No había cambiado en estos últimos meses, en los cuales no lo había visto. Seguía teniendo el mismo estilo de rompe corazones de siempre, lo cual no me beneficiaba, ya que las miradas de envidia por parte de las féminas hacia mi persona, los intentos de amistad interesada y los varios intentos-fracasados- de pasarme por encima, los cuales nunca faltaban, eran muy seguidos y sólo por el detalle de que el era un poco guapo, bueno en realidad muy guapo, digamos que sería algo así como el tipo al que todas las adolescentes con hormonas revoloteando desean.
El me estaba mirando directamente a los ojos mientras se acercaba a paso lento a mi. Me pare de mi asiento correspondiéndole la mirada, mientras que igualmente me acercaba a el a paso lento, ignorando los llamados de Maddie, los cuales me preguntaban que qué me pasaba. Sólo me quedaba unos pocos metros para al fin tenerlo frente a mi.
Lo primero que hizo al situarse al frente mío fue acortar las distancias entre nosotros para darme un cálido y fuerte abrazó de oso.
- Heather- dijo en un suspiro- no puedo creer que estés aquí, no sabes todo lo que te eh extrañado, me hacías falta pequeña- hubiera hecho una mueca ante ese apodo si no fuera porque el abrazo me estuviera evitando el paso de aire a mis pulmones.
- Y-yo... N-no... Puedo r-respirar- dije a duras penas, esperando que me hubiera entendido.
- Lo siento- dijo rompiendo con el abrazo. Al sentir que el aire llegaba rápidamente a mis pulmones empece a toser-Heather, ¿estas bien? Estas roja.
- Estoy perfectamente...- dije aún tosiendo- perfectamente- afirme.
- Oh Heather, me alegra que estés aquí- me recordó Brandon. Me quede mirando a sus ojos por un buen rato, aún se reflejaba un poco la emoción. Ahora, después de estos meses sin verlo esta ahí, frente a mis ojos, no podía describir lo emocionada que estaba, decir que había tocado las nubes era quedarme corta, no hay nada más feliz que tener a mi mejor amigo conmigo.
- Oh Brandon, no sabes lo feliz que estoy de verte- dije saltando a sus Brazos, para otro buen abrazo, el cual no dudo en corresponderlo- te extrañe muchísimo.
- Y yo a ti pequeña... Y yo a ti.
Una voz a nuestras espaldas carraspeo haciendo que rompiéramos con el abrazo y dirigiéramos nuestra atención a ella.
- Por lo que veo ya se conocen- hablo Maddie- pero les recomiendo que hagan su reencuentro o lo que sea que estén haciendo en otro lugar ya que... Todos los están viendo- dijo susurrando la última parte.
Desvíe mi mirada de la de Maddie para poder observar a mi alrededor, confirmando que habían como cien pares de ojos observando la pequeña escena que habíamos hecho Brandon y yo.
El timbre sonó haciendo que todos nos dejaran de prestar atención. Entre todas las miradas pude notar como la de envidia y curiosidad resaltaban entre todas las otras.
- Heather- me llamo Maddie- ¿ya tienes tu horario?
- Si, toma- le tendí el papel con mi horario, el cual estaba en uno de los bolsillos de la chaqueta que traía puesta.
- Te toca... Ciencias- dijo con los ojos en el papel- y te toca conmigo.
Asentí.- Brandon, ¿qué haces aquí? Tu no estudiad aquí.
- Bueno...- comenzó rascándose la cabeza nervioso, desvío su mirada de la mía al suelo- yo... Vine a recoger unos papeles...- me miro nervioso.
- ¿Papeles?- me extrañe- ¿para qué los papeles?- le pregunte ahora curiosa.
- Bueno... Son papeles para unas becas..- me volvió a desviar la mirada. ¿Becas?, ¿para qué?, ¿para él?, ¿qué lo tenía tan nervioso?
- ¿Para quién son las becas?- seguía sin mirarme a los ojos. No se qué le pasaba.
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Privilegios NO Deseados
RomanceHeather Collins, es una chica muy poco común. Su vida parece fácil, pero no lo es. Ella cree que su vida es un infierno, pero nunca se imagino que el infierno que ella creia que vivía se convertiría en el cielo a comparación con lo que el destino te...