Privilegios NO Deseados

Capítulo 2: Matt Taylor [Editado]

Cuando pase por las grandes puertas de madera con diseños tallados a sincel, me encontre con un pasillo largo.

- ¿Dónde están todos?- dije para mi misma.

Caminé en busca de la recepción durante unos minutos, cuando me detuve a admirar una pintura o como le decia mi madre, frescos, aunque me parecia muy absurdo, en fin, me enfoqué en una sola pintura que me parecia muy familiar como si fuera un retrato mio, cuando en cuestión de segundos un peso muerto cayó encima de mí, dejándome plasmada en el piso.

Inmediatamente grité de dolor y maldije por lo bajo.

- Demonios- dije con poco aire.

- ¡Lo siento mucho!- dijo un chico levantándose de inmediato y ofreciéndome su mano para ayudarme.

- No, gracias. Yo puedo sola- dije haciendo a un lado su mano y levantándome adolorida.

-Lo siento mucho- repito varias veces con una cara de preocupacion.- Me llamo Matt Taylor - dijo extendiéndome su mano con ternura - ¿Cómo te llamas?

- Heather Collins -dije dándole la mano de vuelta.

- ¿Collins?- dijo con confusión- ¿No serás la hermana de West Collins?

- Si- dije con cautela- ¿Lo conoces?

- ¡Claro!- dijo con una sonrisa- Es amigo mio y compañero de cuarto.

No. Puede. Ser. Pensé es un amigo de mi tan querido hermano, nótese el sarcasmo, lo menos que queria es establecer una conversacion con alguien que conozca a mi hermano.

- Bueno por lo menos tiene un amigo- digo y suelta una carcajada.

- ¿Uno?-dijo con cara de incredulidad- ¡Todos aquí lo conocen!

¡Bueno ya esta, seré una antisocial! Mi cara debio ser de foto, ya que mis ojos se agrandaron y mi boca se abrio un poco, haciendo que Matt riera.

- ¿Por qué te ríes?- dije sólo un poco molesta- No es gracioso.

- Claro que si, debiste haber visto tu cara- dijo ya parando de reir.

- Cómo sea- dije haciendo un ademán con la mano de que me daba igual.

A primera impresion el chico era lindo, demasiado para mí gusto ¿Todos serán así aquí? No dejaba de pasarse la mano por su cabello castaño y tenía que levantar mi cabeza para poder verlo bien, debería medir como 1,80, y si no fuera porque sus ojos me miraban tan directamente, de una forma tan profunda, no me hubiera dado cuenta que eran cafés, pero un café tan intenso que tenías que apartar la mirada para no perderte en ellos, podría verlos todo el día, está es la clase de chico que con solo mostrar una sonrisa ladeada puede hacer cualquier chica babee y caiga en sus píes, siempre hay uno en cada Internado. Era muy atractivo.

¿Qué demonios? ¿Yo pensé eso? Dios no.

- ¿Sabes dónde queda la recepción?- le pregunté un poco shockeada por el anterior pensamiento.

- Si, no esta tan lejos- dijo- Si quieres te acompaño

- Oh no, es suficiente con que me digas dónde queda.- dije simpática- No hace falta que me acompañes.

- Quiero hacerlo.- dijo seguro- De todas formas ya no llego a clases.

- Bueno- digo no muy segura.

Matt me tiende el brazo como si estuviéramos en el siglo XVIII, lo miro ¿Y a este que le dio?

- ¿Qué?- dice aun con el brazo aún tendido.

- ¿Como que qué?- digo negando con la cabeza- No pienso aceptarlo.- Tengo que admitir que puedo llegar a ser muy odiosa.

- Solo queria ser un caballero.- dijo- Ante está bella dama-añadió coqueto.

- Si, no creo- dije- ¿Podemos irnos de una vez?

- Claro, vamos.- dijo con una sonrisa- Por aquí- dijo, señalandome el camino.

Caminamos por unos minutos hasta llegar a una puerta, luego nos paramos frente a ella durante unos segundos, que para mi fueron eternos.

- Aquí es.- dijo rompiendo el incomodo silencio que se había formado- Bueno...yo...- empezó a decir.

- ¿Tú...?- dije con curiosidad.

- ¿Me podrias dar tú numero de teléfono?

Pensé durante unos segundos, ¿Por qué no dárselo? De todas formas lo podría conseguir sin yo darselo, mi hermano es su amigo, con solo quitarle el teléfono y buscar mi número tiene ¿no? Además fue muy amable.

- Está bien- dije.

- ¿En serio?- dijo- Pensé que iba hacer más difícil.

Un segundo, ¿Me acaba de llamar fácil?

- ¿Cómo dijiste? ¿Me acabas de llamar fácil?- dije incrédula- Bueno sabes quien te va a dar mi número, sabes quien te va a dar mi número, ¡Tú abuela te va a dar mi numero!- dije adentrándome a lo que sería la recepción, cerrando detrás de mi las puertas en las narices a Matt.

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Hola lamentó la demora pero aquí ya está el segundo capítulo, espero que sea de su agrado!

PD1: Voten y comenten!

PD2: intentare de subir cada semana!

PD3: Me gustan los posdatas!

- HMCH.

XOXO