One Shots! *Larry Stylinson*

Carpool Karaoke

—Listo chicos pasemos por algo de comida.

El auto de James se estacionó en un lugar exclusivo, detrás del restaurante de comida rápida, el cual estaba detrás de un viejo hotel, el cuál estaba detrás de un puente enorme, el cuál estaba fuera de servicio ya que estaba inestable. Por lo cual no se veía nada. No donde ellos estaban.

Liam y Niall salieron de sus asientos bromeando acerca de las chaquetas de mezclilla que anteriormente habían usado.

—Amigo, quiero una cerveza.-exclamó el rubio enganchando su brazo en Liam quien se quitó instantáneamente.

—Niall deberías de dejar eso.-regaño Liam tornándose serio.

Pero en broma.

—Dios Liam casi siempre bebo.-se defendió con indiferencia jalándolo más hacia sí.

—No eso... Deberías de dejar de abrazarme así hermano, que va a pensar la gente.

Sus carcajadas llegaron hasta la entrada del restaurante, ahora eran sólo risas lejanas. Bueno para dos.

Harry y Louis salieron cohibidos del coche, ambos por puertas separadas. Los sollozos de Louis se escuchaban desde el otro lado de la camioneta.

James colocó los seguros y miró a Harry asintiendo. Les daría la privacidad a los chicos.

—Ehhh... Chicos ahora los alcanzamos, debo hablar con Tommo.-anunció el rizado a James y los demás.

Se giró y caminó hacía donde provenía el llanto. Louis estaba sentado en una roca frente al enorme árbol que había en aquel "abandonado" restaurante. Sus hombros temblaban y sus manos tapaban sus vidriosos y rojos ojos. Harry odiaba esto. Odiaba no ser lo suficiente.

—Amor...

—Harry vete...

—Bebé...

—Harry no, ¿Quieres cerrar la maldita boca?

Su voz quebrada alcanzó a cortar el corazón de Harry. Louis pasaba por esto seguido.

—Lou tu sabes qu....-comenzó lentamente.

—Que saldremos de esta.-habló con voz y sonrisa fingida.-que nuestro amor es fuerte, que seremos felices, que lo lograremos, ya estoy harto Harry. Harto. Estoy cansado, estoy agotado. Estoy cansado de tanta mierda.-terminó sorbiendo por su nariz intentando controlar el llanto, Harry se acercaba a él por la espalda, hasta que llegó y se colocó de rodillas detrás de él.

—I don't care what people say when we're together... You know I wanna be the one who hold you when you sleep...

—Hazz basta...-interrumpió.-Me lastimas...

—Maldición.- dijo por lo bajo y colocó una mano en el hombro de su acompañante, el cuál instintivamente se aparta un poco, más no evita aquel íntimo roce.

Su llanto ya no era tal, pero las lágrimas caían silenciosas encharcando sus, ahora ya rojas mejillas.

—I just want it to be you and I forever... -siguió el rizado.

Harry cantaba suavemente en comparación al alocado ritmo de la canción, quería tranquilizar a Louis.

En cierto momento el ojiazul se volteó y se aferró al menor con todas sus fuerzas.  En un abrazo necesitado.

—Harry estoy cansado de no poder tomar tu mano delante de la gente, de tener que fingir que no nos llevamos bien cuando sólo estamos en un maldito carro.-lloró en su hombro.- de no poder mirarte, de no poder hacer que la gente sepa que te amo... y-y  no me importa el dinero ya-a no Harry ya no....-Sus sollozos caían con fuerza sobre el hombro de su amante.- No nos merecemos esto Hazz... N-no...

Su cuerpo temblaba debido al llanto, Harry estaba sin expresión alguna, no podía decir nada, no podía hacer nada. Nada que no fuera sostener a Louis hasta sus últimas lágrimas.

Cuando recuperó el habla.

—Shhh tranquilo... Yo también estoy harto bebé... Aquí estoy tranquilo...-decía mientras con suavidad acariciaba la cabellera del mayor.

Louis asintió con torpeza, rodeando el cuello de Harry con sus temblorosas y un poco húmedas manos.- Ay Hazz...

Ambos cruzan miradas. Miradas cargadas de todo.

—Louis Tomlinson.-Comenzó Harry con ojos cristalizados, pero sin derramar una lágrima.-Algún día. Espero muy cercano. Toda esta mierda del contrato se va a acabar, y tu y yo amor.-murmuró quitando las manos del castaño de su cuello y tomándolas en las suyas mientras las besa con los ojos cerrados, besa el 28 tatuado en sus dedos.- Seremos libres. Y llegaremos al punto de reírnos de todo lo que pasamos, ¿Sí? De las mentiras, de los contratos, de los falsos romances. De todo amor, porque lo merecemos.-murmuro mirándole a los ojos

Las lágrimas habían cesado, ahora era un casi incontrolable problema de aspirar por la nariz cuando se debe. Harry acunó las mejillas del más bajo y casi podía jurar que lo escuchó ronronear, se acercó más a él y besó su frente. Apretó sus ojos con fuerza.

—Louis... Te Amo... y no voy a parar de luchar hasta que todo esté bien, hasta que estés bien. Hasta que estemos bien.-consuela abrazándolo suavemente.

—Soy un idiota.

—No amor... La gente que trata de detener esto es idiota. Tú eres un tonto. Nada más un tonto no se daría cuenta de lo inteligente y valiente que es. Pero eres mi esposo. Así que...

—Cállate Harry me apenas, eres un tonto.-regañó el mayor sonrojándose y riendo por fin.

Las pequeñas sonrisas con hoyuelos y todo, se hicieron presentes.

—Pero soy tu tonto.-respondió el rizado.

Tomados tímidamente de la mano entraron al restaurante para reunirse con los demás.

Liam se levantó de su asiento en cuanto vió a la pareja entrar.

—¿Todo bien Tommo?.-cuestionó el ojimiel acercándose rápidamente a ellos.

Louis levantó la vista y sonrió.

Volteó hacia Harry quién ya lo estaba mirando y regresó la vista hacia su amigo.

—Perfecto Liam.