CAPITULO 18

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Maratón 5/?

Christian

Me lleva la que me trajo, no puedo creer que ella me dejara de esta manera, así como si nada, me dejo con una erección y se fue sonriente, no pues que bien, dejemos a Grey así calentón, pero me lo merezco por todo lo que le dije, sé que no es verdad porque casarme con ella es la mejor decisión que he tomado en toda mi vida, pero estoy aterrado de que algo le pueda pasar, además de que está actuando muy raro, pensé que podría estar embarazada cuando me lo dijo ayer, pero me desilusiono, primero que no lo estuviera, sino que fuera una falsa alarma y dos porque ella se niega a ser madre, es como si esa palabra fueran repelente para ella, le aterra y le huye. Resignado me visto y me dispongo a irme para la empresa, ya comeré algo allá, le envió un correo a Taylor para la seguridad y a Welch para que vigile todo y rastree todo, no voy a correr ningún riesgo. Me dirijo de nuevo a la habitación y veo a Anastasia toda arreglada con un traje formal

- ¿A dónde vas? – pregunto de manera casual
- A buscar trabajo – dice tranquilamente
- Bien – le digo y me acerco al mueble al lado de la cama para coger mi portafolio – que te vaya muy bien – le digo y salgo sin decir mas

Si ella quiere trabajar, pues que trabaje, no quiero más peleas, me agotan y lo último que quiero es volver a pelear con ella, ya su seguridad está confirmada, así que muy poco pero estaré más seguro. Llamo al elevador mientras reviso mis citas del día

- Espero que te vaya muy bien hoy – dice Ana a mis espaldas, me giro para mirarla
- Gracias – le digo y ella asiente, es extraño esta situación
- Bueno yo también bajo – dice cogiendo su bolso y entrando al elevador junto a mi

Bajamos en total silencio y ciento esa electricidad que emerge el ambiente cuando estamos cerca, esa tensión que desprenden nuestros cuerpos al estar tan juntos

- A la mierda todo – dice Ana y la veo confundido, me empuja hacia una de las paredes del ascensor, se coloca de puntitas y me besa de manera salvaje y carnal, maldición como amo cuando se coloca así, la tomo de la cintura y la aprieto a mi cuerpo mientras le devuelvo el beso con la misma ferocidad, se separa de mi jadeando, sin despegarse de mi – odio pelear contigo – dice y le sonrió
- Enserio me arrepiento mucho lo que dije, solo me preocupa tu bienestar – le digo y ella asiente
- Lo sé, pero enserio tus palabras me dolieron mucho – dice con tristeza mientras se separa de mi
- Y no tengo perdón, pero no eran ciertas, yo te amo y daría si fuera necesario mi vida por ti – le digo con sinceridad mientras la atraigo a mi cuerpo
- Lo sé – me dice mientras acaricia mi cara, me da un casto beso -- mejor hablemos de otra cosa – dice mientras oprime el botón de seguridad y el elevador vuelve a bajar, ¿pero cuando presiono ese botón?
- Hoy iras a buscar trabajo ¿Dónde? – le pregunto mientras la abrazo con fuerza aspirando su dulce aroma
- Pues mandare currículos, si no volveré a mi antiguo trabajo – dice y gruño
- Odio tu jefe – le digo y ella ríe – ese imbécil, fue con el que engañaba Leila – le cuento y se ve sorprendido
- No lo sabía – dice sorprendida – él nunca me agrado del todo – me comenta y presto mayor atención – tiene una mirada que no se – dice y suspira, ese imbécil ha intentado algo en ella
- Ana – la llamo y me mira – ¿él ha intentado algo contigo? – le pregunto con mucha calma
- Algunas veces, pero siempre lo evite – dice tranquilamente y siento como mi ojo tiene un tic
- Ya veo – le digo aparentando que todo está bien, pero fallo -- ¡cómo es que ese animal, ha intentado algo y tu hasta ahora me lo cuentas! – grito explotando haciendo que Ana se aleje de mí y me mire con ojos asesinos
- Cálmate Grey porque te puedo arrancar las pelotas si me da la gana – dice amenazándome mientras me señala con un dedo, respiro y me calmo
- Está bien, lo siento – digo alzando mis brazos en señal de rendición
- Bien – dice Ana suspirando frustrada – de igual forma, amaba trabajar en el SIP y no porque dos imbéciles me joden la vida dejare mi sueño – dice y creo que se equivoco
- Nena dijiste dos imbéciles – le digo y ella asiente – ¿Cuáles dos imbéciles? – le pregunta y ella bufa
- Mi jefe y tu – me dice enojada y se me escapa una risita
- Sé que soy un idiota – le digo y ella sonríe
- Pero eres mi idiota – me dice mientas me da un casto beso

