la casa, una vez ya había colgado su chaqueta en el perchero, y él se encontraba mirando a su alrededor.

"¿Eso crees?" Cuestioné, un poco impresionado "No me gusta mucho"

"¿Por qué?"

"Oh, ya sabes... Cosas como que es muy pequeño, el agua a veces sale muy fría o muy caliente, y también que nuestra cocina es un poco angosta" Le respondí. Me giré a mirarlo antes de recibir las bolsas de plástico "Está bien, o eso creo. Colleen dice que es lindo. Aunque también me gustaría que viviéramos en una casa, pero esto es lo que se tiene, y no me debería quejar tanto"

Mirando al suelo, recogí uno de los juguetes que quizá Colleen no alcanzó a guardar, y le volví a sonreír a Niall.

"Está por aquí. Sígueme"

Luego de asegurarme de que Niall me seguía, comencé a caminar por el pasillo hasta llegar a la última puerta, la cual tenía dibujos pegados y el nombre de Colleen escrito por ella misma en una hoja, obviamente, ayudado por mí, ya que lo normal era que ella escribiera la letra N al revés, o que simplemente no escribiera. Di un par de toques, y sin esperar respuesta, entré a su pequeña y rosa habitación.

"Colleen" Hablé, en voz baja. Solté una risita al ver como ella salía por debajo de las mantas, asomando apenas sus ojos ya que quizás tenía demasiado frío. Me dio un poco de pena por ella y también me causó ternura "Alguien vino a verte"

Pestañeó, haciendo el intento de mirar por detrás de mi hombro, y saliendo completamente de su escondite al ver la cabellera rubia aparecer por su puerta.

"¡Niall!" Gritó, o quiso hacerlo, porque salió más como un susurro.

"¡Dios mío!" Respondió él, con un tono exagerado "Pobrecita, Colleen. No pensé que estarías tan mal. El malo de tu padre no me ha avisado hasta hace unos días, ¿puedes creerlo?"

Colleen hizo una mueca con sus labios, mirándome, confundida.

"¿De verdad me veo tan mal?"

"¡Claro que no! Aunque estés rojita y con el cabello desordenado, te sigues viendo linda, Cole"

Mi hija sonrió, y se escondió debajo de sus mantas antes de salir con una hoja entre sus manos.

"Hice este dibujo. Papá me ayudó. Él hizo este perrito, y luego yo dibujé un perrito, pero me quedó feo" Murmura ella, apuntando a distintos lados de la hoja.

"Te quedó magnífico. ¿Ese es el que hizo tu padre? Uff... Harry, creo que debes ir a clases de dibujo"

Carraspee, rascándome la nuca.

"¿Quieres un café o algo?" Pregunté, levantando las cejas, sin querer hablar de mi intento de dibujo.

"Un café estaría bien"

"Vale" Sonreí, dándome la vuelta "Los dejo por unos segundos. No hagan un desastre"

Escuchando un "No lo haremos" antes de retirarme del sitio, dirigí mis pies hasta la cocina, silbando al no tener nada más divertido que hacer. Dudé un poco sobre si debía hacer café normal y corriente o de cafetera, llegando a la conclusión rápida de que era mejor un café común y corriente porque no tenía ni idea como usar la cafetera, así que esperé a que se hirviera el agua, recargándome en la encimera.

Papá [NARRY, AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora