DESCONTROL Y ACEPTACIÓN

405 23 12
                                    

Hola como están, me es grato haber encontrado un tiempo para escribir, siento haber tardado en actualizar, agradezco much que siguen mi historia y a los comentarios realizados. Las letras cursivas son pensamientos de los protagonistas. Espero les guste este capi.

Descontrol y aceptación.

Luna, Draco y Theo se dirigieron en silencio y nerviosos a la sala de menesteres, cada uno hundido en sus pensamientos y sentimientos, se habían quedado unidos por sus manos durante un rato, hasta que Luna recapacitó y decidió que era necesario ir a un lugar donde no pudieran ser observados por nadie, les costaba mucho trabajo controlarse ahora que se encontraban juntos, por lo que ninguno objetó, aunque ninguno quería decirle la verdad a ella, era imposible seguir fingiendo que nada sucedía o que Luna no estaba implicada, ya que de algún modo lo estaba y todos lo sabían.

Cuando entraron a la sala de menesteres apareció ante ellos un espacio confortable con una luz tenue que brindaba la chimenea, con solamente una gran alfombra mullida de color verde Slytherin con muchos cojines grises, también los colores de las paredes eran como si se hubiesen adentrado a la sala común de las serpientes, Luna se quedó parada en medio del lugar observando con curiosidad y una pequeña sonrisa, no cabía duda que se encontraba inmersa dentro de los deseos de esos Slytherin.

Caminó lentamente sin mirarlos hacía el centro de la confortable alfombra y se sentó de frente a ellos, todos podían sentirse mutuamente, la vorágine de sensaciones que llegaban a ellos era tan intensa que por momentos todos querían salir corriendo de ese sitio, era como si sus cuerpos y sus mentes divagaran entre lo correcto y lo absolutamente deseado, Draco y Theo miraban a Luna desde la puerta, no podían mover ni un músculo, no sabían como actuar, aunque la idea de estar en ese lugar había sido hablar, ahora no podían hacerlo, el encontrarse a solas los tres como tantas veces lo habían deseado los estaba sobrepasando.

Sentían que en cualquier momento saltarían sobre Luna sin reparo y eso no era bueno, su deseo por ella era incontrolable, era como si sólo pudieran pensar en ella y en tenerla juntos y que ella los tenga juntos, en ese momento sentían que morirían sin no la poseían, juntos porque por primera vez se sentían uno, se sentían una sola persona que por fin tenia frente a si a su amor y aunque los sentimientos por ellos mismos seguían y cada vez más fuertes, al estar frente a ella se volvía su prioridad; aunque ella los miraba con tranquilidad, la realidad es que se encontraba igual de nerviosa que ellos y los deseaba con la misma intensidad que ellos le transmitían.

Luna no entendía como podía haber pasado todo eso, pero le quedaba claro que sus vidas corrían peligro y que el futuro de todos era incierto, por lo que tomó una decisión, no sabía si era la correcta pero era lo que más deseaba por lo que los miró y extendió sus manos hacía ellos, Draco y Theo como si de un imperius se tratara caminaron a paso lento hacía Luna que los miraba con amor y deseo, ya lo correcto y lo lógico dejó de ser importante, en ese momento sólo existían los tres.

Cuando llegaron hasta la alfombra, ambos se sentaron frente a Luna tomando cada uno la mano que les extendía y tomando sus propias manos, nuevamente sintieron la gran paz que habían sentido anteriormente al estar unidos por sus manos, estaban tan juntos que sus rodillas se rozaban, -¡Te amo!- susurraron al unísono Draco y Theo, Luna les sonrió soltando sus manos y acariciando la mejilla de cada uno, que al sentir su toque miraron sorprendidos como se acercaba más a ellos -Yo también- les dijo dejando un pequeño beso en los labios de cada uno.

Por unos segundos la sorpresa se hizo presente en ambos hombres, pero cuando miraron los ojos encendidos de Luna y el haber sentido nuevamente sus labios todo estaba decidido, ese beso que les había dado fue la invitación perfecta para tenerla por fin en sus brazos, el primero en actuar fue Draco que al hincarse tomó con un brazo a Luna por la cintura pegándola por completo a su cuerpo y sin soltar la mano de Theo la besó profundamente primero sintiendo sus labios y poco a poco profundizando ese beso que de alguna manera se sentía completo.

LA MAGIA DE LUNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora