No tenia por que pasar

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CAPITULO 4

El cuerpo del muerto cayó al suelo después de haber sido atravesada su cabeza por una barra de hierro dejando esa figura recortada por la luz casi cegadora del sol
(Sofía)- Lola, ¿Que haces aquí?
(Lola)- Pues es algo largo de contar, después de que el campamento militar se destruyera mis padres y mi hermana murieron
(Sofía)- ¿Por que no nos buscaste? Te hubieras venido con nosotros
(Lola)- Sabes que Tato no me dejaría estar con vosotros
(Sofía)- Por que él lo diga
(Marisol)- Lolina hija, ¿estas bien?
(Lola)- Sabes que yo siempre estoy bien Marisol
(Cari)- Muchas gracias
(Lola)- Sofía, ¿Que tal el niño?
(Sofía)- Esta más apagado, no es como antes, creo que esta aburrido o tiene miedo
(Lola)- Ya verás lo que se alegrará cuando me vea, si Tato me deja entrar
(Cari)- Vámonos de aquí ya o vendrán más
(Lola)- ¿A donde queréis ir?
(Cari)- A la casa de Sole
(Lola)- La avenida está completamente invadido por muertos
(Sofía)- Ya sabes mamá no se puede ir
(Marisol)- Tu no iras yo si
(Lola)- Marisol entra en razón no podemos
Marisol se enfadó y siguió hacia delante y Cari la seguía
(Lola)- Esperad, podemos pasar de una forma, montándonos en el coche y atropellándolos a todos y no parar hasta llegar a tu casa, eso si, después tendremos que salir rápido por que si no vendrán de nuevo
(Sofía)- Estás loca, ¡nos iremos de aquí ahora! Os guste o no
Todos acatando las órdenes de Sofía y con Lola al volante se montaron en el coche y cuando menos se lo esperaban Lola torció y pasó por mitad de la avenida llevándose por delante a un montón de muertos pero al final consiguiendo su objetivo, todos bajaron del coche y entraron en la casa, cuando abrieron la puerta un olor nauseabundo entró en sus fosas nasales, vieron cuerpos putrefactos con casi nada de carne y esa poca de carne siendo devorada por gusanos, Marisol se quedó sin habla lo único que salía de su cuerpo eran lágrimas de dolor y sufrimiento al ver a sus mascotas totalmente en descomposición
(Cari)- Es hora de irse
(Lola)- Cari tiene razón es hora de marcharse están comenzando a llegar muertos
(Sofía)- Lo siento mamá
Sofía cogió un bate de béisbol del cuarto de su hermano y golpeó algunos cráneos, Cari mientras arrancaba el coche y Lola ayudaba con los muertos a Sofía, Marisol vio que se aproximaba un muerto por detrás y ella se arrodilló en el suelo, cerró los ojos y susurró
(Marisol)- Dios, ten mi alma
El muerto llegó hasta ella y le dio un mordisco en el hombro, Marisol gritó de dolor, Sofía se giró y vio como devoraban a su madre
(Lola)- Sofía vámonos
(Sofía)- No puedo, tengo que ayudarla
Dijo llorando
(Lola)- Ya no hay ningún remedio
Se montaron en el coche y con Cari en el volante se fueron de San Roque, cuando iban por la carretera dirección Los Montitos un muerto se les atravesó y chocaron contra un árbol dejando el vehículo inservible, se pusieron a caminar sin ganas de vivir y oyeron una explosión de fondo, el motor del coche había estallado, siguieron andando y cuando llegaron al Cerro de Reyes vieron a una niña sentada en el suelo sola y llorando, rápidamente Sofía se acercó a ella
(Sofía)- ¿Estás bien? ¿Y tus padres?
La muchacha levantó la cabeza y...
(Sofía)- Irene, Irene Dios mío, mi niña
Sofía se alegró de haberla encontrado y se la llevaron con ella, Irene no dijo ni una palabra
¡¡¡PIIIIII!!!
Miraron las cuatro hacia atrás y vieron el gran camión de Tato, se montaron y se fueron a Los Montitos

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