aventura final

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Fui a ver la casa por última vez, por que decidí irme del lugar que por tantos años me acogió, ya no quería recordar todas las cosas que me sucedieron, quería olvidar, y la mejor solución que encontré fue alejarme de él.

Ni bien amaneció, cogí el dinero que tenía guardado y un poco de las cosas que necesitaría para mi viaje junto con mi fiel amigo Laiser, no teníamos un destino específico al cual ir pero teníamos que hacerlo, llego la hora de emprender el camino hacia lo desconocido, que por cierto sentía una angustia en el pecho que no cesaba.

Fui a las montañas donde mis padres estaban enterrados para despedirme, llegue y me arrodille, tome valor para decirles –hola papá, hola mamá, he venido para despedirme de ustedes, por que tome la decisión de alejarme de este lugar, sé que desde el cielo me estarán cuidando y no me abandonaran, no se preocupen, estoy bien acompañado con mi mejor amigo Laiser. Me quede sentado unos cuantos minutos observando todo lo que me rodeaba, ya por bajar de la montaña, me despedí de ellos dejándoles unas flores y un adiós, Laiser aulló de una manera muy triste, no era para menos, pues era fiel amigo de mi padre.

Bajamos de la montaña y estábamos listos para iniciar esta nueva aventura, empezamos la caminata hacia rumbo descocido, pasamos horas caminando por el sendero de los pastizales, era un día bastante caluroso, pues estábamos buscando un lugar donde descansar y sombrearnos un poco para poder comer algo y así poder recuperar fuerzas y continuar con la caminata, llegamos a ver un árbol grande a poca distancia de nosotros, caminamos más rápido para llegar al lugar.

Descansamos un buen rato, Laiser estaba hambriento tanto que no paraba de mirar el bolso, ponía una mirada bastante conmovedora que no podías decirle que no, le di un buen trozo de pan con carne, para que estuviera más tranquilo, teníamos que seguir caminando para encontrar un buen lugar para pasar la noche, en el camino encontré una rama, lo lance y Laiser sorprendentemente lo cogió en el aire, fue algo asombroso, pues nunca lo había visto jugar de esa manera, Laiser estaba ansioso porque lanzara de nuevo la rama, así nos pasamos jugando todo el camino.

La noche estaba cerca, apresuramos el paso para encontrar un buen lugar, después de un par de horas de caminata, encontramos una cueva en las rocas, estaba vacía con algunas telarañas pero era perfecta para pasar la noche, la arregle para que estuviésemos más cómodos, pero la noche sería muy fría, pues el cielo estaba despejado y ya comenzaba a descender la temperatura, tenía que hacer algo para poder sobrevivir a esto, me puse a recolectar leña para así poder hacer una fogata y mantenernos con calor durante toda la noche.

La noche había llegado, pero estábamos preparados, prendí la fogata y era sorprendente, era la única luz a nuestro alrededor, Laiser estaba a mi lado y muy atento a cualquier sonido que se suscitara, de un momento a otro se escuchó el sonido de un búho que parecía que alguien estuviera cazando algo, Laiser no dudo en levantarse y ladrar incesantemente, no era para menos, pues el sonido era espantoso que me puso los pelos de punta, Laiser fiel a su instinto de protección seguía atento a cualquier cosa.

El silencio ceso después de varios minutos, estaba sentado al lado de la fogata, pero de pronto vi en el fuego armarse como figuras, veía mi infancia, los momentos alegres, los tristes y un montón de cosas, quede anonadado, perplejo, estático, no podía creerlo, me pellizque y me sobe los ojos para ver si estaba soñando, pero todo era real.

Llego la hora de descansar por que mañana seria otro día de caminata. Durante la noche, sentía caminar por mi rostro insectos, era claro sentir las diminutas patitas, pues no desperté por que el sueño era más fuerte que el temor a los insectos. La noche era larga, era mejor para nosotros, así podíamos descansar más y tener las fuerzas suficientes para seguir buscando nuestro destino.

Llego el amanecer con los canticos de las aves, una suave brisa y un sol imponente nos dio una cálida bienvenida, era hermoso ver la mañana, llego la hora de seguir la caminata, caminamos durante horas y horas, pues no sabíamos dónde estábamos, solo veíamos pura vegetación y todo era verde, estaba lleno de árboles donde había fruta y todo tipo de animales, Laiser estaba inquieto, perseguía a los conejos, ladraba a los pájaros y a otros animales, de pronto escuchamos un estruendoso ruido, era difícil describirlo pero fuimos lo más rápido posible para averiguar de qué se trataba. Cuando llegamos al sitio quede sorprendido, nunca en mi vida había visto algo así, era sorprendente, majestuoso, imponente y sobre todo era hermoso. Por primera vez había visto una catarata enorme, media más de 25 metros de altura, fue de casualidad que vi mi rostro reflejado en el agua, veía un gran cambio, pues estaba más joven y casi ya no me reconocía, quede perplejo.

Me senté a lado de mi fiel amigo Laiser, pensé como sería mi final, como acabaría todo, decidí que este hermoso lugar seria mi nuevo hogar, donde pasaría mis últimos días de mi vida, pero antes de que llegara mi final recorrimos todo el lugar, disfrutamos de la naturaleza y pase los mejores momentos en ese lugar, después de varios años llegaría lo inevitable, mi cuerpo se encogería y Laiser estaría más viejo pero aun así seguía a mi lado nunca me abandono, yo ya no recordaría como deje este mundo, ni cuál era el fin de Laiser, pero me quede a lado de Laiser y me reuniría por fin con papá, mamá, Jaley y la abuela ahí en el cielo.

MUY PRONTO EL LIBRO EN FISICO, CON UN DISEÑO ESPECTACULAR.

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⏰ Última actualización: Mar 01, 2017 ⏰

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