Algún día

Cuéntame la verdad.

Shane seguía mirándome, embobado. Yo seguía cabreada, más que eso. Estaba enfurecida de tal manera que si me tocabas te quemarías.

-Ya te he dicho más de diez veces que no es nadie. Sólo una a la que me tiraba.

-Es que no me lo puedo creer,está en la Tierra y también aquí... Dios que asco, no quiero que esté aquí.

-No puedo echarla Leia. No puedo.

-Pues me voy yo, tú decides Shane.

Shane suspira, sabe que se lo digo enserio pero aún así parece que no se lo toma lo suficientemente enserio.

-No puedo, lo siento por ti y por tu odio inútil hacía ella. Pero no puedo. Yo sé que no es nada para mí, tú mantente firme en eso y punto. Se acaba el tema, déjalo ya o conseguirás que enfade. Y no quieres eso.

-Métetelo en la cabeza, no me das ordenes.Contigo es que creo que no voy a poder ser fiel.

El se queda mirándome. Está muy enfadado. Se nota que ese comentario le ha dolido... bueno, doler no lo creo, pero que lo ha enfadado sí.

-Y yo te voy a decir a ti otra cosa. Vas de romper corazones cuándo a ti, te lo han roto más de mil veces. Vas de valiente, cuándo incluso mi tienes miedo a mí.

-¿Sabes Shane? Eres el ser más despreciable que he visto en mi vida, será la profecía que dice que acabaré contigo pero cómo sigas así, ¿sabes que conseguirás? Que me vaya con Nick.

-A mí no me amenaces.

-No lo hago, te digo lo que vas a conseguir, si no echas a Katrina de aquí.

Salgo de la habitación y camino enfadada sin un rumbo fijo. Suspiro por no saber que hacer. Respiro una vez más. Y vuelvo a dejar salir todo el aire de mis pulmones.

Camino buscando la cocina, el hambre me está poniendo de mal humor. Cierro los ojos,intentando darme cuenta de lo que estoy haciendo.

-¿Estás bien?

Se acerca a mí un chico alto y fuerte.

-Sí.

-No lo parece, ¿necesitas algo?

El joven parece preocupado de verdad, yo lo miro sin entender.

-Me llamo Dylan, te preguntarás cómo tanta amabilidad en un lugar lleno de demonios. Pero es que yo soy un ángel que retiene aquí Shane.

-¿Porqué te retiene?

-Para mantener el equilíbrio, almenos de momento.

-¿El equilíbrio del bien y el mal?

-Claro, si matara o destronara a todos los ángeles, el equilíbrio se vería afectado de golpe y causaría daños irreparables en la tierra.

Asiento, intentando asimilar todo.

-Y sí, hay más cómo yo.

-¿Cómo sabías que iba a preguntarte eso?

-Puedo leer la mente de lo paranormal, cada angel tiene un don para hacer el bien, y ese es el mío.

-Tú no pareces un angel así vestido.

-Aquí dentro no podemos vestir de blanco-se ríe- es una norma absurda, pero no nos queda más remedio que acatarla.

-¿Os trata mal?

Niega con la cabeza rotundamente.

-Solo cuándo no acatamos sus órdenes, pero últimamente anda mucho por la tierra y nos deja a nuestro aire.