capitulo 8

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Una noche muy tranquila, una en la que podías acostar te en la cama sin preocupar te dé algo.
Astrid solo miraba el techo acostada en su cama ¿que pensaba? Bueno aún no estaba muy cómoda en su nueva y primera escuela, pero... Eso no era en lo que pensaba... Será ¿piensa en el?
¿piensa en ese chico?... Su sonrisa no lo podía ocultar.
En verdad quería estar con el, ver sus ojos verdes esmeralda, su pelo... Su pelo castaño que brilla cada vez que los rayos del sol chocan con el.

Y en ese momento, en ese momento que la defendió y ayudo... Sabía que él era diferente a todos esos tipos... Estaba enamorada de él

- hola Astrid - dijo su hermana entrando a la habitación y sacando la de sus pensamientos

- hola

- ¿que tienes?

- no nada solo estoy cansada - dijo Astrid tratando de ocultar su sonrisa

- a mi no me engañas - dijo Tiana

- hay está bien - dijo Astrid soltando un suspiro - conocí a un chico

- ¡un chico!

- shhh

- perdón fue la emoción pero cuéntame ¿como se llama?

- se llama Hipo

- y ¿como es?

- es lindo, educado, amable y me defendió el primer día de escuela

- awww que lindo - dijo Tiana - yo quiero uno así

- oye aún no es mi novio

- pero puede que un día si

- no lo creo

- y ¿porque?

- porque no creo que un chico como el se fije en una chica como yo

- hay Astrid exageras

- no exagero es la realidad

- ya verás que, bueno tal vez no seas su novia pero puedes ser su amiga por lo mientras

- puede que si

- bueno me voy porque tengo que hacer la cena... - dijo Tiana y se dirigió a la puerta - oye hermana

- ¿que pasa?

- suerte - dijo Tiana y le dedico una sonrisa

- gracias - dijo Astrid muy amable

De nuevo se quedó sola.

- ¿novia? Yo su novia

Esa idea no salia de su cabeza.

- novia de Hipo

Solo de pensar lo... La hacía feliz.

Al día siguiente en la escuela Astrid iba a lado de Jack

- entonces conociste a Hipo

- si ¿es malo?

- es buena honda pero si te ha e algo no dudes en decir me lo

- si Jack lo prometo

- bien vamos

Un día común para todos, el día cálido, el sol brillando sobre la escuela un día verdaderamente tranquilo

- hola Hipo - dijo Astrid feliz

- hola Astrid

- ¿como estás?

- bien y ¿tu?

- también gracias por preguntar

- bien nos vemos

- espera

- ¿que pasa?

- podrías acompañar me a mi salón es que no valla a ser que me molesten de nuevo - dijo Astrid con una sonrisa y un poco nerviosa

- ja ja ja - soltó una risa Hipo y le dedico una sonrisa - bueno vamos

Astrid e Hipo se fueron caminando juntos asta llegar al salón de Astrid donde se despidieron.
Si aunque sus compañeros la molestaban su sonrisa no se borraba con nada al parecer aquel chico de ojos verdes esmeralda la hacía feliz.
No le importaba nada ni lo que le decían solo pensaba en la hora de salida para ver lo y estar con él un rato

las trillisasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora