Privilegios NO Deseados

Capitulo 6: Las presentaciones 3/3

- P-pero... ¿C-como...- me aclare la garganta, no iba a tartamudear, menos frente a el- ¿Cómo entraste aquí?- le pregunte. Alzo una mano enseñándome una llave.- ¿Es la llave de aquí?- asintió. Antes de que pudiera preguntarle porque mierda tenía la llave de aquí, me interrumpió una soñolienta Maddie que salía de su cuarto.

- Heather- dijo Maddie aun adormilada- ¿Qué pasa?- pregunto mientras se restregaba los ojos con sus manos.

- ¿Qué pasa?- repetí- ¡Eso pasa!- dije señalando con un dedo al intruso. Maddie dejo de restregarse un ojo para ver a donde señalaba.

- Oh- fue lo único que dijo.

- ¿Solo vas a decir "Oh"?- le pregunte- ¡tenemos a un intruso!, podría ser un secuestrador, un violador o ¡un asesino!- exclame horrorizada. Maddie solo se echó a reír.

- Mi hermano puede ser muchas cosas, pero no es un secuestrador, violador y mucho menos asesino- dijo Maddie ya parando de reír.

- ¡Claro que... ya va, ¿Qué?- ¿Escuche bien? ¿Dijo hermano?- ¿hermano?- le pregunte confundida.

- Si, este idiota- dijo mientras señalaba al intruso- es mi hermano.- no me esperaba eso.

- Oh...- fue lo único que dije.

- ¿Ya pueden dejar de hablar de mi como si no estuviera aquí?- pregunto el intruso a lo que yo ni le hice caso. Después de un segundo lo mire bien, analizándolo. Solo una palabra. Wow, este chico quitándole todo lo idiota e imbécil es realmente atractivo... es MUY atractivo, cabello castaño, más oscuro que el de Maddie, unos ojos azul verdoso como ya dije antes hermosos, un cuerpo espectacular, wow. Si mi mama lo viera lo convertiría en un modelo y lo pusiera en la portada de una revista. Si, si lo haría, conociéndola...

- ¿Te gusta lo que ves?- pregunto el intruso al notar mi intensa mirada. Los colores subieron a mi cara, me había atrapado mirándolo.

- Quisieras tú y por las dudas, no, no me gusta- mentí. Me miro con esa sonrisa burlona en la cara.

- A mí sí me gusta lo que veo- afirmo lanzándome una mirada que paso por todo mi cuerpo. Oh dios mío, ¡Sigo en esta diminuta toalla! Ahora si estaba roja como un tomate.

- Imbécil- solté. Rápidamente fui al sofá por mi ropa pero solo estaba la sudadera, la cual agarre- ¿dónde...- deje la frase en el aire al mirar al intruso y ver su cara, tramaba algo.

- ¿Buscabas esto?- pregunto alzando su mano en donde se veía mi ropa interior. ¡Imbécil!. Mire de reojo a Maddie quien nos ignoraba mientras le sonreía a su teléfono, debe estar hablando con Dylan.

Me acerque peligrosamente al intruso o como sea que se llame mientras con una mano sostenía la toalla.- ¡Serás...- no pude terminar la frase ya que el imbécil con su mano libre me había tapado la boca.

- ¿Con esa boca le dices te quiero a tu mama?- pregunto mientras negaba con la cabeza. De un manotazo le quite su mano de mi boca.- Auch...- fingió dolor- por cierto me encanta la ropa interior negra con encaje, es mi favorita- dijo refiriéndose a la que tenía en su mano, a la mía.

- Eres un... Aaah- grite exasperada- ¡dame mi ropa!- le exigí.

- Alcánzala- dijo mientras subía su mano hasta quedar sobre su cabeza, el idiota era muy alto y yo no era taaan alta para alcanzarla, pero en vez de utilizar mi altura use mi fuerza, le di un golpe seco en el estómago, y como no se lo esperaba le afecto, se agacho agarrándose el estómago, quedando mi ropa a mi alcance, la agarre y corriendo me fui al baño y me encerré en el. A la velocidad de la luz me vestí. Ya estaba lista, el único problema era que no quería ver al imbécil, pero tenía que hacerlo si quería ir a mi cuarto y digamos que no me apetecía dormir en la bañera.

Tu puedes Heather, solo abre la puerta, corre a tu cuarto, te encierras en él y listo, nada puede fallar ¿O sí? No, nada puede fallar.

Abrí la puerta y a paso rápido me dirigí a mi cuarto, sin ver a Maddie ni al idiota.

- Heather- me llamo Maddie. Pero la ignore, yo ya estaba frente a la puerta de mi cuarto- ¡Heather!- me volvió a llamar. Me puse a pensar un segundo, ella no ha hecho nada para que la ignore o la trate mal. Me voltee y le dedique una sonrisa, ella me la devolvió.- Ven.- fui a donde estaba ella y en el camino pude ver que su hermano seguía ahí, no se había ido.- Quiero presentarte a mi hermano como se debe ¿Si?- asentí no muy feliz por la idea.- Bueno... Heather él es Tyler, Tyler ella es Heather- nos presentó Maddie. Tyler, que estaba al frente mío-no se desde cuándo-extendió su mano hacia mí, invitándome a estrechársela. Yo como una persona con principios no la rechacé-aunque ganas no faltaban- y también extendí mi mano hacia él, para juntarlas en un apretón de manos.

- Un placer Heather- hablo Tyler educadamente, sin una pizca de lo idiota de antes, que... raro.

- El placer es mío- deshicimos el apretón y Maddie sonrió contenta.

- Eso es, ahora a dormir, estoy cansada y mañana hay que levantarse temprano.- dijo Maddie.

- Maddie- hablo Tyler- aun no me has dicho por qué querías hablar conmigo.

- Oh- dijo Maddie para luego se le oscurecieran sus ojos un poco, estaba molesta.- Tyler Hamilton- le señalo- se puede saber ¿¡Porque coño la falsa de tu novia tenía mi suéter hoy!?- Wow, era la primera vez que veía a Maddie así, casi siempre estaba feliz. Cuando se molesta, se molesta.

- Veras- empezó a explicar Tyler- ayer dejaste el suéter en el sofá de nuestra pieza y cuando te fuiste no te lo llevaste. En la mañana vino Danielle y como tenía frio le preste tu suéter. Fin de la historia.- termino de explicar Tyler.

- Escúchame con atención porque no te lo pienso repetir- hablo Maddie lentamente- No quiero que ninguna de tus perras toque y menos que use mis cosas, ¿entendido?- le pregunto Maddie entre dientes, a lo cual Tyler asintió efusivamente.- Ahora vete que quiero dormir- Tyler asintió y Maddie se fue a su cuarto mientras se despedía con un simple- Buenas noches.

Ahora solo estábamos él y yo, que incómodo.

- Me voy a dormir- le avise, él ni me miro.- Buenas noches.- me di la vuelta y empecé a caminar pero a los segundos Tyler me agarro del brazo.

- Espera- dijo, parecía que quería decirme algo. Se quedó callado unos segundos y después me soltó- No, nada- dijo desanimado pero ¿Por qué?- Buenas noches, que descanses- se despidió para luego darse la vuelta y a toda prisa salir de la pieza. ¿Ok? Eso fue raro.

Me fui a mi cuarto y antes de acostarme a dormir configure la alarme en mi teléfono y lo puse a cargar.

Me adentre en mi cama y me quede pensando en todo lo que me paso durante el día, demasiadas cosas para un día.

Espero que todos los días no sean así.

Y con ese último pensamiento me quede profundamente dormida.

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¡Hola!

Esta es mi tercera y ultima escapada, y con ello llega a su fin el maraton.

Espero que les haya gustado el maraton.

Este capitulo es poco corto.

Eliminare el aviso.

Voten y comenten si les gusto el maraton.

Nos leeremos pronto

HMCH

XOXO