don't you dare ; jjk

𝒸𝒽𝒶𝓅𝓉𝑒𝓇 𝓉𝒽𝓇𝑒𝑒

jjk

Vale, tal vez había sido mala idea empezar con un "Hola, preciosa. Deberías darme tu número y así salir algún día." ¿En qué mundo alguien empieza a coquetear así? Es ridículo. Pero vamos, yo soy ridículo e inexperto, ¿cómo esperaban que saliera con algo cool y romanticón? Aún así me negué a parecer un idiota y saqué mi mejor sonrisa.

La chica me miraba de arriba abajo embobada lo cual causó que mi confianza subiera aún más, pero de repente su rostro cambió de nuevo a la que tenía hace unos segundos.

– ¿Y qué te hace pensar que quiero salir contigo alguna vez, conejo? – Auch. ¿Debería sentirme ofendido por esa comparación? Hmm nah. Me han dicho cosas peores.

Sonreí aún más. – Bueno, un guapo chico como yo invitándote a salir no se ve todos los días, preciosa.

Mentalmente me golpeé. Es tan linda que seguro le caen los chicos a montones. Aunque siendo sincero no la vería como algo más, si estoy aquí tratando de coquetear con ella es por la simple apuesta, si no fuera por eso ni siquiera me hubiera acercado a hablarle.

Una risa sarcástica salió de ella y alzó su cabeza, queriendo ser superior. – A ver, precioso. Ya es momento de que alguien te baje de tu linda nube, así que si esperas que caiga a tus pies mejor vete a freír espárragos porque no lo lograrás.

¿No lo lograré? ¿Cómo de que no, señorita? Usted me está subestimando.

Su mirada se dirigió detrás de mí. Inconscientemente le seguí la mirada, encontrándome con mis Hyung's viendo de cerca la ridícula situación en la que me habían metido.

La sonrisa de la chica cayó, me miró una última vez y se dio media vuelta, yéndose por donde vino.

– Drama queen, le dicen. – Escuché un susurro a mi lado. Rápidamente giré la cabeza encontrándome con la supongo amiga de señorita criticamisdientes, la miraba irse con una sonrisa divertida.

– ¿Siempre es así? – Pregunté. La chica me miró y asintió.

– Y no quieres ver a la reina Seulgi cuando está en sus días, ni yo la soportó. – Bromeó. Así que se llama Seulgi. Iba a preguntarle algo más cuando de repente los gritos de mis Hyung's me interrumpieron.

– Lástima, Jungkookie. No tendrás tus queridas bo— Uy, hola. – Taehyung se detuvo al ver a la amiga. En seguida noté como las mejillas de la chica se pusieron rojas mientras miraba a mi amigo.

– H-hola...

– ¿Qué hay? Soy Taehyung y este tonto de acá es Jungkook. – Tae le lanzó la típica sonrisa coqueta a la chica. Puse los ojos en blanco divertido. – ¿Y tú?

– Sunhee. Dong Sunhee. Y mi amiga es Kim Seulgi, que, por cierto, estoy segura de que me abandonará si no voy con ella en este instante. – Su rostro se veía asustado. – Me tengo que ir, un gusto.

De repente un recuerdo vino a mi mente y grité antes de que se fuera. – ¡Espera! – La chica se giró a mí. – Tú vas en mi clase de Aritmética, ¿no es cierto?

Frunció el ceño. – ¿Estás con el profesor Jae? – Asentí rápido con la cabeza. – Entonces sí, creo que nos veremos en el instituto entonces. ¡Adiós!

Taehyung y yo la miramos apretar el botón del ascensor repetidas veces, para luego meterse rápido al abrirse las puertas.

– De verdad tenía prisa, casi destruye el pobre botón. – Sin girarme pude sentir como mis hyung's se habían acercado a la escena. Taehyung carcajeó a lo recientemente dicho por Hoseok-hyung.