LIMERENCIA

18 - Lo escribí pensando en ti

No te haces una idea de las ganas que tengo de decir a gritos que te quiero, que nada me haría más feliz que estes sentado a mi lado. Que nada me alegraría tanto como seguir conociendote. Que vital sensación notar la belleza que te invade en estos instantes. Cuando todo es tan oscuro. Ese momento en el que lo único que alumbra mi espacio es tu presencia.

- Bueno, ahora destruí la nota. - Me exigió el psicólogo

- ¿Por qué? hace no más de cinco minutos me pediste que la escribiera. - Lo miro confundida

- Es parte del proceso, eso no se lo vas a dar al chico. Se trata de escribir lo que sentis y luego desvanecerlo. Un trabajo para sacarte de la presión que te produce este asunto. Necesitas desahogarte.

- Ah, ya entiendo. ¿Ya me puedo ir?

- Antes contestame una cosa. ¿Cómo fue que terminaste viviendo en el mismo edificio que Charlie?

- Ah, pues, no se. Supongo que fue una coincidencia. - Intento mentir

- Bueno, nos vemos mañana. No faltes. - Me retiro de la sala un tanto apurada

Ya pasaron algunos días, no se cuantos, perdí la cuenta. La cuestión es que mañana comienzo oficialmente a formar parte del trío Ignacio, Bookme novata y un resentido que aún no perdona mi pendejada de hace tiempo.

Mi profesor de entrenamiento mental dijo que la mejor tarea para mi iba a ser la de "La manzana roja" . Tiene ese nombre ya que representa a la tipica manzana de Blanca Nieves, aquella que luce apetitoza pero que por dentro está invadida de veneno.

Llegando al punto, mi talento principal resultó ser el de engañar a las personas a través de mi imágen. Parece el colmo, lo se. Mi primer día haciendo ese tipo de cosas había resutado ser un desastre que terminé con el cabello colorado; por cierto necesito retocarlo, ya se está tornando anaranjado.

Con el tiempo aprendí a creer en mis mentiras, meterme en otro personaje, así como lo haría una actriz.

Lo bueno esque no tendré que matar, al menos no de forma directa.

Este fue mi tercer día con el psicologo. La verdad es que me está ayudando bastante, pero siento que voy a necesitar meses de seciónes para poder superar todos estos cambios repentinos e inesperados que dieron vuelta mi vida.

Lo peor resulta ser que ni el psicólogo me puede ayudar al máximo ya que no puedo decirle con exactitud como fueron los cambios en mi vida. Por ende solo le cuento la cagada que me mandé para que Charlie cambiara su forma de verme por completo, que mi papá es un mujeriego, que extraño a mi familia, y agregué que es un gran peso el de la universidad por no decir mafia.

- Bookme vení, compré pizza - Me grita Mag desde la cocina

Bajo como si mi vida dependiera de ello y tomo una porción de la caja.

- ¿Cómo estuvo tu día? - Le pregunto masticando un hermoso y gigante trozo de esta delicia

- Cansador, la universidad es jodida. Yo pensé que las personas exageraban, pero no. - Suspira de cansansio

- Bueno, pero vale la pena el esfuerzo. Pensá que a futuro tendrás dinero y privilegios.

- Si, es verdad. ¿Vos que onda? - Me mira directo a los ojos

- ¿Qué onda con qué?

- ¿Ya superaste a Charlie?

- No. Pero ¿sabes qué? Ya me cansé de buscar a alguien y mendigar amor. Hoy decido cambiar las cosas. Ahora voy a ser yo a la que estén buscando, quiero que llegue alguien tan repentinamente como aquel instante en el que el viento invade mi rostro cuando salgo a la calle. Ese alguien invaderá mi espacio al abrazarme tan fuerte como si de eso dependiera su respiración. Me transimitirá seguridad y confianza. Aquello que perdí a lo largo del tiempo. Me dirá que me quiere. Palabra poderosa dependiendo de quién lo diga.

Se mantiene un silencio que desconocía durante 15 segundos. Mag comienza a aplaudirme.

- Bravo, esa es mi amiga. - Me abraza mientras sostiene una porción de pizza con sus dedos.

El timbre sonando en el departamento interrumpe mi adorable abrazo con Mag.

- ¿esperabas a alguien? - Le pregunto sorprendida

- No, voy a ver quien es. - Mag se dirige curiosa a la puerta; la acompaño

Al abrirla nos topamos con una sabrosura tropical. Un chico alto, con musculos fáciles de notar y una mirada encantadora.

- Hola, vivo en el piso de abajo. Me mude la semana pasada. ¿Me podrían prestar un encendedor por favor? se los devuelvo enseguida.

Nos quedamos heladas, no nos movemos.

- Si es mucha molestia mejor me v..

- No, no es molestia, voy por él. - Grita Mag de repente y sale en busca de lo que sea que haya pedido esa guapura

- Ah, por cierto. Me llamo Sebastián. - Me estrecha su mano para saludarme

- Yo, b Bookme - Tartamudeo

- Que bonito nombre Bookme. - Me sonríe

- Gracias Seba. - En eso llega Mag con lo que pidió Seba

- Acá está. - Se lo entrega sonriendole

- Muchas gracias chicas. - Se va con el encendedor en la mano

Cierro la puerta de mi casa.

- Es lindo. - digo suspirando

- Es sexy. - sonríe Mag

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Hola gente bonita..

Ojalá les haya gustado el capítulo de hoy.

Les cuento que estaré de viaje durante dos semanas y puede que no cuente con internet para publicar los próximos dos capítulos. Por lo tanto decidí publicar los que corresponden a los próximos martes mañana y pasado para así no atrazar la historia.

SALU2