10

1.2K 190 86
                                    

-Entonces, ¿cuando llega?.- pregunté a Yuuri cuando éste colgó el teléfono.

-Dice que mañana en la noche.- contestó algo nervioso.

-¿eso significa que ya no te quedaras en mi casa?.- dije algo decepcionado.

-Así es, lo siento- dijo mi amigo avergonzado.- pero creo que tampoco nos quedaremos en este hotel, no quiero causarle más problemas a tu amigo.

La mención de Seung hizo que pegara un pequeño brinco.

-No creo que sea tan exagerado- persuadí a Yuuri.- ¿verdad que da un poco de miedo?

-¿Un poco?.- contestó con burla.

-Yuuri, quédate en este hotel, por favor.

Quería tener una razón válida para poder venir todos los días y ver si había posibilidad de encontrarme con Seung.

-Esta bien, Phichit.- accedió Yuuri con una sonrisa ladeada.

-¡Gracias!-exclamé abrazando al japonés.- bueno, debes de estar cansado, vendré mañana temprano para ir a desayunar, ¿de acuerdo?

-De acuerdo.

Me despedí de mi amigo y le desee buenas noches, una vez a fuera del cuarto de Yuuri pude ver la puerta de en frente, me acerque un poco y pegue la oreja, no se oía absolutamente nada. Debe estar dormido.



Desperté con la ligera sensación de que algo muy bueno iba a pasar hoy. Me levante con los mejores ánimos que tenía y me puse a hacer el desayuno, sé que había quedado con Yuuri de salir pero preferí cocinar algo y llevárselo.

Una vez termine me dirigí hacia el hotel.



-Lo siento, Phichit, no me siento bien.- dijo Yuuri y no era necesario que me lo dijera, se le notaba en la cara.

-¿Puedo hacer algo?.- pregunté preocupado.

-No... Y tampoco quiero que te quedes, solo quiero dormir.- su tono de voz era tan serio que no me atreví a insistir.

Yuuri se disculpó de nuevo antes de cerrar la puerta.

-¿Y ahora qué hago con esto?- pregunté viendo la comida que había preparado.- creí que hoy iba a ser un buen día...

Por un impulso me dirigí a la puerta de enfrente y con un poco de miedo toque la puerta dos veces. Silencio. La toque tres veces. Otra vez ese silencio. Ya iba a tocar con más fuerza cuando un ladrido se escuchó por adentro.

-¿Qué pasa Dae? ¿Ahora sí escuchas la puerta.- la voz de adentro se oía tan animada que por un momento dude que se tratara de Seung.

La puerta se abrió y lo primero que se vio fue a un perro moviendo la cola con energía. No pude evitar sonreír. Me agaché para acariciarlo.

-¿Qué haces aquí?.- preguntó Seung, no de forma hostil sino más bien asombrado.

-Dijimos que íbamos a salir hoy.- mentí.

-No, no quedamos en nada...- él estaba dudando.

-Claro y pensé que sería mejor que comiéramos juntos. Mira, yo cocine.- dije orgulloso mostrando lo que llevaba en la mano.

Seung no respondía y Dae Sung estaba a mi lado viéndolo también, este último ladro y Seung lo volteó a ver. Sin duda tengo el apoyo de su mascota.

-Bien.

Accedía muy rápido, pensé.

Me levante y me adentré a la habitación, era la misma que la de Yuuri pero las cosas se ubicaban en lugares distintos. Estaba igual de ordenada, solo una maleta. Sin duda me daría vergüenza si este chico entrará a mi habitación. La cama era la única desarreglada, el acababa de levantarse.

Nuestra Historia Juntos (SeungxPhichit)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora