Los días pasaban, convirtiéndose en semanas, y Yoosung no entendía en qué momento todo se había vuelto tan diferente. Cada visita era más fría que la anterior, y Saeran ya no respondía como antes. Era como si hubiesen retrocedido al comienzo, donde solo se dedicaba a ver por la ventana e ignoraba su presencia, aun sabiendo que estaba allí. Empezó a preguntarse qué habría hecho mal para que todo se volviera de esa manera, pero no podía encontrar respuesta. Solo lograba asociarlo a aquel día en que comenzó a hablar de Rika y V, cuando le preguntó sobre su carrera. ¿Acaso eso lo había hecho enojar? ¿Seven tenía razón con que era un tema delicado para él, quizás? Si ese era el caso, entonces entendía que se molestara, aunque no pensó que el cambio sería tan brusco.
Le dolía mucho lo que estaba sucediendo, sobretodo porque Saeran se había vuelto alguien muy importante y especial para él. No tenía muchos amigos fuera de la pantalla, y para él, Saeran era eso y mucho más. Se sentía agradecido de que alguien con su pasado hubiese confiado en una persona común y corriente como él. Era diferente a la amistad que tenía con Saeyoung. Saeran... le hacía sentir algo más que eso. Junto a él sentía que podía hablar de lo que fuese y él iba a escuchar, aunque no le interesara el tema. Lo notaba, ya que parecía ser una persona observadora y atenta desde el inicio, a pesar de su indiferencia.
Día tras día de visita, intentaba mantener el hilo de la conversación, pero la indiferencia del gemelo menor le provocaba querer verlo atentamente esperando a que este volteara a mirarlo a los ojos, como antes... pero esto no sucedía.
Cierto día, mientras Yoosung intentaba hallar un tema de conversación en lo que batallaba con el rechazo de Saeran, comenzó a desesperar.
¿Qué podía hacer?
-Sabes... Quizás esto no te importe, pero yo no tengo muchos amigos -comenzó a decirle-. Cuando iba a la escuela era diferente, allí era bastante popular, pero luego de entrar a la universidad todo cambió... Quise cambiar mi imagen, e incluso encontré un pasatiempo que es el LOLOL... Yo... no le he dicho esto a nadie más, pero la verdad es que siento mucha envidia de las personas como ustedes. Jumin, Zen, Jaehee, Seven, Rika, hasta V... y de ti también -su voz se quebró un poco, haciendo que Saeran volteara a verlo disimuladamente luego de semanas pretendiendo ignorarlo. Entonces notó que Yoosung hacía lo posible por aguantar un puchero, parecía que quería llorar-. Yo soy solo una persona común, sin gracia. No tengo grandes talentos más allá de jugar todo el día. Si no fuese por la universidad, sería un vago total... Duele mucho pensar en que eres un bueno para nada, en que jamás alcanzarás a quienes admiras por más que te esfuerces. Y duele aún más cuando a quien quieres alcanzar insiste en alejarse constantemente de ti. Yo... Ah, no sé qué hago diciendo todo esto, debo estar haciendo el ridículo -acabó de decir, cubriéndose el rostro con ambas manos.
Realmente sentía que estaba haciendo el ridículo, pero justo cuando iba a resignarse e irse corriendo, una presencia lo alertó.
Se quitó las manos del rostro, y pudo ver que Saeran estaba a pocos centímetros de distancia. Contuvo un grito ahogado, ya que ni siquiera notó cuando este bajó de la cama y se agachó frente a él.
Qué mal día para sentarse en el piso y no en la silla de siempre, ¿eh?
Sus mejillas se encendieron, sentía que el corazón se le iba a salir del pecho. Los ojos de Saeran estaban fijos en los suyos un vez más, luego de semanas de rechazo.
¿Qué estaba pasando?
-Ah... -intentó articular.
-No eres alguien común.
-Qué dices... -murmuró, desviando la mirada hacia el piso.
-A mi parecer no eres alguien común. Ninguna persona normal hubiese insistido tanto conmigo.
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The Second Sun
Fanfiction¿De qué te sirve mirar el cielo, si jamás te detienes a pensar en el sol? O quizás... ¿tienes miedo de sentir la calidez del sol? Yoosung x Saeran fanfic. Disclaimer: Los personajes y parte de la trama pertenecen a Cheritz. El resto es de mi propied...