Un Dilema En El Tiempo

Miedos

Estoy de vuelta, es un capitulo muy cortito, pero la idea es ir retomando la historia de a poco. Ya la tenía bastante abandonada. Espero lo disfruten.

-Fantástico- comentó Snape con sarcasmo después de unos segundos y a Hermione entonces la invadió un gran sentimiento de culpa, al observar la mirada de James, supo que él se sentía exactamente igual.

-Parece que se está recuperando con rapidez- dijo la señora Pomfrey al ver aquello.-No se sorprendan si continua hablando durante toda la noche- volteó a ver a los tres chicos y al revisar sus heridas, añadió.-Le enviare una lechuza a Dumbledore para avisarle de su situación- y rápidamente salió de la enfermería.

Snape con gran esfuerzo se levantó de su camilla y caminó hasta donde estaba Lily, sentándose en la silla que estaba a lado de ella. James también se acercó y le dijo:

-Quejicus, no deberías sentarte ahí, recuerda que no debes ser visto con Lily, la gente podría pensar...-

-Me importa un demonio lo que la gente piense Potter- lo miró con severidad antes de añadir.-Además, yo soy el único que realmente le es leal en esta habitación- el sentimiento de culpa se incrementó tanto en Hermione como en James, pero este último no se quedó callado:

-¿Tú te atreves a hablar de lealtad? Después de todas las veces que la lastimaste e incluso la llamaste sangre sucia ¿lo olvidas? Eres el menos indicado para hablarnos de lealtad- eso pareció enfurecer a Snape.

-Tú no sabes absolutamente nada de mí, nunca fue mi intención....-

-Pero lo hiciste ¿no?-

-No tengo que explicarte nada a ti-

James abrió la boca para decir algo más, pero en eso escucharon a Lily murmurar cosas en voz muy baja y volvió a repetir el nombre de James. Snape, quién había regresado su atención a ella, comentó:

-No te la mereces- James en esta ocasión solo bajo la mirada un poco avergonzado pues sabía que en eso tenía razón. Hermione lentamente se acercó a él y colocó su mano en su hombro, James tomó dicha mano con una de las suyas para darle un beso en el dorso. Sin decirle nada, la llevó al otro lado de la enfermería para que Snape no pudiera escucharlos y en cuanto se sentaron en una de las camillas, James comentó:

-Él tiene razón. Ella no se merece esto- miró sus manos por un momento y añadió.-Lo peor de todo es que no me arrepiento de nada- miró a Hermione a los ojos y tomó su rostro entre sus manos.-Temí perderte Jean-

-Todo esto es mi culpa James- se alejó de él.-Si yo jamás hubiera venido aquí...-

-Hubieras muerto- la interrumpió James.-Has hecho bastante por el mundo mágico viniendo aquí, nos has dado ventaja, has prevenido tragedias...-

-Pero también he arruinado cosas que deberían de haber sucedido-

-Si te refieres a lo de Lily...-

-Sí, me refiero a eso. Tienes que olvidarte de mí James, entiéndelo-

James soltó una risa desganada.

-Creo que ya es algo tarde para eso- Hermione se alarmó al escuchar aquello y James lo notó porque rápidamente añadió:

-Es la verdad Jean, aunque no quieras aceptarlo, yo...- la miró fijamente y Hermione pareció entender lo que iba a decir porque le pidió mientras cerraba sus ojos.

-No James, no-

-Jean mírame- ella abrió los ojos y al encontrarse con esos ojos cafés cargados de emoción, finalmente lo escuchó decir:

-Te amo- Hermione sintió como si su corazón se detuviera en ese instante y su respiración se aceleró. Una lluvia de emociones la invadió por completo: miedo, sorpresa, incertidumbre pero sobre todo no podía negar que sentía dicha y felicidad. En ese momento se dio cuenta que ella también lo amaba, como nunca antes había amado a alguien.

Se quedaron en silencio por unos segundos, hasta que James volvió a hablar:

-Esa es la verdad Jean y Snape tiene razón, Lily no se merece estar con alguien que ama a otra persona- aunque Hermione sabía que tenía razón, no podía aceptar la idea de que Harry no nacería por su culpa.

-Pero Lily te quiere, tú escuchaste la manera como dijo tu nombre-

-Con mayor razón, no se merece esto-

-Pero Harry...-y sin poder evitarlo, soltó unas lágrimas.

-Ven- James la abrazó con fuerza y Hermione repitió una y otra vez:

-Él tiene que nacer- se quedaron así por un rato antes de separarse: -Tienes que volverlo a intentar James- él suspiró con pesadez y añadió:

-Lo pensaré- la miró con seriedad antes de añadir.-Pero si decido continuar con esto, le diré lo que siento a Lily y ella también tendrá que tomar su decisión- Hermione asintió ya que sabía que aunque quisiera, ya no podía forzar más la situación. Quisiera o no, el destino de Harry Potter ahora estaba completamente en las manos de James y Lily.

-Gracias- realmente agradecía eso y James asintió.

-Será mejor que descansemos un poco, tuvimos un día bastante pesado hoy- Hermione asintió y ambos se dirigieron a sus respectivas camillas sin decir más.

A la mañana siguiente, Hermione despertó sintiéndose mucho mejor de sus heridas, pero al abrir los ojos casi le da un infarto al ver a Dumbledore parado a lado de su camilla.

-Buenos días señorita Clearwater- dijo Dumbledore con seriedad.-La señora Pomfrey me dio aviso de su estado. ¿Le importaría acompañarme a mi oficina para que me informe con detalle lo sucedido?- Hermione aceptó y lo siguió hasta su oficina, donde le explicó con detalle de lo sucedido el día anterior y además le entregó la caja con el anillo.

- En el futuro, usted encontró alguna forma de abrirlo- Dumbledore revisó la caja con detenimiento.

-Es posible que pueda hacerlo nuevamente- guardó la caja en su escritorio y añadió: - Tengo que decir que fue bastante arriesgado lo que hicieron ayer-

-Lamento mucho haber llevado conmigo a los demás, fue muy irresponsable de mi parte-

-No se agobie por eso señorita Granger, ellos también tomaron su decisión- en eso pareció recordar algo.-Hablando de decisiones- se quitó un collar que traía puesto, el cual Hermione inmediatamente reconoció.

-El giratiempo-

-Tal como lo prometí, lo llevé con un conocido mío experto en giratiempos y finalmente lo pudo arreglar. Al parecer tenía un hechizo bastante poderoso para no volverse a usar.- se lo entregó a Hermione.-Quiero agradecerle todo lo que ha hecho por nosotros señorita Granger y lo menos que puedo hacer es darle la oportunidad de regresar a su tiempo, si así lo desea- Hermione miró el giratiempo y se lo colgó.

-Muchas gracias- Dumbledore le sonrió.

-Espero que tome la mejor decisión para su futuro, pero recuerde que podría haber consecuencias en dado caso de usarlo nuevamente- Hermione asintió y después de un momento, Dumbledore añadió -El día de hoy, usted y sus amigos tienen mi autorización para faltar a clase para que terminen de recuperarse-

-Se lo agradezco profesor. Iré a avisarles de inmediato -caminó hacia la puerta y justo cuando estaba por salir de la oficina, regresó su atención a Dumbledore y dijo:

-Profesor olvide decirle, cuando abra la caja, por nada del mundo se ponga ese anillo- Dumbledore sonrió levemente.

-No se preocupe señorita Granger, un hombre sabio no comete el mismo error dos veces- Hermione asintió antes de dirigirse a la enfermería.

Al llegar, lo primero que vio fue a Lily finalmente despierta y a James a su lado platicando animadamente, mientras que Snape estaba de pie junto a ellos, mirándolos con recelo.

"Así es como las cosas deben ser" intentó convencerse a si misma una vez más.

El próximo capitulo intentaré que sea mucho más largo y de verdad muchas gracias por el apoyo.