Capítulo Siete.

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Narrador Omnisciente.

—¿Qué?—preguntó Andrew con ambas cejas arriba al tímido chico que tenía frente a él. Mejor conocido como Harry, su tutor. Él se guardo las ganas de morderse el labio. Pero después un sonrisa nerviosa se formó en su rostro.

—N-Nada.—dijo Harry, mirándolo nerviosamente. Se quedo quieto un momento, mientras jugaba con uno de los rizos que apenas caía por su rostro.

—De acuerdo.—dijo Andrew sin emoción, antes de voltear a ver su escritorio que tenía a un costado de él. Harry bufó, sintiendose estúpido.

Andrew lo observo sentarse delicadamente. Estaba perdido en sus pensamientos preguntandose a donde quería llegar con esto que les ocurre a él y a su compañero. No lo entendia.

—Entonces, ¿para cuando es ese...reporte del que nos habla tanto el Sr. Geoff?—dijo, mirandolo antes de volver a la pantalla del computador.

Harry le dio una mirada vaga y continuó escribiendo.

—Creo que es dentro de una semana para la revista Custome.—le dijo casi tartamudeando, Andrew suele causar ese efecto en las personas.

Después de un par de largas horas, el movil del ruloso comienza a vibrar y/o sonar al tiempo al que este lo toma y contesta.

Andrew lo mira tratando de verse indiferente.

—¡Harryyyyyyy hola!—una voz femenina resuena en el movil del ojiverde, su compañero roda los ojos y continua observando.

—Hey, si soy yo. ¿Que pasa? ¿Como estas bebé?—el castaño responde cariñoso pero a la vez apurado.

Andrew lo mira extrañado y un rubor sube a sus mejillas, no un rubor lindo...Probablemente Andrew piense que el chico habla con su pareja, aunque según él, no tenía.

—Necesito tú ayuda.—la voz femenina sigue.

—Claro, dime ¿que sucede?—Harry dice un tanto divertido.

Andrew lo observa concentrado.

—Rosemary necesita que le des un aventón hacia acá. Sus padres estan en su apartamento y necesita un lugar donde quedarse, así que ella puede dormir conmigo en tu departamento solo por unos días.—ella dice un poco nerviosa por la respuesta de Harry.

—¿Qué? ¿Bromeas cierto? ¡Y donde voy a dormir yo, apenas y cabemos tú y yo! Ana, te quiero bastante y lo sabes pero no puedo, es que es díficil. No me molesta Rose pero, es mi casa y ni modo que yo me quede como perro.—el rizado dice un poco exaltado, Andrew lo nota y se preocupa al escuchar la conversación.

—Solo seran dos días, por favor Harry. Es mi novia y no quiero perderla.—Anabela dice ya enojada pero con tono triste.

Al chico se le parte el corazón y accede rendido.

Al colgar, Harry bufa y recarga sus manos en el escritorio pensativo.

Andrew acerca su silla y se sienta a su lado.

—Puta madre.—el chico dice molesto.

—Perdón que me meta Harry, ¿que ocurre? Te noto molesto.—Andrew dice mirandolo fijamente pero transmitiendo una nergía dominante.

Sus ojos de mezcla azul, gris y verde se oscurecen y Harry lo mira ruborizado.

—No me molestaría que te quedaras conmigo un par de noches, para lo que necesites estoy, Harry.—dice acariciando levemente sus rizos pero rápidamente.

El ojiverde se sobresalta y un calor recorre todo su cuerpo, un calor satisfactorio.

Con apenas un hilo de voz, responde.

—No quiero molestar, Andrew.—dice apenas mirandolo evitando sus intensos ojos.

Andrew busca su mirada pero falla, muerde su labio de una manera seductora, seguramente ni el lo nota pero, lo hace.

—No sería nunca una molestía... un placer.—el mismo se sobresalta de sus palabras y se queda callado.

El pobre chico que estaba sentado a su lado, casi se hacía pis, tanta dominancia lo hacía enloquecer y ponerse locamente nervioso y desesperado, el calor cada vez llegaba más profundo a su ser.

—N-No lo sé.—responde finalmente tratando de no dejar escapar un suspiro.

—Anda vamos, Harry. Que no te haré nada.—le dice sonriendo de una manera incondicional tomando sus pertenencias.

—Y-Yo no sé que decir...—Harry dice mordiendo el bolígrafo que tenía en mano, nervioso.

Andrew lo levanta del mentón y muerde sus labios.

Harry muere en ese puto instante. Casi muere. Sus ojos eran hermosos. Joder.

Harry no dijo nada, se quedo estático mirando los ojos de Andrew y el calor cada vez se hacía notar más.

Lentamente Harry retiro su rostro de la mano del chico y accedió aliendo del cubículo.

Andrew apretó los dientes nerviosamente. Refunfuñando por dentro por haber sido tan obvio.

Lentamente seguió a Harry y se dirigieron al estacionamiento. Necesitaba estar con él, sentir su calor, sentir su personalidad, conocerlo más.



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En multimedia les dejo a Rosemary, la novia de Anabela.

Espero que les guste mucho el capítulo y voten! Las amo.

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⏰ Última actualización: Jul 21, 2017 ⏰

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»Criminal Lips« [h.s au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora