Can yøu save my HeavyDirtySøul? - Jøshler [Españøl]

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Llevo apenas una semana encerrado en está pocilga. Cuando me trajeron aquí se me dio el derecho de una llamada y decidí llamar a mi padre, él al enterarse de la situación y todo lo que había pasado sólo me dijo que yo ya no existo en la familia y colgó. No tenía amigos y Jenna, el supuesto amor de mi vida, me dejó desde que empezó mi enfermedad y me exigió no volverle a llamar a menos que quiera buscar una demanda por quién sabe qué y una orden de restricción. Todos me habían dado la espalda.  El juez aún no ha dictado cuánto tiempo estaré en éste infierno, pero lo más seguro es que se me de cadena perpetua y sin libertad condicional, según dicen los guardias "por mi inestabilidad mental". La peste de éste lugar es insoportable y las paredes están humedecidas y casi enteramente teñidas de moho. El espacio es demasiado reducido, literalmente, apenas caben la cama, una silla de madera y el retrete, son condiciones inhumanas. Desde que llegué, fui atado en la cama con cintos de cuero reforzados y sólo se me permite levantarme 10 minutos para comer la porquería que sirven, dos veces al día. 

Uno de los hombres de traje que me dio las "buenas nuevas" en el hospital, entró a mi celda y se sentó a mi lado en la pequeña y deteriorada silla que se encontraba a la par de la cama donde era obligado a estar postrado día y noche.

- Estoy aquí para informarle que el juez aún considera la condena ya que la familia de la víctima aún no decide sí presentar cargos..

- Dígame algo que no sé - Interrumpí.

- Aún no termino, caballero - Dijo con algo de molestia y termina aclarándose la garganta para llamar mi atención de nuevo - lo que está fijado es que tendrá sesiones colectivas junto a los demás presos con el psicólogo. 

- Excelente, lo me que faltaba, otro maldito loquero más.   

- Sr. Joseph, no es opcional. Sí quiere poder algún día salir de aquí y poder seguir teniendo la ayuda psicológica que tanto necesita para aprontar su recuperación, tiene que.

- ¿No se pone a pensar que nada de ésto estuviera pasando sí el puto chico de mierda que se quiso hacer "el héroe" en el consultorio me hubiera dejado volarme la cabeza? En lugar de estar en este basurero, yo estaría pudriéndome en el infierno y usted no estaría aquí perdiendo el tiempo, teniendo está conversación sin sentido. Todos felices.

- ¿No se pone a pensar que nada de ésto estuviera pasando sí usted no hubiera perdido la cabeza y armara ese gran escándalo arriesgando la integridad del guardia y otras muchas vidas que se encontraban ahí por tomar esa estúpida arma y terminara asesinando al inocente chico que quiso hacer bien por usted y salvarle la vida?

- ¡¡ENTIENDA DE UNA JODIDA VEZ QUE YO NO LO MATÉ!!

- Entonces dígame, ¿Quién lo hizo?

- Yo no.. - Mi boca enmudeció - n-no lo sé..

-  Eso supuse.. Bien - Dijo mientras se levantaba y limpiaba el polvo que caía del techo sobre su traje - concluyendo con está amena charla, sr. Joseph, después de unas cuantas sesiones junto a los demás criminales, el psicólogo decidirá sí querrá tratar su "pequeño caso" personalmente, así que le sugiero que se comporte y sea un buen muchacho. Ah, y no se dirija agresivamente hacía él, es un tipo algo sensible. Así, tal vez y con mucha suerte, pueda ser ayudado y quiera Dios que sí la decisión del juez y la familia del difunto presentan resultados negativos para usted, él sea quién le ayude a salir del hoyo en el que usted mismo se metió.

- ¿Y qué pasa sí me niego? -Me apresuré a decir.

- Hmph.. - Dejo salir el hombre con cara pensativa y luego se formó una enorme sonrisa en su molesta cara - Bien, tenga la certeza que no le espera nada placentero. La sesión es mañana a las 8:30 am - se dio la vuelta y caminó a la entrada de la celda - prepárese mentalmente para convivir con gente de su tipo y hasta peor. Pase una linda tarde, sr Joseph. 

- Métete tu linda tarde por los cojones, imbécil. 

- Oh, sí - río el tipo volteando hacía mi y mirándome con la misma sonrisa burlona en su estúpido rostro, no lo soportaba- ¿En dónde quedaron mis modales? Me llamo Brendon Urie, recuerda mi nombre, me verás seguido, ya decidí que estaré supervisando tu caso, que suerte tiene de haberme agradado. Y como ya somos grandes amigos, sólo te llamaré Tyler a partir de ahora.  

Antes de poder contestarle, el idiota de Brendon se había marchado. 

- Hijo de pu.. -murmuré para mí mismo.

¿Acaso las cosas para mí iban a ir de mal a peor? Creí que por lo menos en éste lugar iba a poder escapar de todo y todos y al fin poder morirnos solos con el pecado y la sangre a nuestras cuestas. Todo es su culpa.. Sí tan sólo no hubieras aparecido en mi vida las cosas hubieran marchado bien y yo podría haber sido feliz con mi hermosa prometida, mi amada familia, mi exitosa banda y amigos. Te maldigo.. Te aborrezco.. 

Entre el baño de lágrimas que caían en mi rostro y no podía limpiar por las ataduras. Sollozos que no podían ser callados por más que lo intentara, cerré los ojos para finalmente pronunciar -Me aborrezco..