Llegamos al aparcamiento y esta Taylor y el nuevo guardaespaldas de Ana Sawyer, ellos no saludan y cada uno está en un Audi esperando para que nos montemos

- Sé que no te gusta, pero él será tu nuevo guardaespaldas Sawyer – le digo y ella asiente
- Si no tengo opción – dice y me da un beso – te llamare si ocurre algo o te extraño – dice guiñándome un ojo entrando al Audi
Me subo con una sonrisa al auto con Taylor me encamino hacia mi empresa

***
1 mes después

Ya ha pasado un mes desde la última pelea que he tenido con Ana y estamos más que bien, nos reímos y bromeamos entre nosotros, siempre está sonriendo y mostrándome lo bello de la vida, José no se nos despega y está más que feliz en que sus dos hermanos estén felices, fue un poco extraño al principio explicárselo a mis padres, pero lo entendieron y se sienten muy felices de estar cuidando de José, lo consideran como un hijo más y aunque los fines de semana se la pase aquí, mis padres lo llaman para verificar que todo está bien, pero en esta última semana he sentido rara a Ana y eso no me gusta para nada, esta distante y a veces me despierto y ella está tocando el piano con tristeza, dice que no pasa nada, pero no le creo, está trabajando con el cerdo de Jack, pero tengo cámaras en el lugar y él se ha mantenido a raya con ella, lo cual me alegra y los otros dos locos no han vuelto a aparecer y mucho menos las mujeres, lo cual me tranquiliza pero no del todo, no quiero bajar la guardia. Tocan la puerta de mi oficina y digo que sigan

- Hermano – dice con una radiante sonrisa Elliot entrando a mi oficina
- Elliot – lo saludo con una sonrisa y un abrazo -- ¿Qué te trae por aquí? – le pregunto y sonríe más abiertamente
- Quiero que me prestes tu barco – me dice y eso me sorprende
- ¿Y eso como para qué? – pregunto intrigado y parece nervioso
- Quiero pedirle matrimonio a Kate y quiero que sea especial, Mia sugirió el lugar el lugar y que ella con mama arreglarían todo – me dice y sonrió
- Te felicito – le digo feliz por el – claro que es todo tuyo y mama con Mia son muy buenas en eso – le digo sonriendo y él se ve más que feliz
- Gracias hermano – dice mientras se levanta – no siendo más me retiro – dice y asiento acompañándolo a la salida de mi oficina

Nos despedimos y estoy más que feliz por m i hermano, encontró a su chica y me alegro que tome este paso y pensando en ese quiero hacer algo especial por Ana, estamos muy distantes y quizás solo necesitamos recordar porque nos amamos. Pido un ramo de rosas rojas con blanco mientras canelo mis citas y llamo a Gail para que prepare una rica cena y todo para cenar solos ella y yo de forma romántica, le mando un texto que la recogeré y dice que está bien, ya ni siquiera me habla con amor o cariño, tal vez se aburrió de mi o solo soy paranoico, lo que sea, hoy lo averiguare. Me subo en el Audi con Taylor y él también ha notado rara a Ana. Llegamos al SIP y espero que Ana salga, a los pocos minutos sale con cara de cansancio pero me sonríe

- Hola preciosa – la saludo dándole un casto beso
- Hola – me dice mientras corresponde mi beso -- ¿Cómo te fue hoy? – me pregunta mientras se sube al auto
- Bien y ¿el tuyo? – le pregunto mientras entra al auto
- Cansado, la editorial está en la sima – dice feliz y le sonrió
- Me alegro, que estés feliz – le digo y ella me regala una tímida que hace mucho no veía
- Gracias – dice acercándose a mí y besándome con ternura – sé que he estado rara, pero me siento no se – trata de explicarme pero la callo con un beso
- Ya hablaremos de ello mañana – le digo y se ve confundida – hoy es solo para los dos – le digo y ella sonríe
- Como tú digas – me dice mientras se recuesta a mi lado abrazando mi cintura y me siento más que feliz por volverla a tener así, sé que tiene algo que contarme pero simplemente hoy quiero que estemos así – Christian – me llama
- Dime – digo con tranquilidad
- No puedo esperar más, no sé qué hacer – dice preocupada y me preocupo
- Ana me estas asustando – digo y ella comienza a llorar
- Yo estoy asustada Christian – dice y me siento confundido
- Habla Ana – le pido y ella suspira
- Christian…

Un Destruido Corazón (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora