capitulo 4

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- Hipo eres gracioso

Hipo formó una sonrisa

- tú también

- gracias

- Hipo

- oh hola Ro

- hola ¿quien es ella?

- ella es Astrid mi nueva amiga

Astrid se quedó callada no sabía que decir con eso. Por un momento se sintió importante para alguien. De un momento a otro Ro la miro sorprendida, es como si se hubiera visto a un espejo.

- ¿como te llamas?

- Astrid

Hipo las miro a ambas, noto que tenían los mismos ojos y tono cabello.

- es un gusto soy Rosella pero me puedes decir Ro

- mucho gusto

- bueno yo me tengo que ir

Ro se fue sin decir nada.

- Astrid, tú y Ro ¿son parientes?

- no, nunca la había visto en mi vida

- es que, son muy parecidas

- si lo noté pero no creo

Astrid estaba mintiendo pues ella sabe que es huérfana y que fue adoptada.
¿sera ella? ¿sera mi pariente? Esas preguntas invadian su cabeza.

Con Ro fue diferente

- ella se parece a mi - dijo en voz baja - no sus ojos son azules y los míos verdes, pero tenía la misma mirada, inocente como la mía. No

No sabía que pensar, por un lado estaba asustada. ¿quien es? ¿porque se parece a mi?
Por un momento sintió que su mundo se detenía, quedando en un espacio totalmente vacío donde solo estaba ella solo ella.
Tenía que saber más sobre Astrid.
Siguió caminando en silencio, no escuchaba ni veía a nadie, solo era ella. Pasaron las horas las cuales a ella se le hacían eternas.
Regreso a casa sin ningún ánimo

- hola hija

- hola papá

- ¿estas bien?

- si solo necesito recostar me

Era claro que no estaba bien estaba confundida. Aún no podía olvidar se de Astrid sentía que tenía que ver la y hacer le mil preguntas sobre ella.

Al igual que Astrid no paraba de pensar en Rosella, tenía que saber más

- oye ¿estas bien?

- si

- ¿segura? Has estado muy callada - dijo Jack caminando a su lado- ¿te hicieron algo en la escuela? - dijo un poco más serio

- ¿que? No, no es nada solo tengo sueño - dijo Astrid tratando de  cambiar el tema

- de acuerdo

Pero ella sabía que no era así, llegaron a su casa y fue directo a su cuarto, no quería ver a nadie solo quería despejar su mente de tantas ideas que se le venían a la cabeza. Una y otra y otra pregunta atacaban su mente y entre más preguntas venían a ella se daba malas conclusiones, no quería sacar sus propias conclusiones ella quería que se las dieran, que le dieran la respuesta a cada pregunta. ¿sera su hermana? ¿como serán sus padres? ¿se apellida igual que yo?

Tantas preguntas pero ni una respuesta.

- Astrid

- madre

- ¿te pasa algo?

- no es que, solo estoy cansada - dijo la rubia tratando de parecer normal y tranquila

- As puedes confiar en mí

- no madre no es nada solo estoy cansada

- está bien descansa

Se fue dejando la sola metida en su mundo.

Al día siguiente regreso a la escuela con la esperanza de encontrar se con Rosella tenía que ver la.
En el camino contrario está Alis viendo un libro ambas estaban en dirección contraria, estaban tan consentradas en lo suyo que lo primero que oyeron fue un golpe. Alis dió un paso atrás y Astrid dos.

- lo siento no me fijé - dijeron al mismo tiempo

Astrid la miro un poco asustada
Alis estaba sin palabras.
Ambas chicas se vieron de arriba a bajo, sin palabras sentían que el tiempo se congelo en ese instante

- ¿como te llamas? - dijo Alis rompiendo el silencio

- Astrid y ¿tu?

- Alis

- ¿como te apellidas?

- Alis de Arendell y ¿tu?

- Hofferson, Astrid Hofferson

Al oír eso, ambas soltaron un suspiro pues no se apellidan igual, pero aun sentían algo, algo que las unia

- ¿cuantos años tienes?

- 19

Alis está callada

- yo igual - dijo al fin

- y ¿como son tus padres?

- solo somos mamá y yo, porque no tengo papá y ¿los tuyos?

- soy huérfana y me adoptaron

- ya veo

Ambas sabían que querían saber de la otra, sentían que debían saber lo y no se iban a conformar con saber solo eso, querían más información. Más información para responder las preguntas que las invadian por dentro

las trillisasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora