Capítulo Seis.

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Mis mejillas arden y no siento nada más que su mirada puesta en mi. Doy una buena bocanada de aire fresco y lo miro nerviosamente. Él me sonríe y me enseña su perfecta dentadura brillante, en ese momento casi me desmayo.

—Uhmmm, H-Hola, Andrew.—digo en un intento de parecer autoritario, el me mira atento.

—Luces...—pausa—muy...—pausa mientras muerde discretamente su labio inferior y recorre mi cuerpo con la mirada—muy bien...—dice para después despegar la mirada sobre mi de una manera increíblemente rápida.

Joder, en ese instante juro que se veía tan, tan....sexy.

Basta, Harry porque rayos piensas eso.

—G-Gracias, Andrew.—pauso y el asiente tímidamente.—Tú también luces muy radiante.—digo mirando los botones con ganas de que me trague la tierra en ese momento.

El me mira y sonríe con una mirada tan, elegante.

Cuando el elevador para, agradesco por que ese momento pasó tan rápido y me fuí rápidamente hacía la cafetería. No podía meterme luego luego a mi cubículo con él de nuevo allí y su intensa mirada.

Dejé mi mochila en una de las sillas de la cafetería y encendí la máquina de té para prepararme uno y relajarme por el resto del día. Cuando terminé, lo sellé bien en su recipiente y tome mis cosas para por fin ir a mi cubículo y trabajar con...Andrew.

Llego y lo observo tranquilo y concentrado en su trabajo. 

Una estúpida sonrisa se forma en mi cara.

—Lo siento, me detuve a prepararme un té.—dije dejando mis cosas a un lado de mi silla.

Me siento y él me voltea a ver golpeando su bolígrafo con sus labios. Esa imagen no se borrará de mi mente y no tengo idea de porque. 

—Me he sentido halagado de que quieras pasar otro rato conmigo. Fuera del trabajo.—dice un poco tímido pero a la vez autoritario.

¡Madre Santa!

—N-No hay problema, no es nada.—digo agradecido y halagado, también.

—Lo digo enserio.—me dice sonriendo.

—Bien.—digo emocionado, seguramente se nota.

—He estado leyendo tus artículos, y son muy buenos.—me dice mordiendo el labio nerviosamente.

Me sonrojo y me tapo media cara con mi mano.

—Pues, gracias. Aunque no lo creo. Yo apenas leo algunos tuyos y son fantásticos, escribes muy bien.—digo seguro volviendo a mi laptop.

El ríe y continua con su trabajo.

Pasa el rato, pues hoy tenemos mucho trabajo, con varias cosas que entregar, probablemente salgamos un poco más tarde de lo usual. Mi té termino acabandose a los cinco minutos.

Solo pasaba mi mirada pocas veces por su escritorio, el se veía muy concentrado, y hacia todo de una mandera tan delicada y distinta, en cambio yo cono un loco, e idiota.

—Sabes, Harry. ¿Me acompañarías a la cafeteria por una bebida? Es que no tengo idea de donde está.—me dice de una manera dulce pero cautivadora.

Yo no se que hacer y tan solo me paro y lo sigo hasta donde está. Todos nuestros compañeros estaban concentrados en sus cosas, solo se oian las teclas de los ordenadores.

Ibamos caminando hacia donde yo sabía que se encontraban y lo dejo pasar primero. El sonríe y va directo a la maquina de cafés. Yo me quedo estático en el marco de la puerta tan solo observando la belleza y delicadeza que despliega su ser en cualquier aspecto.

El me mira de pies a cabeza con una mirada tentadora pero dulce, rapidamente capto lo que hace y bajo la mirada tratando de evadirlo.

—¿Quieres beber algo, Harry? Necesitas relajarte.—me dice acercandose a mi de una manera inusual y única.

Me separo con una velocidad increible y sonrio un tanto apenado.

—Estoy bien.—le digo más serio.

Andrew alza los hombros en gesto de igualidad y toma su café para despues dirgirse al cubículo con una sonrisa y los ojos perfectamente achicados. No tengo la menor idea de porque.

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Chicxs he vuelto, perdonen por no escribir es que no tenia celular ni compu, pero ya volví espero que les guste tanto como a mi el episodio, keep in touch. (:



»Criminal Lips« [h.s au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora