Una vez que llegue a mi casa, pensé. Pensé en Tom sobre todo. Él era un muy lindo chico, pero no quería nada con él. Bueno, más bien, no podía permitirse nada con él. Yo buscaba una relación, una verdadera relación, no sólo acostarme con un chico. Eso no era lo que necesitaba. Y sabía que Tom era la clase de chico que no buscaban nada serio. La clase de acostarse para luego no saber de ella nunca. Sabía eso de primera mano, ya que él mismo me lo dijo, no lo negó. Y estaba bien, odiaba las mentiras, era mejor que sea sincero pero a pesar de eso, y a pesar de lo lindo que él fuera, no podía permitirme estar con ese tipo de relación, o más bien, en ese tipo de no relación.
No quería que Tom no volviera a hablarle, pero sabía que no podía acostarse con él, así que eso es lo que le plantearía al día siguiente ni bien lo viera. Quería proponerle amistad, y ver lo que él tuviera para decirle.
Pero ahora mismo, necesitaba hablar con mi hermano.
Llegue a su habitación y entre si tocar, siempre hacia lo mismo, y algún día, sabía que iba a arrepentieme de lo que viera cuando entrera. Pero por suerte, hoy sólo estaba hablando por teléfono, Sarah?
-Lo sé nena, iré por ti. -Nena, diuj.
-Cam, necesito hablar contigo. -Él sólo me ignoro y rió por algo que dijo la mujer al otro lado del teléfono.
-No, en serio iré a verte Amber.
Ah, ahora era Amber.. Lo siento Sarah.
-CAM.
Él tapó el auricular del teléfono para que Amber no escuchara y moduló "luego".
Bien, hora del plan B. Fui a buscar a mi habitación una pollera que había comprado y era diminuta. Tenía pensado en ir así a alguna fiesta, pero no se la había mostrado a Cam porque la mataría. Ahora era diferente. Salí fecidida hacia su cuarto y se la mostre mientras decía:
-Me invitaron a una fiesta y me pondré está, que dicen Cam?
Cam levantó la vista con una mirada aburrida en su rostro, y cuando vio la pollera su expresión cambio, para pasar a ser un seño fruncido y una mirada dura hacia ella. Después habló al teléfono
-Te llamo luego nena. -Y cortó.
-Al fin. -Dije yo. Pero él no había dejado de mirarme.
-Dame la pollera.
-Qué?
-La pollera, Lindsay. No saldrás así de casa. Damela.
-Cam, no voy a ir a ninguna fiesta. era sólo para que cuelgues el telefono porque necesitamos hablar.
Su mirada cambio a preocupación y pregunto:
-Qué pasó?
Entre a la habitación y me sente en un sillón que tenía cerca de la cama. Así quedamos sentados frente a frente, y dije:
-Cam, necesitamos hablar sobre lo que hablamos en el auto. Sabes, no soy más una niña, sé que seré siempre tu hermanita, y tu siempre seras mi hermano mayor. Pero necesitas controlar eso.
Él suspiro -Lo sé, sé que te cuido mucho, Lin. Y sé que no debería porque sabes cuidarte. Pero no puedo dejar de hacerlo. Te amo, y no quiero perderte. No me gusta que viajes en moto porque sé que es peligroso, se fue papá Lin, y no quiero que te vayas tu también. Tu y mamá son lo único que me queda, y voy a hacer lo posible para cuidarte y que estés bien sabes? Eres mi pequeña hermanita menor. -
No pude evitarlo y lo abrace. Lo abrace muy muy fuerte. Él no era de expresar lo que sentía, está era la primera vez que se había abierto tanto del tema de papá. Y estaba feliz de que me cuidara así, lo entendía. Debería hacerlo. Él sufrió mucho por papá, y no quería perder lo único que tenía, mamá y yo.
-Está bien Cam, te entiendo. Te amo también. Y gracias por cuidarme así hermanito.
Dije mientras me alejaba con los ojos llenos de lagrimas.
Él me miró un poco triste pero luego sonrió y dijo:
-Tu eres mi hermanita aquí no yo. Ven aquí. -Me agarro de la cadera y me puso bajo el brazo como si fuera una bolsa. Grite y reí mientras salía corriendo al piso de abajo gritando "VAS A VER LO QUE HAGO CON ESA POLLERA AHORA". Ese era mi hermano mayor.
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Sobre todo, mía.
RomanceÉl era un chico respetado, eso se notaba. Pero también era un mujeriego. Tenía a todo el colegio atrás, y sí era hermoso, pero peligroso y sabía que era mejor mantenerse alejada, o por lo menos intentarlo.