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-¿Por qué estás tan nervioso, Yuuri?.- pregunté al japonés riendo.

-N-no te burles, Phichit!.- contestó de una forma tan graciosa que me hizo reír aún más.

Estábamos en mi habitación y Yuuri tenía uno de mis hámsters en su mano, los otros dos estaban en mis hombros.

Este chico estaba tan nervioso por la llegada de su novio.

-Yuuri, actúas como si fuera la primera vez que se verán.

-Es que tú no entiendes, Phichit- dijo nervioso.- cuando el llegue...

-¿tendrán sexo?.- pregunté riendo y el chico se sonrojó. Esta situación era muy graciosa.

-No es... No es solo eso, Phichit- hizo una pausa como si quisiera organizar sus ideas.- entenderá el porque me fui de repente... Se molestara...

Lágrimas contenidas se acumularon en sus ojos y se desbordaron, dejó al hámster a un lado y se tapo la cara con sus manos.

-Ohh Yuuri.- dije dejando de bromear, retire los hámsters de mis hombros y tome al japonés entre mis brazos.

-No... No sé qué hacer.- decía entre sollozos.

-No es para tanto, tal vez te sorprenda lo compresivas que pueden llegar a ser las personas.- trate de consolarlo.

Ya no dijo nada y solo se limitó a llorar, desahogarse, yo solo lo abrazaba y trataba de tranquilizarlo.

Pasó un rato y ya no se oía ningún sonido emitido por Yuuri, revise como es que se quedo tan tranquilo y pude ver que se había quedado profundamente dormido.

Lo aparte de mí y con cuidado lo acomode para poder acostarlo en mi cama. No parecía despertar, se veía tan tranquilo. Le retire sus gafas y las coloque en una mesita, agarre mis hámsters y los metí en sus jaulas.

-Ahora vuelvo, Yuuri- le acaricie la cabeza.- llegare antes de ir al aeropuerto.



Salí de casa sin ningún plan. Caminaba sin dirigirme a ningún lado en particular. Tome un transporte que me llevaría a un posible destino que desconocía... O eso creía hasta que vi las luces del hotel que he visitado los últimos días.

Un impulso hizo que me levantara de mi asiento y saliera corriendo del transporte. Mis pies y piernas corrían sin obedecer a mi mente de que se detuvieran.

Sin darme cuenta estaba en frente del cuarto de Seung. Mi respiración era agitada. Dude en tocar la puerta pero una vez seguro lo hice.

No pasó mucho tiempo como la otra vez cuando Seung abrió la puerta. Tenía un mal aspecto, su expresión era de tristeza. Creí que me diría que me largara pero no fue así, solo me miró y se volvió a meter al cuarto dejando la puerta abierta. Parecía que estaba de acuerdo con mi llegada así que entre.

-Hola, Seung.- dije nervioso. No respondió.

Dae estaba acostado en el piso emitiendo pequeños gemidos de tristeza viendo a su dueño. Sin duda Seung estaba mal y si su perro se preocupaba significaba que esto era serio.

El coreano estaba sentado en la silla del escritorio con su cabeza apoyada entre sus manos; la computadora estaba prendida con un archivo abierto. Me acerqué con cautela hasta estar en frente de la pantalla, atrás del asiento de Seung. Solo alcance a leer el nombre del archivo donde solo tenía la fecha hoy.

-Que haces aquí, Chulanont.- pronunció el hombre con la cabeza entre sus manos. No parecía tener emoción en aquellas palabras.

-No lo sé.-decía la verdad.

-Ya veo.

Silencio de nuevo.

-Oye, Seung.-espere una respuesta.

Dae ladro haciendo que los dos hiciéramos un brinco de sorpresa.

-Que pasa.- dijo Seung estando en la misma pose.

-¿Quieres escuchar música?

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Pues... Sí :v

Gracias por leer<3

Nuestra Historia Juntos (SeungxPhichit)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora