Demonios.
Poco a poco me incorpore, a pesar de la molesta luz del sol. ¿Donde demonios estoy? ¡Qué dolor de cabeza tengo! Debería pararme de la cama, o llegare tarde a clases.
Lentamente me fui levantando, me dolía mucho la cabeza. ¿No era sábado? Hoy no tenía clases, que bien. No recuerdo nada de lo que paso anoche, debería ir a hablar con Maddie.
Me estire totalmente y la sabana se deslizo hasta mi cintura. Estaba en ropa interior.
- Buenos días- dijo alguien a lado mío, incorporándose. Me puse blanca, de piedra, estaba en shock. ¡Esto no puede estar pasando!. Grite con todas mis fuerzas y con una almohada empece a golpear a mi acompañante como si no hubiera un mañana, se cayó de la cama.
- ¿¡Se puede saber que demonios pasa contigo!?- Gritó desde el suelo enfadado.
- ¡Qué que pasa conmigo! ¿Como tienes el descaro de preguntarme eso? ¡Depravado!- le grite vuelta una furia.- Me la robaste. ¡Mi tarjeta V!- dije ahora lloriqueando.
- ¿Que demonios es eso? ¡Yo no te e robado nada!- dijo confundido para después entender- Heather, cariño.- dijo dulcemente mientras se paraba y se sentaba junto a mi. Lo mire con recelo.- Sigues siendo virgen, nadie se a acostado contigo.- lo mire incrédula.
- Explica entonces porque estoy en ropa interior- al recordar eso me puse roja y busque la sabana para taparme, el también se puso rojo y desvío su mirada de mi cuerpo que se había puesto ahí a nombrar aquella parte.- explica también porque estabas durmiendo conmigo y que no recuerdo nada. Si no nos hubiéramos acostado no estuviera... Así.
- Eso es fácil de explicar- dijo gracioso.- Verás, tomaste demasiado anoche, dios sabe cuanto tomaste- me miro con reproche.- Y estabas tan ebria que ni te diste cuenta de que Chase se estaba propasando contigo y te estaba llevando a la cama- me dijo ahora super serio.- Yo no me había percatado hasta que te vi subiendo las escaleras con él, intente llegar lo mas rápido que pude pero eso era un desastre, había mucha gente. Cuando llegue Chase ya te tenia en ropa interior y sobre la cama...- dijo furioso. Yo estaba impactada.- Pelee con él, no podía dejar que se saliera con la suya. No te iba a poner otra mano encima, no si estaba yo para evitarlo.- estaba vez me estaba mirando a los ojos, serio.- Cuando acabe con él tu estabas en blanco, tenias miedo y me pediste que no te dejará sola. Y no lo hice, no te deje sola. Intente que te pusieras la ropa pero empezaste a sollozar y a los pocos minutos te quedaste dormida...- dijo con una media sonrisa- Te ves linda mientras duermes.- mire para otro lado sonrojada. Se rió.- y ahora, bueno. Acabo de despertar y me atacaron con una almohada.- dijo gracioso, aunque para mi no lo era. Él me protegió y yo le pague con almohadazos, insultándolo e insinuando cosas totalmente erróneas. Me sentía muy avergonzada. Y le debía una disculpa.
- Yo...- dije sin saber por donde comenzar.- De verdad no lo sabia. Lo siento, no debí tratarte así, es solo que... Estaba en ropa interior y te vi a ti aquí y... No se, saque conclusiones rápidamente... Lo siento, y gracias por todo lo que hiciste. De verdad lo aprecio Matt.- dije con sinceridad.
- No se merecen, por ti haría cualquier cosa.- dijo sonrojándome. Con él no paro de sonrojarme, basta ya. Contrólate Heather. Aunque debí darme cuenta yo sola, el no estaba en ropa interior... Dios mío.
Me removí algo incomoda, seguía en ropa interior. Matt lo noto.
- Oh, lo siento. Ya salgo. Ahí está tu ropa- dijo señalando mi ropa que estaba en una esquina de la habitación. Salió algo rojo de la misma.
Inmediatamente me levante y la punzada de dolor fue terrible. Me dolía mucho la cabeza. Me vestí lo más rápido que pude. Al terminar tocaron la puerta. Era Matt.
ESTÁS LEYENDO
Privilegios NO Deseados
RomanceHeather Collins, es una chica muy poco común. Su vida parece fácil, pero no lo es. Ella cree que su vida es un infierno, pero nunca se imagino que el infierno que ella creia que vivía se convertiría en el cielo a comparación con lo que el destino te...